Despierto después de un sueño profundo, estaba muy agotada por todo lo sucedido con Robert anoche aunado con la fiesta, se ha levantado muy temprano y habrá salido en absoluto silencio ya que no lo oí partir. Me arreglo rápidamente para bajar a desayunar no me apetece estar encerrada en el cuarto. Me pongo a pensar y siento que fui muy dura con Robert, pero al mismo tiempo pienso que hice lo correcto. Bajo a desayunar sola en el comedor que esta fuera de la casa, quiero ver la luz del sol y sentir la suave brisa. Amy me sirve siento mucho apetito, mi retoño esta hambriento, toco mi vientre y sonrío. Sigo comiendo tranquilamente y de repente Andrew se posa delante de mí, se me quita el apetito y me paro para acercarme a él, al verlo sentí una fuerte emoción que me invadió por completo. —Andrew—balbuceo de emoción. Pero su mirada no es la misma lo noto diferente me mira con dureza. —Supe que estas embarazada, felicidades. Los chismes vuelan en este pueblo definitivamente, frunzo el c
La ansiedad se abraza nuevamente conmigo. Estoy muy nerviosa por mi encuentro con Andrew, tengo mucho miedo de como pueda reaccionar cuando estemos solos. Ayer me miro con mucha hostilidad nunca antes me había mirado así, lo desconozco por completo. Intuyo, que puede ser igual a Robert solo que lo disimula algunas veces mejor. Me percato de que Robert haya salido, por lo visto ya no quiere estar en la casa ni cuenta me di cuando salió de la habitación seguramente lo hizo muy temprano sin que me diera cuenta. Me cambio para a mi encuentro con Andrew de la angustia hasta perdí el apetito. Le hago una seña a John para decirle que ya nos podemos ir que estoy lista. Rápidamente obedece y me lleva con él. Tomo una actitud muy silente todo el camino voy ahogada en lo más profundo de mis pensamientos. Necesito paz para mí y para mi hijo, es lo que deseo, pero viviendo en la finca es imposible. No puedo fingir que amo a Robert, seria desleal le hago caso a mis emociones y pongo en una balanza
Pasan los días y mi vientre sigue creciendo, solo mi bebé es mi única compañía, en esta casa estoy aislada de nuevo, Amy está muy ocupada con la carga laboral que Robert ha puesto en ella, seguramente evitando que me haga compañía, Andrew se mudó al pueblo no puede vivir bajo el mismo techo que yo estando embarazada. Aunque no lo exprese sé que está molesto o al menos inconforme con mi embarazo se ha desilusionado bastante. Me evita ya no platica conmigo como antes cuando viene de visita, por otro lado, Robert se trasladó de nuevo hasta el cuarto de huéspedes, había prometido cuidarnos, pero disolvió su promesa. Veo como por las noches recibe a Thamara en su habitación y ésta sale muy temprano. Seguramente me lo esté ocultando, pero yo lo he descubierto. A veces pienso que no se si hice bien evitando a Robert, al menos tenía que haber hecho un esfuerzo por mí y mi bebé. Me confundí en mi accionar, no sé cómo hay personas que anda por la vida en busca de su beneficio a costa de lo que
La culpa no me deja en paz y la inmensa agonía me oprime el pecho, sigo recluida en cuidados intensivos por el riesgo que está corriendo mi bebé en este preciso momento. Debo de ser fuerte ya basta de sufrimientos y pena, me recuperaré y mi hijo se salvará. Digo entre sueños convencida que saldré de esto y seré una nueva mujer. Robert llega me mira estoy postrada en la cama inmóvil, toma mi mano y me pide perdón, se siente culpable por no haber sabido lidiar con el enojo que le provoco mi rechazo. Está consciente que es tan responsable como yo de esta situación. Aunque su error es mayor. Toma mi mano y deja escapar una lagrima de su mejilla, haciéndome una difícil promesa que desconozco si la cumplirá, ablandar su carácter y dejarme en paz para que sea feliz. Sale de mi habitación abatido y se queda quieto muy pensativo en la sala de espera, no tiene intenciones de moverse del hospital. Mi madre está muy aburrida ya cumplió haciendo acto de presencia y le dice a Robert: —Debo irme m
Ya todo está pactado, lo expreso para mí sin miramientos. No tengo excusas para no ceder a ser la esposa de Robert Fox con todas sus letras, han pasado unos días y ya me dieron el alta en el hospital espero por mi marido para que me lleve a casa, dejo el hospital con la esperanza de que mi hijo estará bien y nacerá en condiciones normales ya tengo un poco más de cinco meses de embarazo ya mi pancita es notoria.Este ser que habita dentro de mí lo defenderé con mi vida si es posible, mientras toco mi vientre para hablarle a mi bebé. Llega mi cuñado, concibo que debo de mantener distancias de ahora en adelante con él, no sé si podré, sigo sintiendo esa sensación de emoción al verlo que llevo oculta muy dentro de mí no pretendo ser la amante de mi cuñado. Tampoco procuro caer tan bajo.—Diane espero que por tu bien hallas tomado la decisión correcta.—No tengo la menor duda.—Te sigo queriendo—se me acerca y un intenso escalofrío abriga mi cuerpo.—Apártate de mí, Andrew debemos mantener
Sigo junto con Robert no se ha apartado de mi lado, es fin de semana hace un espacio en su ajustada agenda para pasar el día conmigo. Estamos esta vez desayunado en el comedor que da a la parte trasera de la hacienda, es un lugar muy cómodo y tranquilo, en lo particular me encanta comer aquí.Robert sostiene mi mirada con sus hermosos ojos verdes, cuando esta sereno sus ojos brillan y se distinguen muy radiantes, me sostiene mis manos, se acerca y me da un sutil beso en la comisura de mis labios. Qué me tomó por sorpresa sin embargo mi cuerpo no se aceleró, de la forma como se acelera cuando tengo a Andrew cerca.Trato de retribuirle el mismo beso para que la sensación sea reciproca por lo que me le acerco lo abrazo ligeramente acariciando su cabello y le estampo un ligero beso. Los empleados se quedan consternados al vernos manifestarnos amor, sin embargo, John me mira con recelo ya que en reiteradas ocasiones me traslado hasta el río para mis citas con Andrew, aunque en aquellos par
Por un momento consideré las palabras de Andrew que llegaron a mi mente, cuando me decía que me amaba y que era algo inevitable para él sentir amor por mí. Robert se ha ido de la casa muy temprano a sus compromisos laborales y me quedo sola en la finca con los empleados, después de desayunar he decidido meterme a la ducha y cambiarme de ropa.Quiero ir a visitar a mi padre hasta el centro de rehabilitación, pero solo podré ir con Robert hasta que él pueda acompañarme, aun mi libertad esta dosificada, en el fondo Robert desconfía de mí, lo presumo ya que sutilmente me dice que me acompañara a todos lados con la excusa de protegerme. Si ya le dejé claro que seré su esposa con todo lo que ello implique, hasta que cedido acostarme con él cuando lo desea.A veces pienso que Robert en el fondo sigue siendo ese hombre huraño e injusto que quiere controlarlo todo, todavía no me siento libre como tanto deseaba, aunque tengo que reconocer que me he quitado de encima un poco de peso.El agua est
Ya al fin convencí a Robert de venir a visitar a mi padre, claro que no voy sola John me acompaña. Es un sujeto callado y muy discreto, es quien me ayudo a encontrarme con Andrew en el rio, tengo la necesidad de hablarle para que no me juzgue, seguramente está pensando que soy una cualquiera que se debate por el amor de dos hermanos. Opto mejor por callar no vaya ser que empeore la situación, llegamos al centro de rehabilitación donde reposa mi padre, lo veo sereno y en una absoluta calma a lo lejos, está conversando con otras personas. Me le acerco emocionada: —Papá—balbuceo emocionada y voy enseguida acobijarme entre sus brazos. —Mi niña hermosa como está creciendo tu vientre—me lo dice emocionado. Mi padre desconoce por completo lo que me paso hace algunas semanas, cuanto tuve aquel terrible accidente en donde casi mi bebe pierde la vida. No pretendo decirle nada de lo que me ha ocurrido ya les había dicho a todos que no le contaran nada. Quiero saber si mi madre ha venido por