“Lo sé”. Charlotte sonrió levemente. “Luke, dime, ¿qué haría Zachary?”.

Lucas sacudió la cabeza. “Si otra persona hubiera golpeado a Miranda, esa persona definitivamente ya estaría muerta. Pero Coraline es tu mejor amiga, por lo que el Segundo Amo no tomará represalias contra Coraline por tu bien. Sin embargo, Miranda es tan importante como tú para el Segundo Amo, por lo que es imposible que el Segundo Amo obligue a Miranda a no responsabilizar a Coraline por tu bien. Por lo tanto, si Miranda quiere llevar a Coraline a la corte, el Segundo Amo hará todo lo posible como hermano mayor para conseguirle el mejor abogado de la ciudad y mandar a Coraline a prisión”.

El cuerpo débil de Charlotte perdió el balance.

“¡Señora!”. Lucas la apoyó apresuradamente. “Señora, déjame hablar por el Segundo Amo. Al hacer esto, el Segundo Amo realmente ha hecho lo mejor para ti. Por favor, no vayas a él y le pidas que obligue a Miranda a perdonar a Coraline. El Segundo Amo estaría atrapado en un dilema