—Baja el arma.—Piensas asesinar a tu propio sobrino, no puedo creerlo, adelante, puedes disparar si eso es lo que prefieres. Emeth miro a Dexter, luego Arnold, los había visto crecer a ambos, no tenía el valor de asesinarlo. Arnold se empezó a burlar de su tío, él sabía que no iba a tener el valor de jalar del gatillo, era tan débil como Dexter. —Eres un cobarde, ni puedes lastimarme no es verdad. Emeth sostenía el arma con firmeza, Dexter trato de mantener la calma. —La vida de Dexter está en mis manos, lo olvidas, si disparas yo haré lo mismo.Arnold caminó lentamente en dirección a su hermano. —Detente —le grito Emeth molesto —no temes morir. —No, esa es la verdad. Emeth disparo al suelo como advertencia, pero Arnold lo ignoro, no quería hacerle daño a su sobrino, pero no podía permitir que dañara a Dexter. —Detente Arnold, no quiero hacerte daño, acaso no lo entiendes. —Entonces piensa rápido, él o yo. Arnold apuntó nuevamente a Dexter y jalo del gatillo en tres ocasio
Gianna estaba sentada en la camilla de la habitación, los doctores se habían hecho cargo de ella, tenía unos cuantos moretes, rasguños y un par de heridas.No había nada de que preocuparse, estaba a salvo, la puerta se abrió de golpe, Salma ingreso al lugar. Tenía lágrimas en los ojos, le mostró una sonrisa, estaba feliz de seguir con vida, su amiga se acercó y la abrazo con fuerza. —Gracias a los dioses, estás bien, estaba tan asustada, pensé que iba a perder a la única amiga que tengo —sollozo —en realidad lo siento, todo fue mi culpa. Gianna seco sus lágrimas, estaba bien, no había motivos para llorar. —Estoy bien, mírame, nada de esto fue tu culpa y lo sabes. —Al menos ese imbécil está muerto, no volverá a hacerte daño. Recordó los últimos minutos de vida de su cuñado, había tenido una vida miserable, gracias al odio dentro de él. —Su odio lo llevo a ese destino tan cruel, solo quiero olvidar todo esto y volver a casa, extraño a Nolan. Gianna observo a dos oficiales ingres
Héctor estaba al lado de Isabella, los periodistas no dejaban de soltar preguntas, la mujer mantenía la calma y un rostro serio.“¿Señora Leroux es verdad que Arnold murió?” “¿Lo asesino su hermano o los policías?” “Puede explicarnos lo que sucedió, la ciudad entera está al pendiente de esta noticia” “¿Cómo se encuentra la señora Gianna y el CEO?” La mujer respiró profundamente, la única manera de calmar las aguas era dando una conferencia de prensa para aclarar algunas cosas.—Dexter y Gianna se encuentran muy bien en este momento, con algunos golpes, pero creo que eso es lo de menos —había absoluto silencio en el lugar —Arnold falleció en el lugar de los hechos, la identidad de la persona que jalo del gatillo creo que no es importante, él se dejó llevar por el camino del mal, no puedo cambiar lo sucedido, él era como un hijo para mí, espero respeten el dolor de mi familia, no daremos más comentarios al respecto. Un nudo se instaló en su garganta, quizás si ella hubiera hecho la
🌼MESES DESPUÉS 🌼El auto de Gianna se detuvo a las afueras de la mansión de Isabella, era consciente de que su suegra seguía odiándola sin ningún motivo. Bajo del coche e ingreso al lugar, Jimmy le mostró una sonrisa al verla, parecía feliz con su presencia. —Señora Leroux, es un gusto verla, ¿qué la trae por acá? —¡Hola! ¿Dónde está Isabella? Necesito hablar con ella. Jimmy soltó un suspiro pesado al escuchar el nombre de su jefa, quizás la visita de Gianna le haría bien, o podía estar equivocado. —Está en el jardín, pero te lo advierto, ha estado un poco deprimida, la muerte de Arnold sigue doliéndole, se culpa a sí misma por lo sucedido. Gianna siempre pensó que esa mujer no tenía corazón, pero en ese momento se daba cuenta de que estaba muy equivocada. —Gracias, iré a verla, voy a necesitar un buen trago —bromeó la joven. Gianna se encaminó al jardín, sentía pena por Isabella, a pesar de todo, ella la había cuidado cuando había quedado desamparada. No era tan malagradec
Gianna estaba mirando por la ventana, completamente distraída, había pasado por tantas cosas difíciles, en ese momento era feliz. Temía qué algo malo sucediera, lo de Arnold solo era un mal recuerdo, Emeth se había marchado de la ciudad. Catrina pasaría un par de años en prisión por ser cómplice de su cuñado, Eliezer se había negado a ayudarla, ella debía de aprender la lección.Gracias a Dexter, Nolan llevaba el apellido Leroux, como debía de ser. Se colocó un vestido, que deja ver sus hermosas curvas, el color azul, resaltaba lo pálido de su piel, era una ocasión especial. Tomo su celular y le envío un mensaje a Jimmy, para qué le recordará a la señora Isabella sobre la reunión familiar. Había intentado solucionar las cosas, solo podía esperar pacientemente. Se miró al espejo y una sonrisa asomo en sus labios, acarició su vientre con mucho cariño, esa noche daría la noticia a los presentes. De seguro tomaría por sorpresa a su esposo, salió de la habitación y camino lentamente
Dexter estaba en la sala de espera junto a Nolan, su corazón latía con fuerza, estaba muy nervioso. Los minutos se hacía eternos, estaba ansioso por conocer a su hijo. Escucho pasos en el pasillo, se giró y observo a Salma. La mujer caminaba lentamente en compañía de su esposo, tenía cinco meses de embarazo, pronto sería tío. —¿Cómo está Gianna? —Pregunto preocupada. —No tenemos noticias, ha pasado mucho tiempo. Nolan se acercó su tía y la abrazo. —Solo ha pasado 15 minutos, papá está muy nervioso, ha estado caminando de un lado al otro. Dexter sonrió al escuchar que Nolan lo llamaba papá, era la primera vez que lo hacía. —Bueno, todos estamos preocupados Nolan, además de ansiosos por conocer al bebé —respondió Salma con una sonrisa. Dexter se mantenía de pie, estaba realmente intranquilo, minutos después llego su madre junto a Emeth, todos estaban ansiosos por conocer al nuevo integrante de la familia Leroux. Isabella caminaba de un lado al otro, quería conocer a su nieto,
Gianna estaba sentada en la habitación de la enorme mansión de su esposo, llevaba un vestido sencillo en color blanco, miraba hacia la ventana con algo de nerviosismo. Conocía a Dexter de lejos, más nunca antes había tenido el privilegio de hablar con él, antes de aceptar ese contrato era una simple empleada en la mansión de los padres del hombre, en realidad no sabía qué esperar.Para una chica en su situación económica era difícil no aceptar un trato como ese. Se levantó y se acercó a la ventana, observo un lujoso coche, estacionar a las afueras del lugar, un hombre vestido de traje y corbata bajó, se veía realmente elegante, ella observaba con absoluta curiosidad. Estaba casi segura de que se trataba de Dexter, su suegra le había asegurado que el joven heredero de la familia Leroux estaba completamente de acuerdo con su decisión. Sentía que le costaba respirar con ese vestido, era un caluroso día de verano, los nervios la estaban matando, no sabía qué decir, ni como actuar fren
Gianna estaba tomando el té con total tranquilidad en el último piso, lugar donde prefería pasar la mayor parte de su tiempo, había una gran biblioteca, pasó los últimos días pensando sobre su vida. Estaba casada con el hombre que más odiaba en el mundo, por ser arrogante, prepotente y odioso, había pasado cuatro años en ese lugar, era su jaula de oro, no era feliz allí, su amado esposo nunca se había interesado en ella. Escucho pasos acercándose, mantuvo su postura, miraba al jardín a través del enorme ventanal, había tomado una decisión y no pensaba cambiar de opinión por ningún motivo. El mayordomo se aclaró la garganta para llamar la atención de Gianna, pero ella decidió ignorarlo como siempre, no se llevaban bien, él nunca la había tolerado. —Su esposo llegará mañana en horas de la noche, debe prepararse señora Leroux. Una sonrisa jocosa se formó en los de la joven, ahora si era su esposo, todos ellos eran conscientes de que su matrimonio era una farsa, su esposo había pasad