Penelope y Tae esperaban el ascensor con nervios, los dos permanecieron en silencio y sin mirarse, un clic anuncio que el ascensor había llegado a su planta, este abrió de par en par y los dos entraron sin prisa, Tae pulso el botón de la sexta planta, mirando de reojo a Penelope, le había atraído bastante, él había sido el último año un poco solitario debido a lo que paso con sus padres, lo había pasado realmente mal necesitando de ayuda profesional, el cuerpo de policía le había dado acceso a eso y estaba muy agradecido después de dos años, el solo quería centrarse en investigar más a fondo para encontrar al culpable. La proposición de Carlo había sido para él una bocanada de aire fresco, así su mente tendría con que distraerse y tendría los medios para tomar venganza, al ver las instalaciones y la discreción le gusto a ver aceptado, pero ahora viendo a "Danna" su nueva compañera estaba completamente feliz de haber aceptado. El ascensor llego al destino, se abrieron las puertas y Tae
Tae cerro el maletero y resoplo, se tomó su tiempo para meterse en el coche, es la primera vez que se ponía nervioso con una chica, ella estaba un poco reacia a él y eso le bajo un poco el ánimo, le había gustado, se animó así mismo a que no le importara tanto la mujer que lo esperaba en el coche, pero tenía tanta curiosidad por ella que no podia hacerlo.Se metió en el lado de conductor y se puso el cinturón, no la miro, pero Penelope si lo hizo, disimulando miro para la calle cuando el coche se puso en marcha, fueron casi todo el camino callado hasta que Tae no lo pudo evitar y hablo en voz baja. — ¿Desde cuando eres policía? Si estas en esta unidad ... — Tae no quito la vista de la carretera. — Solo un año ... — Penelope no sabía que decir, pero no le contaría la verdad. — Eres novata ... No deberías a ver aceptado un caso así, es peligroso. — Tae se mordió el labio después de decir eso, sabía que no le incumbía, pero no podia remediarlo. — Se que sera difícil, pero así conseguiré
Tae había avanzado solo un poco con el coche hasta el punto de que Dana no lo viera, intuía que no quería que la llevara a su casa por algún motivo de peso, "Quizá tenía novio" pensó Tae, eso lo desilusiono un poco, la observo un poco y la vio con su teléfono, seguramente estaba esperando a alguien, miro su teléfono y busco el número de Dana, viéndolo sonrió, tenía al menos una pequeña esperanza, se iba a disponer a arrancar de nuevo pero un coche llego a la puerta de comisaria donde Dana se subió, Tae se inclinó para ver mejor pero no consiguió ver al hombre al completo, nunca lo había visto antes, pero su tatuaje le llamo la atención, no esperaba que Dana saliera con alguien así, era rudo y tenía un aura peligrosa, quizá solo decía esto porque estaba un poco celoso. Arranco y se dirigió a su apartamento pensando en lo que había sucedido esa noche, Dana era realmente hermosa, le había gustado y mucho y no solo físicamente, había sido amable y permisiva con él, habían tenido confianza
Penelope miro el mensaje de nuevo, el tampoco podia dormir, miro a Ares no sabía si debía seguir contestándole, se sentó en la silla que había junto a la ventana y se acomodó en ella mirando el teléfono, no estaba haciendo nada malo pensó. «No, supongo que la tormenta no me deja dormir» — Penelope le contesto mirando la lluvia caer por el cristal de la ventana. Tae miro la lluvia golpear la suya y sonrió por algún motivo. «¿Llegaste a casa bien?» — Tae no pudo no preguntar, aunque sabía que era probable que hubiera llegado con ese hombre que le estuviera contestando le daba una pequeña esperanza de que tenía alguna posibilidad al menos de ser su amigo. «Si, llegue a tiempo para no mojarme» — Penelope vio como Ares se revolvía en la cama, así que le mando un último mensaje a Tae para volver con Ares. «Debo dormir, buenas noches.» — Tae tenía el mensaje escrito, pero no llego a mandarlo, quería invitarla a desayunar el siguiente día antes de entrar a su turno de policía, pero no lo hi
Penelope pidió al chofer de Ares que la dejara en casa, ella misma cogería el coche de su madre para ir hacia el centro de control, cuando llego a su destino le dio las gracias al chofer y subió rápidamente a su habitación, al parecer no había nadie en su casa lo que agradeció, dejo todas sus pertenencias en su cuarto, cambio su bolso por una mochila, donde metió su placa, las pistolas tanto la que le había facilitado Tae y la reglamentaria de la policía y su placa y la porra extensible. Su hermano le había especificado que si había una reunion debía ir totalmente preparada por lo que podría suceder, imaginaba que Tae también se presentaría. Salio hacia la primera planta y busco las llaves del coche de su madre encontrándola en la cocina, casi corriendo salió fuera cerrando la puerta con llave y montándose en el coche. Arranco y se dirigió a su destino. Era de día así que escondió el coche a dos calles del lugar, después disimulando se metió en el pequeño callejón y se acercó a la pu
—Ares pregunto por Rock ya que al entrar al Hangar no lo vio, cuando debería estar ahi para vigilar a todo el mundo, no sabía si arriesgarse o hacer que desmantelaran todo, decidió esperar un poco para ver si aparecía Rock, volvió a llamar a Marco y como esperaba no contesto, uno de los trabajadores fue a buscar a Rock fuera del Hangar, encontrándolo hablando por teléfono.— Señor el jefe está aquí. — Rock colgó el teléfono de inmediato dejando a Marco con la palabra en la boca, estaba hablando con él para concertar una cita, pero Marco se negó, no quería volver a cruzarse con esos hombres, no ahora que su hijo les estaba dando caza, ahora no podia aparecer en ningún asunto debía actuar a la sombra. — No nos veremos más, ahora no nos podemos arriesgar, el esta alerta no para de llamarme, así que mantente oculto, te dire un punto cada vez que me tengas que entregar algo. — Marco hablaba con Rock hasta que escucho un reniego de Rock y este colgó inesperadamente, miro el teléfono, si lo
Los tres entraron al Hangar que estaba totalmente vació, solo había quedado un par de mesas viejas de metal, repasaban el lugar intentando encontrar cualquier cosa que les dijera algo de quien había estado ahi pero no había nada, Carlo maldijo por lo bajo.— ¿Como sabían que vendríamos? No tiene ningún sentido ¿Como se enteran de todo? — Tae estaba perplejo nadie sabía de esta operación o eso él pensaba. — Carlo miro a Penelope, esta entendió que si había alguien más que lo sabía... Marcos, él había ido a pedirle el respaldo para que no fuera una intervención legal, había hablado con él en su despacho. — No lo sé, pero deben tener muchos chivos, llevar cuidado, lo mejor sera que intentamos recoger alguna muestra de las mesas, huellas o algún tipo de marcas de neumáticos. — Penelope asintió y fue hacia la camioneta con paso rápido, saco los maletines, al darse cuenta se percató de que tae la había seguido para ayudarla, estos aun llevaban el rostro tapado, volvieron al Hangar vieron co
Tae se quitaba el chaleco en el ascensor, debido al movimiento todo el pequeño espacio quedo impregnado de su olor, Penelope lo miro de reojo viendo cómo se pegaba la camiseta negra a su espalda musculosa debido al sudor, le atraía físicamente pero no tenía ningún sentimiento solo era físico a ella le gustaba Ares en todos los sentidos, sintió de repente un vacío en su pecho echaba de menos a Ares, quería verlo, pero se había metido en esto por estúpida y ahora no podia dejar a su hermano solo, estaba pasando algo mucho más turbio. Pensaba que Tae le hablaría o le preguntaría algo, pero no fue así, este se cambió rápidamente y salió sin decir nada, Penelope se quedó sentada en uno de los banquillos, lo miro como se iba cabizbajo, quizá solo estaba cansado. Cuando Penelope termino de cambiarse salió de los vestuarios, encontrando a su hermano fuera esperándola, este tenía en sus manos varios papeles donde escribía a mano, sabía que esos eran exclusivos para ella. — ¿Qué es lo que pas