Punto de vista de la Familia Montenegro: Hace mucho tiempo, decidí entregar a mi hija a una pareja enamorada que vi en un callejón, mirando las tiendas de ropa. La razón… En ese entonces me habían enviado varios mensajes amenazando con matar a mi hija si no rechazaba la propuesta de un gran trabajo exitoso, pero no podía hacer nada. Quien manejaba todo era mi esposo en ese entonces. Él no quería dejar perder ese negocio, esa oportunidad que le podría asegurar su posición en el mundo empresarial. Y lo peor de todo, fue que no me preguntó, no me consultó. Me lo dijo en voz baja, entre dientes, como si fuera lo más normal del mundo. La decisión estuvo fuera de mis manos. Cuando recibí la amenaza, mi corazón se detuvo. El miedo me hizo ceder, hacer lo que no deseaba. Aquella pareja... La vi en ese callejón, tan desesperada por un hijo, tan ansiosa por recibir la bendición de tener una familia propia, que la decisión fue toma
Punto de vista de Dan: Hoy es el día en que voy a dar el siguiente paso. Lina no lo sabe, pero ya está en mis manos. Como dije antes, no la quiero realmente. Todo lo que quiero es aprovechar su apellido, su poder. Eso es lo que me motiva. Sin embargo, hay algo en su presencia que me intriga. Quizás sea su inocencia, esa forma de mirar al mundo como si nada fuera a tocarla. O tal vez, es simplemente que mi ego no soporta ser rechazado, y ella me ha mostrado indiferencia de una manera que ninguna otra chica lo ha hecho antes. La primera vez que hablé con ella, noté cómo evitaba mis miradas, cómo mantenía su distancia. A otras chicas les bastaba una sonrisa para que se derritieran, pero Lina... Lina es diferente. Tal vez por eso me molesta tanto, tal vez por eso quiero más de ella. Es un desafío, y me gustan los desafíos. Al verla en los pasillos, me acerco a ella sin pensarlo dos veces. Estoy preparado. La miro de arriba a abajo con ese ges
Punto de vista de Lina: ¿Qué está pasando? No puedo dejar de pensar en eso mientras camino por los pasillos de la escuela, mirando a mi alrededor como si esperara que alguien me diera una respuesta. Mis pensamientos están a mil por hora, y no logro ordenar lo que siento. Todo ha cambiado tan rápido. En los primeros días en la escuela, Dan y Derian fueron como un huracán, pasando por mi vida sin piedad. Derian con sus burlas constantes y su actitud de superioridad, y Dan... Bueno, Dan parecía ser tan amable, tan perfecto. Pero... no puedo entender por qué de repente me prestan tanta atención. Es cierto que Derian ha cambiado. Al principio se divertía molestándome, pero últimamente ha estado más callado. De hecho, me sorprendió mucho que ni siquiera me dijera nada hoy. Si antes era tan insistente, ahora parece haberse alejado, casi como si no le importara. ¿Por qué? No lo sé. Tal vez simplemente se can
Punto de vista de Lina: El día parece más largo de lo habitual, y aunque intento concentrarme en mis clases, mis pensamientos siguen volviendo una y otra vez a la misma pregunta: ¿Por qué Dan está tan interesado en mí? Cada vez que me encuentro con él, mis emociones se vuelven un caos. Pero es en los pasillos, cuando veo a sus admiradoras, cuando todo se vuelve mucho más difícil de manejar. Un grupo de chicas se me acerca durante el recreo. Son las mismas que siempre me miran con superioridad, como si estuviera invadiendo un territorio que no me pertenece. Ellas son perfectas en todo: bonitas, populares, y ahora parece que Dan las ha dejado de lado por mi culpa. No puedo evitar sentirme pequeña bajo su mirada crítica. —¿Vas a salir con Dan este fin de semana, Lina? Pregunta una de ellas, una de sus amigas más cercanas. Su tono es casual, pero la forma en que me mira me hace sentir como si me estuviera juzgando por cada palabra.<
Punto de vista de Lina - La cita con Dan: El día finalmente llega, y aunque debería estar emocionada por la cita con Dan, una extraña sensación me invade. Laura, mi mejor amiga, me ayuda a prepararme, eligiendo un vestido sencillo pero elegante, algo que me haga sentir bonita, pero sin llamar demasiado la atención. Mientras me mira, la emoción brilla en sus ojos. —¡Te vas a ver increíble! —me dice mientras arregla mi cabello con delicadeza. Agradezco su apoyo, pero mi mente sigue dando vueltas. En lugar de concentrarme en la cita con Dan, mis pensamientos vuelven una y otra vez a Derian. La forma en que se interpuso por mí, cómo se enfrentó a las chicas sin dudarlo, y la pequeña sonrisa que me dio cuando aceptó la paleta de hielo. Todo eso parece estar en mi cabeza, recordándome que lo que me hizo sentir en ese momento fue algo mucho más importante que cualquier cita. Cuando llego al lugar acordado, Dan ya está allí, esperando con una sonrisa en el rostro. Es guapo, seguro de sí m
Punto de vista de Lina - La cita con Dan continúa: El silencio entre Dan y yo se extiende. Las palabras que intercambiamos son cortas y vacías, como si estuviéramos actuando en una obra que ya no sabemos cómo continuar. Cada vez que miro a Dan, me parece ver un esfuerzo sincero por acercarse, pero mi mente sigue vagando. No puedo evitar pensar en lo que sucedió con Derian, cómo se interpuso por mí, cómo me hizo sentir en tan poco tiempo. Dan, aunque encantador y atento, no consigue capturar mi atención como antes. De repente, una explosión de luces ilumina el cielo, los fuegos artificiales estallan con una fuerza vibrante, como si el universo intentara distraerme de mis pensamientos. Pero ni siquiera el espectáculo es suficiente para cambiar lo que siento. Mis ojos se desvían hacia la torre de observación, y por un segundo me olvido de Dan. Allí está Derian, en lo alto, observando el cielo con una expresión que no puedo descifrar, pero que en este momen
Punto de vista de Derian - Observando a Lina y Dan: Desde la altura de la torre de observación, todo parece distinto. Las luces del parque se mezclan con los colores vibrantes de los fuegos artificiales, pero nada de eso captura mi atención. Mis ojos están fijos en ellos. En Lina, luce tan perfecta que a kilómetros puedo verla, las luces de los fuegos artificiales la hacen lucir mucho mejor, pero... Esta con Dan. Mi pecho se siente pesado, como si todo el aire que intento respirar se estuviera escurriendo entre mis pulmones. Ella está allí, tan cerca de él, mirando al cielo como si no existiera nadie más. Dan está a su lado, sonriendo, hablando, intentando de alguna manera alcanzar lo que yo nunca pude. Mis manos, que están apoyadas en la barandilla, se aprietan con fuerza, como si eso pudiera detener el torrente de emociones que me invaden. No sé qué estoy sintiendo. No quiero saberlo. Los veo acercarse, él se inclina hacia ella con esa confianza que siempre ha tenido. Lina no s
Punto de vista de LinaAl día siguiente de los fuegos artificiales, la inquietud seguía latiendo en mi pecho como una corriente eléctrica que no se apaga. Había intentado convencerme de que todo estaba bien, que el beso con Dan había sido solo un momento, algo pasajero, pero la confusión persistía. La imagen de Derian, su mirada intensa desde la torre de observación, me perseguía como una sombra que no podía deshacerme.Mi teléfono vibró en la mesa, interrumpiendo mis pensamientos. Era un mensaje de Laura: "¿Te apetece vernos hoy? Te noto rara, ¿qué pasa?"El solo hecho de leer su mensaje me hizo sentir un alivio extraño. Laura siempre había sabido cómo leerme sin necesidad de que yo dijera una palabra. Tal vez necesitaba un respiro, alejarme de las dudas y la confusión por un rato. Sin pensarlo mucho más, decidí aceptar. Necesitaba hablar con ellos, mis dos mejores amigos de toda la vida, los que siempre estaban ahí para escucharme sin juzgarme.El café donde solíamos encontrarnos er