DaphneCrucé las piernas por enésima vez en menos de diez minutos. Mis padres me habían pedido hablar con ellos y para lo mismo, se habían tomado la molestia de venir hasta Noruega. Mi madre lucía evidentemente molesta y mi padre igual, aquello lo notaba por las malditas expresiones que tenían. No imaginaba lo que iban a decirme, y eso me preocupaba muchísimo. No comprendía por qué razón tenían que viajar hasta acá en lugar de enviarme un mensaje o hacerlo mediante una llamada telefónica.—Muy bien, supongo que ya es el momento de qué me digan de qué se trata todo esto. Han viajado desde Estados Unidos hasta acá y no creo que sea por una simple razón —comencé a jugar con mis dedos. Me estaba volviendo loca.—Daphne, queremos que el matrimonio se lleve a cabo el mes siguiente, no hay excusas para que llegue a cumplirse. Volverás a Nueva York en un par de días, sin avisarle a nadie —mamá me miró con enojo.Disculpa, no entiendo nada.—¿Qué has dicho? Mamá, no comprendo qué sucede —me pu
PaigeEstaba muy nerviosa, lo admito. Me resultaba extraño que mis padres me hubiesen citado en las oficinas del hotel luego de permanecer callados por unos cuantos días después de la fuerte pelea que tuve con mi padre. Permanecía en silencio, bajo la mirada de mis padres. Ambos lucían serios, incluso mi madre que casi nunca lo era, y no decían ni una sola palabra. Observé todo el panorama de nuevo y decidí hablar ya que nadie en el lugar tenía la intención de hacerlo.—Bueno, ni siquiera sé que decir, pero, me gustaría saber la razón por la cual me han pedido que viniese hasta aquí —acomodé mi flequillo y tragué saliva. Thiago me había aconsejado que permaneciera lo más tranquila posible y que no me pusiera demasiado nerviosa, sin embargo, no lo estoy cumpliendo al pie de la letra.—Paige, hemos hecho que vengas hasta acá porque necesitaba pedirte perdón por la forma en la que te traté aquel día —papá comenzó a hablar, cosa que me sorprendió. Él muy pocas veces pedía perdón, así que
HeavenTodo parecía haber regresado a la normalidad. La relación familiar de los Clarck parecía encontrarse mucho mejor, por supuesto que no era tan buena como antes, y Paige había regresado a trabajar con nosotros.Ahora mismo me encontraba terminando de arreglarme para ir a la boda de Victoria y Mave, por lo que me sentía bastante feliz por haber completado una nueva boda. Al llegar al lugar, esbocé una grata sonrisa al observar que todo había sido ordenado de la manera en que yo había ordenado, sin embargo, obligadamente volvería a revisarlo todo.—Heaven, qué bueno que ya esté aquí —la madre de Victoria me envolvió en un abrazo—Mi hija está muy nerviosa.—¿Está muy nerviosa porque se siente feliz por casarse con el amor de su vida o está nerviosa porque comienza a arrepentirse? —Tragué saliva.—Ella está nerviosa debido a que cree que este es el día más feliz de toda su vida. Incluso, creo que puede empezar a derramar lágrimas en cualquier instante.—Iré a verla luego que me de un
HeavenSentí que el cuerpo entero me comenzaba a temblar por completo. Sabía que no podía continuar ni un momento más sin derrumbarme ante tal noticia ¿Es que el hombre que tanto amor me había jurado, todo este tiempo había tenido una prometida? ¿En verdad fue capaz de engañarme de tal manera?Rápidamente escribí mi número de teléfono en un pequeño pedazo de papel y se lo entregué fingiendo una sonrisa puesto que ella no tenía la culpa de nada.—Llámame en la noche ¿Sí? Allí terminaremos de arreglar todos los detalles porque ahora mismo tengo que ir a atender un asunto que no puede esperar. Te felicito por tu matrimonio con un buen hombre, cielo —toqué su hombro—Hablamos luego, señorita Daphne.—Gracias por todo, Heaven —desapareció de mi vista y yo me quedé en el mismo lugar pensando en lo que debería hacer. No me sentía con fuerza de nada por lo que en vez de dirigirme al ascensor y subir hasta mi oficina, salí por la puerta principal para tomar un taxi que me llevara a casa. Alexan
AndreuLos Thompson habían aparecido de repente en nuestro hotel y ahora, me encontraba hablando con ellos sin que mi esposa fuera consciente de ello.—Andreu, queremos darle fin a ese contrato que firmamos hace tantos años para que nuestros hijos contrajeran matrimonio. Mi Daphne no quiere casarse y nosotros queremos complacerla con eso —Marie habló sin pelos en la lengua.—¿Cómo pretenden que acabe con un contrato millonario? Si han llegado a olvidarlo, todos nosotros firmamos con el objetivo de incrementar nuestras fortunas y no tuvimos ningún problema con ello en un principio. En realidad, no soy capaz de creer que se han dejado convencer por los lloriqueos de la inmadura de Daphne.—Nada más hemos caído en cuenta que lo que estamos haciendo nosotros tres no es correcto. Queremos acabar con el contrato con un abogado para que todo sea de forma legal.—¿Y qué gano con todo esto? Estoy perdiendo una suma de dinero bastante considerable, por lo que creo que al terminar con el contrat
Paige—En realidad, creía que tu reacción al saber la verdad iba a ser muchísimo peor —le dije a Heaven una vez que nuestros hermanos desaparecieron, mientras me encargaba de acariciarle la espalda con cariño.—Cuando la tal Daphne me dijo que mi hombre, esa persona que me vuelve loca desde el momento en que lo conocí, el alma se me rompió como si se tratara de un pedazo de vidrio indefenso. Lloré mucho y me cuestioné a mí misma si ese hombre que me había hecho el amor tantas veces al mismo tiempo que me susurraba que era la mujer de su vida y que estaba listo para amarme siempre. No sabía si de verdad era un perfecto mentiroso y logró enredarme en cada una de sus mentiras para tenerme detrás de él o si en realidad me amaba locamente y no quería a la otra mujer. Por fortuna, fue lo segundo y me alegra, aunque no haya sido del todo honesto —se puso de pie para dirigirse a su habitación, no me quedó más que seguirle el paso—Lo que más me preocupa en este jodido instante es que él se enf
HeavenEl fin de semana había sido de locos con las noticas recientes. Paige había descubierto que estaba embarazada y ahora mismo se encuentra en el dilema de verse obligada a comentarles a sus padres respecto a su relación y a su próximo hijo. Yo, por mi lado, estuve dándole vueltas al tema de Alexandre y su compromiso previo y creo, que no está bien de mi parte comportarme como si nada hubiese pasado, así que decidí alejarme un tiempo de todo mundo para considerar más la situación, a esto me refería a dejar de tener una relación tan íntima con Alexandre y Paige.Me preparé para el desfile, tratando de lucir lo más elegante y sencilla posible, y llegué al hotel alrededor de las siete y media de la noche, cuando un par de invitados ya se encontraban en el lugar. Me llevé una enorme sorpresa al encontrarme con mi hermana menor observándome desde una de las mesas del lugar.—Heaven Duch, me tenías muy preocupada —se abalanzó a abrazarme y a acariciar mi espalda como siempre acostumbrab
AlexandreApresuré mi paso para buscar a Heaven en medio de toda la multitud, y a pesar de mi afán, no la encontraba por ningún lugar. Me sorprendió ver a Timotheé hablando con una mujer que desconocía con una expresión muy molesta, algo que cautivó mi atención, sin embargo, lo dejé pasar porque lo único que me importarba era encontrar a mi amada. Despuéa de buscarla de varios minutos, la visualicé despidiéndose de un hombre adulto y dirigiéndose hacia la barra de bebidas. Oh, no, parece que ella planea emborracharse. Lo más rápido que pude me acerqué a ella buscando evitarlo.—Heaven ¿Qué estás pensando hacer? —Cuestioné apenas estuve cerca de ella, en respuesta a mi pregunta, se limitó a encogerse de hombros y a aceptar el mojito que le estaban sirviendo.—Déjame sola, que ahora mismo no quiero verte —cuando volteó a verme, noté que había llorado y eso me lastimó el alma por completo.—Heaven, mi amor, por favor, escúchame. Lo que acabas de ver no es lo que parece, necesitas saber