LAURA TORRES Ángel y yo seguimos teniendo la misma relación, aunque cada día parece una despedida. Él ha intentado que pasemos tiempo juntos, aunque los dos tenemos ocupaciones que atender. Volví a trabajar en la tienda del señor Lucio y él cumplió su palabra de esperarme por tanto tiempo. Vi que él había diseñado muchas cosas en el tiempo en el que no estuve trabajando y recién allí me di cuenta de cuánto tiempo estuve ausente. Ángel va al casino en las horas en las que estoy trabajando y luego de que mi horario termina pasamos tiempo juntos. Hemos ido a cenar, de compras y también retomamos las lecciones de conducir. Por alguna razón no hemos hablado sobre la despedida. Todo se vuelve tenso entre nosotros y el doctor de mi padre es el que se hace participe de la conversación que no quiero tener. Los celos de Ángel son evidentes y acabamos discutiendo por todo y por nada a la vez. Realmente odio esto. Cuando llegamos a la última semana juntos todo se vuelve más tenso en
LAURA TORRES -Demonios- Maldije antes de levantarme de la cama mucho más temprano de lo que lo haría normalmente Después de haber estado durmiendo con Ángel por tantos días y de que él me abrazara continuamente dándome calor era extraño estar sola. La cama es de ensueño y super cómoda, pero de pronto se sentía muy diferente. Yo tenía que acostumbrarme a estar sola después del tiempo en el que estuve acompañada. No tendría que gustarme haber pasado por todo lo que pasó. ¿Cómo es posible que haya conocido a un hombre como Ángel en una situación tan... terrible? Además si yo comienzo una relación tendría que ser habiendo cerrado el ciclo donde fui prácticamente comprada por él. Necesito tiempo. Necesito estar sola y aclarar lo que siento o acabaré volviendome loca. (.......) Una semana después de volver a estar sola, aún luchaba por dormir bien. Había dejado de extrañar el calor que Ángel me transmitía, pero no dejaba de soñarlo cada noche y de despertar demasiado agitada
NARRADOR Mientras Laura luchaba por comprender lo que estaba sintiendo, dos hombres tenían una acalorada discusión por ella que ni siquiera era consciente. -No me conoces, pero se bien quien eres tu- Lo sujetaba con fuerza de la camisa blanca que anteriormente lucía con algunas pequeñas arrugas después de su jornada laboral -No te conozco. Piérdete- Se soltó bruscamente del fuerte agarre del extraño -Eso no sucederá. Camina si sabes lo que te conviene- Abrió su saco mostrando el arma que llevaba en su cintura Con miedo, el indefenso trabajador abordó el costoso automóvil que lo esperaba. Él no sabía si moriría, pero no había manera de escapar. Él desconocido conducía alejándose del centro de la ciudad y se dirigía a un complejo de apartamentos. -¿Quieres algo de beber? Tu tienes algo que yo necesito y si llegamos a un acuerdo interesante podrás irte con una gran cantidad de dinero- Con temor escuchó -Estoy bien. ¿De que se trata esto?- Preguntó asustado -Me interesa Laura Torr
NARRADOR Ángel le sonrió a Laura. Él podía reconocer y también demostrar que la había extrañado demasiado. También la miró con preocupación y aunque se sentía bien con haberle obsequiado esas costosas fichas; también se sentía herido porque ella no era capaz de pedirle ayuda. Aunque deseaba nuevamente convivir con ella y tenerla en su cama cada noche, sabía que ella creía que si acudía a él nuevamente obtendría un acuerdo que los atara juntos. Eso no era cierto. -¿Podemos hablar a solas Lau?- La tomó del brazo con delicadeza y sin esperar una respuesta, comenzó a caminar con ella hacia su oficina Cuando llegaron y él cerró con seguro para evitar ser molestados, la besó. -Solo cambié dos fichas, ¿Estás molesto por eso?- Ángel negó -No Lau, no estoy molesto. ¿Tienes problemas?- Creyó erróneamente que había sucedido algo con su padre -El señor Lucio aumentaría mi sueldo, pero no pudo hacerlo. Gasté más dinero porque necesitaba comprar algunas cosas y luego el me dijo qu
NARRADOR En el cuarto, solo con la iluminación del fuego en la chimenea, nuevamente Laura y Ángel acabaron desnudos y enredados en las sábanas. Ellos realmente desconocían todo lo que estaba por suceder. Laura tenía un hombre realmente obsesionado esperando por ocupar un lugar de gran importancia en su vida y también algunos cómplices por obligación. -Quédate aquí conmigo- Ángel detuvo sus movimientos cuando terminó sintiendo como Laura aún temblaba por su arrollador orgasmo -Voy a quedarme a dormir, ¿No me invitaste?- Acarició su pectoral, sin verlo a los ojos. Necesitaba admirar su cuerpo, porque durante la relación no lo había observado, tan solo había sentido -Unos días conmigo. Puedo llevarte a trabajar y sabes que a mí lado no necesitarás nada- Dejó de acariciarlo y lo miró a los ojos con incomodidad -No. Quiero vivir por mi cuenta, ¿Entiendes? No quiero tu lástima ni tampoco discutir contigo- Ángel se contuvo para no decir algo que pudiera empeorar la conversación y aca
NARRADOR Laura fue a su trabajo. Había cuidado muy bien el dinero que había obtenido al cambiar dos fichas por su valor en el casino. Tenía la esperanza de que ese mes, su jefe pudiera darle el aumento que le había prometido. Al terminar su turno, ella ordenó algunas prendas que debían ser guardadas. Luego ayudó a Lucio a contabilizar el dinero que había en la caja y compararlo con las ventas de ese día. Todo estuvo perfecto, tal como siempre. -Laura, quiero agradecerte por todo el tiempo que has trabajado aquí, pero este será tu último pago- Su jefe evitó mirarla a los ojos cuando le entregó su paga -¿Por qué? ¿Hice algo mal?- Laura se sentía destrozada. No quería dejar de trabajar allí Hacía poco tiempo atrás, Lucio le había dicho que le aumentaría el sueldo, pero después no había podido hacerlo. Ella era testigo de que había más ventas y de que él trabajaba más vendiendo sus propios diseños. Ser despedida no tenía ningún tipo de justificación. Laura se fue después d
NARRADOR Laura fue a trabajar con los nervios a flor de piel. Se había vestido con el uniforme que le habían dado en la clínica. Estaba muy emocionada sabiendo lo que ganaría laborando allí. Su vida sería mejor y gracias al seguro médico que tendría podría ayudar a su padre si una nueva desgracia lo alcanzaba. Pensó en Ángel y vió que él no le había escrito ese día. Tampoco le había dicho lo que estaba mal con su nuevo jefe; no sabía de qué debía cuidarse puntualmente. Si tan solo él hubiese sido más claro, tal vez podría haber prevenido cualquier situación. Laura no sabía lo difícil que sería estar allí. Ella no estaba preparada para ver a algunas personas fallecer. Ayudando al doctor Alejo y llamando a algunos pacientes para su consulta, vió gente que estaba sufriendo. Su primer pensamiento fue que tal vez el casino podría haber resultado más fácil y menos emocional. El primer fallecimiento que ella debió documentar fue el de un abuelo que había llegado a apreciar. Ella
NARRADOR Laura iba prolijamente vestida cada día a su trabajo. Era muy diferente su trabajo a lo que ella había imaginado. Había pensado en comenzar en el casino al terminar su período de prueba de tres meses. Ver a los pacientes morir era muy doloroso para ella, por lo que prefería ver apostadores empedernidos alrededor de una mesa recibiendo cartas. El sueldo que cobraba era realmente bueno, así como también los beneficios adicionales. Allí no necesitaba usar ropa costosa ni ir maquillada, eso era un gran punto adicional. Aún así emocionalmente le afectaba. No estaba preparada para afrontar eso cada día. Ángel estaba molesto con ella, cada día más celoso y eso no le agradaba. No quería dejar de verlo, mucho menos que la extraña relación que tenían se viera afectada o, peor aún, que llegara a su fin. Laura comenzó a notar que Ángel era más controlador y eso no le agradaba. Ella no tenía idea de que él solamente estaba intentando protegerla. La falta de comunicación entre l