Después de la comida, Donna apoya su cabeza contra mi brazo y me dice que todavía siente el cuerpo pesado, pero su abuelo le dijo que era algo normal, ya que todavía le falta mucho para dominar ciertos aspectos de su magia, que es verdad que no podrá dominarlo como un maestro elemental, pero que tendrá el suficiente nivel para no sentirse cansada y agitada. Ella está muy feliz y orgullosa de todos los avances que ha hecho al igual que yo, recuerdo que antes, tenía que usar un gis hecho de su propio cabello para poder manipular su magia, pero ahora, puede hacerlo como cualquier kitsune y es verdad que le cuesta trabajo, pero no se da por vencida.

Estamos a pocas semanas de enfrentarnos a los acechadores, muchos se han sobres forzado en sus entrenamientos al igual que yo, debemos estar preparados para lo que sea, mi esposa junto con varios guerreros de su orden ha preparado varios amuletos junto con pócimas para mantener a raya la corrupción en sus cuerpos, los chamanes han bendecido nu