Juliana regresó al hotel de arriba pero no volvió a dormir. Había dormido lo suficiente hasta tarde en la mañana y no podía aguantar más. Después de ducharse y cambiarse, bajó al lobby. Emiliano ya había ordenado su bebida, un café latte con sabor a avellana, junto con un flan de caramelo y un crepe
—¿Es esto tan grave?En este momento, dos jugadores de los equipos están en el pasillo administrativo, donde hay mucha gente pero también bastante espacio, y sus voces se escuchan por todo el lugar.Un jugador joven se acerca a su compañero de equipo que acababa de hablar, emocionado por escuchar má
Debido al desempeño de Silencia en el campo, Anka no se sentía muy bien al ver a Silencia en ese momento. Pero dado que eran antiguos compañeros de equipo que habían luchado juntos, él respondió educadamente a la pregunta de Silencia.—¿No es normal que el premio del club no se reparta equitativamen
Las palabras frías cayeron, y hubo un momento de silencio en la sala. Los miembros del club FPLS se miraron entre sí, sin saber si deberían empezar a chismorrear o no. Ni siquiera se habían alterado por las acusaciones de soborno para amañar los partidos, ¿cómo es que empezaron a pelear entre ellos?
—¿Qué pasa? ¿Te asusté tanto cuando vine? ¿Pensaste que venía a regañarte?— El gerente no pudo evitar bromear al ver la reacción de Silencia. Tenía una impresión bastante buena de los jugadores de su equipo. Aunque algunos tenían sus defectos, al fin y al cabo, nadie era perfecto, ¿verdad? Mientras
¿Cómo es posible que cuando lo estaba presionando para que cobrara por su trabajo, todo era amenazas y tentaciones, pero ahora solo dice "¿Qué tiene que ver con él"?¡¿Cómo es que ya no tiene nada que ver?! Silencia temblaba con los dedos, deslizó la pantalla del teléfono.El tiempo de respuesta en
Esta sensación... Juliana seguía aturdida, como si intentara encontrar el origen de esta sensación en sus escasos recuerdos. No pudo encontrarlo, pero pensó en una palabra adecuada: ahogamiento. En un vasto y oscuro mar, solo brillaba un faro. Ella se estaba ahogando en él. A punto de ser sepultada.
Juliana reflexionaba sobre su pesadilla anterior. Aunque en el sueño no había imágenes, ahora parecía tener una clara visión en su mente. El estruendo de las olas golpeando el muelle resonaba fuerte, y la luz del faro al girar resultaba deslumbrante. Lo más aterrador era el mar profundo e interminab