Mientras que George espera a su esposa en la planta de abajo, Denise empaca unas cuentas cosas personales. Se sentía nerviosa, pero por alguna extraña razón también estaba feliz de poder salir de esa casa.Y aquel sentimiento la hacía sentirse mal.—¿Contenta? —la voz de su madre la sobresalta que la hace erguirse de inmediato —. Parece que empacas algo emocionada.—Solo hago lo que debo hacer, madre. Bien sabes que todo esto es cosa tuya.—Si, lo es. Y es por esa razón que estoy aquí, vengo a recordarte cuál es tu deber.Denise mira a su madre fijamente, no era necesario que le recordara cuál era su función en todo aquel desastre en el que estaba involucrada. De hecho, se sentía como una miserable por lo que le estaba haciendo a George.—Se muy bien lo que estoy haciendo y recuerdo que es lo debo hacer, madre. no creo que sea necesario que me lo recuerdes.—Tu herencia está en juego Denise, no creo que desees perderlo todo solo por la estupidez de enamorarte de un Harper.La joven se
En cuanto ambos llegan a casa la joven vislumbra la impresionante mansión de los Harper, suelta el aliento contenido y emprende el camino hacia la cueva del lobo.No entendía como es que su madre la puso en esa situación tan mala e incómoda… todo su cuerpo temblaba, estaba tan nerviosa que pensó que arruinaría todo el plan de Mónica Muerde sus labios al pasar el umbral de la casa.—Vamos…—George, Denise…—la pareja se detiene al escuchar la voz de Phil, ambos miran hacia arriba para ver al hombre descender por las escaleras —. Han llegado en un buen momento —Phil sonríe justo cuando termina de bajar —. La cena esta lista.—Padre, bueno, tú ya conoces a Denise.—Encantado de verte de nuevo, aunque en otras circunstancias.—Señor Harper, yo…—Madre.Denise calla sus palabras luego de escuchar a su esposo hablar, ella voltea la vista para otro lado para ver a la madre de George. La mujer por la que su madre sufrió tanto, pero al verla personalmente se dio cuenta de algo, Ciana Harper no
Denise tensa la mandíbula debido a la advertencia de su madre, la conocía perfectamente, sabía bien que ella no se andaría con juegos y menos cuando se trataba de dinero.—Por supuesto que no es lo que estoy buscando, madre —se libera bruscamente —. No he dicho que dejare de hacer lo que hago, lo estoy haciendo y eso te consta.—Lo estás haciendo mejor de lo que parece, de hecho, tu trabajo es sorprende.—¿Qué quieres decir con eso?—Que te veo más que interesada en George, me parece que te has enamorado del chico, ¿no es así?La joven se tensa de inmediato, vuelve la vista hacia otro lado y trata de parecer normal. Debía demostrarle a su madre que estaba equivocaba y que sus palabras no la afectaban.—Me pediste que actuara bien y es lo que estoy haciendo.—¿Ah sí? —Mónica hace girar el rostro de su hija —. En ese caso, si es como dices me parece bien, porque enamorarse de ese idiota no servirá de nada.—Ya te dije que no estoy enamorada de George.—Espero que él de ti sí.Mónica sue
Aprieta con más fuerza las curvas del cuerpo de su esposa haciéndole sentir el poder que yacía entre sus muslos, en cuanto Denise siente la erección de su esposo gime contra sus labios.Se aferra a él como si fuese su tabla de salvavidas y al poco tiempo siente como él va entrando lentamente en su interior, los gemidos de Denise van en aumento y la sensación de placer va envolviendo su cuerpo poco a poco.A pesar de estar bajo el torrente de agua, su cuerpo estaba muy caliente.Su esposo vuelve a apoderarse de sus labios con juntamente va entrando poco a poco en su interior hasta que consigue apoderarse por completo de ella. En lo que la penetra por completo ambos gimen de placer.Denise aprieta sus piernas que están alrededor de la cintura de su marido con el fin de sentirlo un poco más. Clava sus uñas en la espalda ancha de George y es cuando él empieza entrar y salir de su interior de manera lenta.—George—musita cuando siente aquel revoltijo en la parte baja de su cuerpo.El CEO s
La estaba apuñalando por la espalda…—¿Qué clase de madre eres?—No me importa ser tu madre, para mi eres cualquier empleada más. Así que será mejor que acates mis ordenes, y cuando te digo que vayas a casa, lo tienes que hacer.—Esto no seguirá, no continuare con tu absurdo plan de mierda.Denise no estaba dispuesta a seguirle el juego a su madre, había sido en vano que se casara con George. Todo fue un error, enamorarlo, acostarse con él, dejarlo entrar en su vida y hasta…Aplana los labios al saber que ella estaba enamorada de George, perdidamente enamorada y que menos deseaba hacerle era daño. Y mucho menos a la familia de él.—Eres una arpía, no te seguiré el juego, esto se acabó Mónica.—Muy bien, actuamos como valiente. Parece que el matrimonio te sentó bien, quieres detener el juego, hagámoslo. Quiero ver la cara de tu marido cuando se entere de que eres una falsa de mierda.—No tienes derecho a hacer tal cosa.—Lo haré, de hecho, pienso divertirme haciéndote sufrir mientras v
—¿Quieres sacar esa cantidad de dinero para comprar acciones de una empresa? —su abogado frunce el ceño luego de escucharla.—En efecto.—¿Qué tipo de acciones? Quieres retirar muy poco dinero para comprar acciones, ¿Quién querría vender a tan bajo nivel de dinero?, es imposible.—Por supuesto que no es imposible, tu solo has lo que te digo. Una vez que sea dueña de estas acciones mis finanzas mejoraran muchísimo más.El abogado observa a su clienta, no comprendía quien podía ser tan idiota como para vender sus acciones a tan bajos precios. O estaba muy necesitado del dinero que lo dudaba mucho, ya que lo que Mónica estaba pagando era una completa miseria.O esa persona estaba siendo amenazada por ella.Si era capaz de quitarle toda la herencia a su propia hija y dejarla sin nada, no se imaginaba lo que podría hacer con tal de obtener lo que quería.—Bien, haré lo que me pides.—Cuanto antes mejor, quiero tener todo preparado para cuando firme la compra. Pronto seré una mujer muy rica
La pelirroja observa a su hija dormir mientras que ella piensa como salir de ese problema en el que estaba metida con ese hombre.—Digo la verdad, ella solo intento protegerme.—No le creo una sola palabra, y en cuanto mi esposa despierte le preguntare que diablos le ha pasado.—Te dirá lo mismo que te estoy diciendo.—Eso ya lo veremos.Ahora necesitaba quedarse a solas con esa tonta de Denise, en lo que esa idiota despertara ella debía decirle exactamente lo que tendría que decir.—Mi hija necesita descansar, será mejor que salgas de aquí y te vayas a tu casa, yo cuidare de ella.—No me pienso mover de aquí y mucho menos la dejare sola con usted.—¿Cómo te atreves? ¿Qué clase de insinuaciones estas diciendo?—Las que está entendiendo, si descubro que ha sido usted la culpable de estos estos golpes, le aseguro que no le va a ir nada bien.—Absurdo, no tengo razón para tratar a mi única hija de esa manera.—Por eso lo hace, porque la tuvo, sé que no quiso tenerla, para nadie es un secr
George y Denise bajan las escaleras con cuidado, ambos estaban dispuestos a marcharse de esa casa ese mismo día.—¿Denise? —la voz de Mónica interrumpe sus intenciones, sin embargo, ellos no se detienen—. George, ¿para donde llevas a mi hija? No vez el estado en el que se encuentra, ¿Cómo se te ocurre sacarla de la casa? —dice ella bajando las escaleras también.—Le dije que me llevaría de esta casa lo antes posible, así que no se haga la que no sabía nada del asunto.—Denise, Denise, esta es tu casa, debes permanecer aquí para que puedas descansar.La joven escucha a su madre y su voz solo le produce agonía, la verdad es que ya no toleraba escucharla.—Me voy con mi esposo a nuestra casa, debes entender que mi lugar es con George y no aquí.—Pero estas mal herida, el doctor dijo que no debes moverte.—Yo la cuidare y en casa no tiene que hacer nada.La pelirroja se interpone en medio de ambos impidiéndoles la salida.—Me rehusó a que te lleves a mi hija en ese estado, yo cuidare de e