Tomo una gran bocanada de aire y mantengo mi vista fija en él, así como lo hace conmigo, seguimos los movimientos uno del otro, es difícil no pensar en los peores escenarios posibles, en especial porque es un kitsune de tres colas; me sorprende que alguien con ese conocimiento de magia se deje influenciar por la oscuridad, pero tampoco conozco su pasado. Estoy por lanzar un hechizo, pero la tierra empieza temblar, repentinamente dos paredes de piedra aparecen y aplastan con fuerza al kitsune, no estoy segura si está muerto o noqueado, en cualquier caso, agradezco la ayuda.

—¿Estas bien?

Se acerca mi hermana al tiempo que las dos paredes desaparecen, le di las gracias por la ayuda que me ha ofrecido, me dijo que no era nada, que me había visto peleando y me ayudó; me siento bastante tranquila al ver que ella se encuentra bien, ahora solo falta encontrar a mi esposo, porque mis abuelos... bueno, ellos no necesitan ayuda y muy probablemente les estorbaría.

Mi hermana me dice que seguirá