José
Unos transeúntes que pasan poco después de ese altercado ven al muchacho herido en el suelo le prestan ayuda y se dan cuenta que sangra por la nariz y la boca, inmediatamente paran al primer carro que pasa y lo llevan al hospital donde es atendido de emergencia por los graves golpes que le han dado.
La madre del herido estalla en un ataque de desesperación por lo que ha sucedido y al rato de recuperar la calma le da las gracias a quienes lo han traído al centro médico.— Disculpe Joven. ¿Es usted? Quién encontró y trajo a mi hijo aquí al hospital. —— Buenas noches señora, si yo fui quién lo traje, ya respondí a las preguntas que ha hecho la policía y como le decía a ellos, yo pasaba en mí camioneta con una amiga y unos dos hombres me pararon y me pidieron que lo trajera al hospital rápidamente, ellos dijeron que lo habían conseguido en el suelo inconsciente y yo como buen samaritano lo traje y espero que se mejore. — Que vieja tan preguntona.— Gracias por hacer esa obra de caridad. ¿Y cómo es su nombre joven? Que le estoy muy agradecido.— Rubén Camaripano señora, para servirle. —Gracias a este muchacho están atendiendo a mi hijo, que desgracia, primero le dan un disparo mí hijo menor y ahora le pasa esto a mí otro hijo, Dios protégelos y ojalá todos fueran como este joven que ayudó a traer a Eliecer. —De nuevo gracias joven y siempre le estaré bien agradecida. — — Señora. ¿Y qué hacía el por esos lugares a esa hora?—— Le estaba llevando unos presentes a una amiga de mi hijo. — Ah, no es él, es el hermano, ese es el mecánico que se la da de héroe e impidió que robaran a mí Yulia y por ende impidió que viniera a mí para prestarle el dinero, ahora te tocará a ti mecánico, nadie se pone en mí camino y el que se ponga lo saco y no me importa nada sino el amor y la correspondencia de mí amor. — Hasta luego señora, que se mejore su hijo. — Las personas sin escrúpulos existen y dicen que el infierno es un lugar ardiente con mucha desolación y al parecer por todo lo que siente Rubén tiene en su interior el paraíso del mal en cada palpitar de su corazón y en el sentir de su alma. — Madre pero es raro todo lo que ha acontecido, parece que nos hubieran echado un maleficio, tantas desgracias en tan corto tiempo, mi hermano aunque reaccionó y mejora tiene un brazo roto, dos costillas fracturadas y muchas laceraciones en su espalda y brazos. — — Es extraño hijo, porque si fuese para robarlo se hubiesen llevado algo y no se robaron nada. —— Hola Yulia bienvenida, ya me dieron de alta pero para completar ahora cayó mí hermano. — — Ya me enteré José y que cosas tan malas y seguidas han sucedido. Me alegro que estés bien mejor, pero me preocupa lo de tú hermano aunque ya me enteré que está mejor y tan amable y respetuoso que es él, igual a ti. — Le preguntaré discretamente quién trajo a su hermano porque la descripción que dan es de la camioneta de Rubén y todo parece una casualidad, pero del yo espero cualquier cosa. —— Está mejorando y ya habla y hay que esperar unas 48 horas más para ver como sigue evolucionando. —— Gracias por los detalles, están muy lindas tus flores y el escrito en esa carta me gustó mucho, aunque como te dije hace poco, no te hagas ilusiones. Ahora, ¿Quién trajo a Eliecer?—La noto como nerviosa y un poco angustiada, pero debe ser porque cree tener la culpa de todo esto, pero no es así, todo ha sido pura mala suerte y casualidades que se presentan en esta vida. — Mi mamá me contó que fue un muchacho extraño pero amable y que teñía una camioneta blanca modelo Hilux. —— ¿Cómo se llama?—— Me dijo que Rubén Camaripano, creo. —Ay Dios santo. — ¿Qué? Rubén Camaripano. ——Sí, así es. ¿Lo conoces, qué pasa?— — Si te digo es una historia muy larga, pero si es él tengan cuidado que es el quién me persigue y me amenaza. No quiero ser alarmista ni poner en tela de juicio lo que hizo, pero yo a ese hombre le tengo pavor—— Cálmate Yulia, que no dejaré que te pase nada y debe ser pura casualidad porque el fue como te dije quién trajo a mí hermano y hasta respondió las preguntas a la policía y se mostró amable según lo que dijo mí mamá. — Ese hombre es malo por lo que me ha dicho Yulia, no lo dudo, pero sería la casualidad que el pasara y trajera a mí hermano, ella está nerviosa y eso me preocupa.— Tienes razón eso es pura casualidad, pero prométeme que tendrán más cuidado. ——Lo que tú digas linda, ya puedo manejar y en un rato después de ver a Eliecer me gustaría llevarte a tú casa. —— Con gusto José, solo que ando con una amiga que me espera afuera y si no es mucha molestia para que le des un aventón también y quiero presentártela, es mi mejor amiga.— José si es dulce, a pesar de todo lo que está pasando siempre tiene una sonrisa en su rostro y me trata con sutileza y complacencia, es un buen hombre, pero no quiero ilusionarlo, aunque como él dice el amor se gana y se merece, y aunque no siento un sentimiento de atracción fuerte por el se ve que es muy interesante en seguir dándole mi amistad y ver si se mantiene con esa gentileza que lo caracteriza desde el primer momento que lo conocí en la panadería.— Claro Yulia preséntamela, será un honor conocer a tan especial dama ya que si es tú mejor amiga eso vale mucho para mí ya que tú sonrisa y tú tranquilidad son motivos para estar contento y ayudarme a acelerar mí recuperación. —— Gracias José, eres un caballero y de verdad estás demostrando que eres una buena persona y te quiero como un amigo. —José— Es un placer Isis, conocerte y quisiera invitarlas a comernos algo, por aquí venden un pollo asado bueno y aunque me duele un poco el brazo puedo manejar y mi hermano ya está fuera de peligro. Serían tan amables de no despreciarme. —— El placer es mío José, ya mí amiga me ha hablado de ti y no se equivoca en lo caballeroso y respetuoso que has sido. —— No te vamos a despreciar y en vista de que es una comida sana que no te perjudica, vamos a cenar. — Este hombre es maravilloso, acaba de salir de un hospital por un disparo que le dieron, antes de ayer le golpear el hermano y está pendiente de todos y de mí también, es una buena partida, vale la pena, es amable, es gentil y sobre todo respeta cosa diferente al enfermo de Rubén que al pensar nada más en el me causa miedo. Vamos rumbo al restaurante hablando relajados y muy amenamente, cuando llegamos ordeno dos pollos asados con todo y uno es para llevarle a mí mamá, cuando veo que Yulia e Isis cambian de semblante muy drástica
Al conocer y posteriormente al entablar una conversación amena con los padres de Yulia me despido de todos y ella muy amablemente me acompaña hasta mí vehículo con una sonrisa encantadora y me dice con esa voz tan dulce.— Gracias José por todo, le caíste bien a mis padres, puedes venir en otra oportunidad, te lo hare saber cuándo, has sido un defensor de mí, disculpa los malos ratos incluyendo el de hoy en el restaurante. —Cuando voy a contestarle estoy un poco perplejo por la emoción que me invade y ella me sorprende dándome un beso en la mejilla y apretando mi mano derecha con la suya y lo que puedo contestarle es. — Gracias a ti Yulia por ser tan especial y por darle un colorido notable y encantador a mi vida, ¡prometo no defraudarte, vales mucho! —— Hasta mañana y muchas gracias por las flores y el regalo que me diste hace poco. —Me dice ella con todos esos atributos que invaden su humanidad de belleza y amabilidad. Mientras me retiro de la casa de los padres de Yulia está un
Ha llegado el día tan anhelado y la decoración me parece que quedó bien, ya tengo comprado casi todo lo que le brindaré a los invitados, casi que no aguanto esperar ver a la preciosa Yulia. Saldré a comprar lo que falta. — Vamos hermano a comprar unas pequeñas cosas que faltan.— Le digo entusiasmadamente cuando llega Jairo y se me pone a la orden para ayudarme en cualquier cosa que me haga falta y le digo que no es necesario pero él insiste en que quiere ayudarme y acepto que me ayude en repartir la comida y la bebida para el brindis. El sale un momento para atender una llamada y salgo con mi hermano para hacer las compras.— Si jefe, todo va andando como me ha indicado, iré de inmediato a buscar la sustancia que usted me ha dicho que me dará y disculpe la pregunta. ¿Qué es lo que le vamos a poner? —— No me gusta que preguntes mucho, solo vas hacer lo que te diga, y es echar en la bebida del mecánico algo que lo hará pagar lo que intenta quitarme. En una hora te espero en la empresa
La reunión continua en cónsona armonía e invito a sentar a mi madre en la mesa que ocupo con las dos señoritas y ellas entablan una conversación que escucho con disimulo, pero con atención. — Mamá. ¿Te acuerdas de Yulia? ella es mi madre sé que se conocieron. — Las presento por si acaso, ambas se miran de forma evaluadora, las mujeres a veces ven enemigos donde no los hay, mi madre a veces es sobre protectora, y quiere tratarme como si fuese un niño, era un niño cuando asumí las responsabilidades de mi padre como el sostén de la casa…las cosas fueron muy difíciles desde que el falleció.— Un placer señora, la felicito por tener un hijo tan cortés y educado se nota que la educación se le refleja en su hijo. —Le dice Yulia, y mi madre parece complacida por las palabras de ella.— Gracias señorita, el placer es mío que me doy cuenta que mi hijo tiene buen gusto, ponte cómoda que ya te siento como una integrante de la familia. — Le responde mi madre. Las dejo un momento a solas para que
— Si, muy amable es tu mamá. Disculpa, ese señor, ¿Quién es? —Pregunta viendo a Lázaro con mala cara, no se sabe comportar y hace que hasta su esposa muera de vergüenza.— Ese es Lázaro un amigo de la infancia, lo que pasa es que tiene problemas y no quiere solucionarlo, pero, voy a ver como lo ayudo. — Respondo un poco apenado.— Eso me gusta de ti que tienes un buen corazón, aunque uno ayuda hasta donde se puede y si esa persona lo permite. — Me dice ella, tomando la iniciativa y colocando una de sus suaves manos sobre la mía.— ¡Estas en lo cierto! ojalá mi amigo se dejase ayudar— Se me escapa de los labios, lo conozco igual que Jairo y no quiero verlos mal, pero ellos parecen unos niños inmaduro.— Ese amigo tuyo le estaba diciendo al señor que está allá que creo que es un fiel cliente tuyo, al que está con su esposa, que él té había dado para comprar casi todo para tu reunión mientras se comía esas uvas que estaban de adorno en la mesa, se las comió.Me carcajeo con las locuras d
Mientras todo transcurría bajo el manto oscuro de la noche, las incisivas garras del mal tejían y se direccionaban a buscar su propósito que no era más que la desesperación, el desdén y la muerte que le daría satisfacción aguda y que no tardaría en llegar y quebrar el medio circundante de esta historia de la vida real. — Ven Jairito, cuéntame que pasó, hiciste el encargo, veo que no, habla y no llores. — Estoy envuelto en llamas por dentro y tranquilo y sereno por fuera le doy la oportunidad de que me convenza el por qué aun el mecánico está vivo y por ende sigue saliendo con mi Yulia. — Habla maldito y deja los lloros antes de que se me salga el fuego por mis poros. — Le digo y muerto de miedo me comienza a responder con macujeo y gemidos.— Jefe perdóneme, yo hice casi todo, pero me eche para atrás cuando tenía todo listo y servido tal como usted me lo ordeno, yo casi lo hago, pero, los recuerdos de cuando José y yo éramos niños y jugábamos no me dejo hacerlo, además él me ha ayu
Pasan pocos días de aquel triste suceso, y en horas de la tarde exactamente a las cuatro, ella permite que José la busque a la universidad y posteriormente la lleve a su trabajo en la panadería y en el trayecto ella le dice con esa voz tan apacible.— De nuevo te doy las gracias por arriesgar tu vida por mí, siempre defendiéndome, gracias por tus detalles, por estar pendiente de mis cosas, además sé que cargas ese llavero que te obsequié para arriba y para abajo, eres una persona muy especial para mí y siéndote sincera has empezado a gustarme por allá un poquitico y aunque no te he aceptado como mi novio me siento bien con tu compañía y quiero que vengas a casa de mis padres a una cena especial que voy hacer para ti mañana a las siete de la noche. ¿Te parece? —— Por supuesto que estaré ahí con todo el placer de mi corazón, pensamiento y alma. Gracias Yulia por permitirme entrar a tu mundo, eres una mujer maravillosa que sé que llegaste a mi vida para llenarla de pasión, amor y noble
— Buenas noches José, pasa adelante. —— Buenas noches Yulia, si estas tan hermosa como siempre, te traje este ramo de flores de tu misma especie y aroma. — Le digo entregándole un ramo de rosas rojas y una caja de bombones de chocolates de cacao de los mejores con una carta de regalo que tiene timbrado su nombre y siento que mi corazón salta fuerte entre mi espalda y pecho.— Gracias José, están preciosas. — Exclama dándome un beso en la mejilla que me sabe a gloria. — Siempre atento y cortés como siempre, pasa y siéntate por favor que ya vienen mis padres. ¿Y eso que llegaste diez minutos retrasado? Tan puntual que eres. — Me pregunta ella un poco extrañada.— Bueno linda, te cuento que Lázaro el amigo que estaba bebiendo a dos manos en la reunión de hace una semana, agarro a beber todos los días y la mujer de él le reclama y a él parece no importarle, no lleva comida, no busca trabajo, le propuse que trabajara conmigo y no quiere nada bueno… Estaba llevándolo a su casa porque lo co