Miro a mi alrededor para encontrar algo para acabar con mi vida y lo único que encuentro es abrir la puerta y lanzarme, pero tengo miedo a las alturas y dudo que sea capaz de matarme de esa forma, cuando el infarto por sentir como caigo acabará conmigo antes que el mismo golpe.
— ¿Qué buscas exactamente, querida? ¿Acaso estás buscando la silla más cómoda para poder tener sexo conmigo? — pregunta Noah.— Deja de pensar en tonterías.— No son tonterías si nos generan tanto placer. — dice Noah.— ¿Es posible que olvides lo que hicimos? — pregunto y él niega de inmediato.— Jamás podré olvidarlo, mi querida Marcela.‘¡¿Por qué me pasa esto a mí?!’ grito mentalmente.— Dijiste que quieres empezar una nueva relación conmigo, ¿verdad?— S&iacu‘¿Por qué Dios me está dando las batallas más difíciles a mí? ¿Acaso no se ha dado cuenta que soy la más tonta de sus guerreros y no la más fuerte?’ Me quejo mentalmente.El deseo de morirme en estos momentos es demasiado fuerte, pero no tan fuerte para hacerlo, por eso, debo esforzarme para no desmayarme por tanta tensión.— Es justamente eso lo que me impide estar contigo. A mí me gusta ser reservada. Pero tú estás haciendo justamente lo contrario Noah.— No me mientas Marcela, porque sé perfectamente que a las mujeres les gusta ser resaltadas y que su hombre hable constantemente de ellas.— Sí, pero no así. Dudo que haya una mujer que le interese que algún hombre esté hablando de cómo tienen sexo.— No es para tanto, solo es mi hermano y ya estoy acostumbrado a ello.‘¿C&
Bajó del avión siendo escoltada por los dos y me encuentro con varios hombres vestidos completamente de negro y armados incluso en partes donde no creí que uno podría tener un arma.— ¡Bienvenidos, señores Thompson! — dicen todos al unísono, afortunadamente, esta vez no me encuentro con una familiar desquiciada.— Un momento, chicos, si realmente había un enfrentamiento en la isla, ¿no creen que necesitan salvar a Ginny?— Siendo honesto contigo, Ginny era la que más segura se encontraba porque nadie puede entrar a los calabozos a menos que sea un Thompson. Por lo que, por mucho que desearan ir hasta donde ella se encontraba para matarla, no era posible.— Entonces ella podría morir por falta de comida, ya que, dudo que después de este enfrentamiento alguno de tus hermanos se acuerde de alimentar a Ginny.Los chicos suspiran profundo como si lo qu
Como veo las cosas, mi vida no será calmada por lo menos, hasta que confirme con Nick lo que sucedió y que prometa que no le dirá a su hermano. Porque es justamente eso lo que necesito de él en estos momentos.Así que, fingiendo preocupación por sus heridas, analizo todo su cuerpo en detalle, pero, al no tener marcas de nacimiento o cicatrices viejas, no puedo tener un punto de referencia que me ayude a diferenciarlos.— Chicos, he tenido una duda desde hace mucho, anteriormente los diferenciaba por su forma de actuar, pero, ahora que los he conocido un poco más, diría que también en eso son similares, por eso, quiero saber si hay una forma de diferenciarlos y así…— No la hay. — dicen ellos al unísono.— Debe haberla.— Si la encuentras, nos avisas, ¿de acuerdo?— ¿Cómo pueden decir eso, chicos? Ustedes deben sabe
Nick me observa extraño y no me sorprende, porque la mayoría de las veces no he mostrado interés en hablar con él y ahora lo alejé de su hermano para poder estar a solas.‘Seguramente piensa cosas pervertidas cuando la realidad está lejos de ello.’ Me digo mentalmente.— Solo dime donde podemos hablar.— Después que nos saquen sangre podemos ir al estudio, en ese lugar no hay cámaras ni mucho menos, algún micrófono. — dice Nick y yo me limito a asentir deseando que podamos hablar.Como lo ha dicho Nick, nos sacan muestras de sangre y nos hacen preguntas de rutinas, mientras atienden las heridas que tenemos. A Nick, le extraen las balas sin llevarlo a un quirófano, mientras yo observo como cosen sus heridas como lo hicieron con la herida que me causó Ginny.— ¿Es normal ser heridos en este negocio? — pregunto y él asiente
En mi mente me digo muchas cosas, pero, mi cuerpo disfruta explorando su cuerpo como si no estuviera frente al hombre que podría matarme. Por lo que, lo empujo aunque hacerlo hace que lastime mis heridas.— ¡Es suficiente! — digo molesta.— ¿Qué pasa? ¿Necesitas el ambiente de fiesta para dejarte llevar?— Por culpa de tus ataques mis heridas no han sanado como corresponde. — me quejo.— ¿Es eso lo que te preocupa, Marcela? Comprende que con o sin mi intervención, eso no va a sanar tan rápido. — dice Nick.— Aun así…— ¿Por qué te niegas a tener sexo conmigo? Ayer lo disfrutaste mucho. — dice él.‘Entonces si tuve sexo con los dos.’ Digo sintiéndome la mujer más sucia del mundo y es que lo soy, porque muchas tienen sexo con varias personas, pero, dudo que alguna haya tenido s
Apenas los dos salen, una mujer me saluda y me dice que me escoltará hasta mi habitación. Sintiendo que voy camino al matadero, observo como todo aquí es metálico y sin alguna decoración alegre… justo como está mi vida ahora.— Quiero preguntar esto, porque confío en que siendo mujer como yo, me ayudarás un poco.— No le diré dónde estamos, como podría escapar de un lugar que es imposible hacerlo o cualquier cosa que afecte a los príncipes. — dice la mujer.‘Oh, por todos los cielos.’ Me quejo mentalmente.— Entiendo. — susurro entrando a una nueva jaula donde ni siquiera hay ventanas.— Nos tomamos en serio la seguridad, por lo que, incluso los baños tienen cámaras. La única diferencia es que esas grabaciones solo son vistas por los señores de la casa, en este caso, los gemelos Thompson.
El miedo me invade al no saber por qué ha venido hasta aquí para llevarme afuera cuando se han estado escuchando detonaciones recientemente. Por lo que, de inmediato retrocedo. Pero, eso a él no lo detiene. Ya que, camina hacia mí.— No quiero ver. No quiero saber qué es lo que están haciendo, así que por favor, déjame aquí.— Dijiste que no vas a estar con ninguno de nosotros hasta comprobar que realmente podemos protegerte, así que, quiero mostrarte con hechos, porque sería bueno que yo te protegiera.— Otro día me muestras. Estoy cansada.— Tiene que ser ahora, he descubierto ciertas ratas de laboratorio que necesito eliminar. Así que, es el mejor momento para hacerlo. — dice él.Soy consciente de cuando una guerra está destinada para que yo la pierda, por eso, dejo que él agarre mi brazo y me lleve hasta la parte m
La oscuridad me rodea solo por breves segundos, porque al poco tiempo observo a cada uno de los hombres de lo que siento tanto temor. Ellos caminan hacia mí riéndose de una forma que causa mucho miedo.Aunque intentó hablar para decirles que se alejen, mi voz no sale. Ellos tampoco hablan, sino que en sus manos aparece explosivos y unas herramientas que dudo que sea para hacer algo bueno.De inmediato intentó correr, pero por mucho que me esfuerce soy alcanzada rápidamente, por eso, cada uno comienza a torturarme a su manera. Por eso, uno rodea mi cuerpo con explosivos, mientras Nick me arranca la piel.— ¡No! — grito agitada.— Finalmente, despertaste. — dicen los gemelos a cada lado de mí, justo como los vi antes, la única diferencia es que no tienen explosivos u otras herramientas de tortura, pero eso no quiere decir que no pueden conseguirlas.— No me toquen, por favor.<