AMALIALa mujer saca de una bandolera de cuero que llevaba como especie de cadena, puedo observar con la vista de mi loba pequeños destellos de piedras mágicas incrustadas en algunos eslabones.Kane le da vueltas en el aire con fuerza, listo para enlazar a la bestia salvaje que le ruge, y empuja una y otra vez, intentando salir de la prisión del hechizo.— ¡Kane, solo tienes una oportunidad, es demasiado poderoso! – la mujer le dice, se ve algo pálida y unas gotas de sangre bajan por su nariz.Por un segundo el tiempo parece detenerse cuando recita un conjuro y Ajax se queda callado al fin y rígido.No duró prácticamente nada, pero fue lo suficiente para que Kane arrojara el lazo de la cadena y lo enredara con ella, incluso tomó el riesgo de meterse al círculo en su forma humana para atarlo aún más con ella.Las gemas se iluminaron con magia chisporroteando en el aire.— ¡Cálmate Ajax, reacciona maldici0n, reacciona!“Ajax” una lágrima bajó por los ojos de mi loba y de los míos, al ve
AMALIANo me compadezco de ese desgraciado, si se muere, así nos ahorra todos los problemas y supongo que sería más sencillo ascender a Sacerdotisa.“Estas son las habitaciones de la manada de Ajax” mi loba me dice lo que ya sé y me paseo por el pasillo delante de las puertas cerradas, con disimulo.“¿Lo hueles o Kane?” Le pregunto, pero me dice que no.— ¿Quería algo, señorita? – me pregunta una voz masculina de repente y me giro algo rígida para ver a uno de los guerreros de Shadow Hunters.— Yo, no, no, solo, su Alfa me salvó de un ataque y quería agradecerle – me invento lo primero que se me ocurrió.— El Alfa Ajax tuvo que salir por asuntos urgentes de la manada, no se preocupe, le doy su agradecimiento.— Ah, ok, gracias – le respondo un poco decepcionada.Me marcho aun mirando hacia atrás, bueno, al menos parece que pudo escaparse para curarse en un sitio seguro.Camino hacia mi habitación y me doy un baño para quitarme toda la sangre.Las imágenes de todo lo que sucedió hoy re
AJAX“Ajax intenta no cambiar más a mi forma, estás tentando a la suerte, acabaste de tener la peor recaída de todas”“Lo sé Conall, lo sé, solo que estoy algo ansioso, intenta camuflarnos lo mejor que puedas, que no nos huelan” – le digo, escondido contra la pared de la villa, amparado en las sombras.Vigilo que nadie me sorprenda mientras me pongo rápidamente el pantalón.Observo un poco las ventanas del segundo piso y escojo la mejor manera de subir por las enredaderas de adorno que cubren la pared.Me paro sobre el alféizar de una ventana que afortunadamente es amplio, pero cuando voy a forzarla para entrar, escucho gimoteos bajos, como llanto de un cachorro, amortiguado por el cristal.La luz se prende repentinamente y me pego a la esquina, escondido y asombrado, por lo que mis ojos ven a continuación.Es Amalia, sin ese ridículo disfraz, aunque su cabello sí que es más platinado de lo que recordaba, camina deprisa, cerrándose la bata de dormir.Parece que se estaba dando una duc
AMALIA“Amalia, él, ha estado un tiempo afuera, en la ventana, yo… pienso que él tiene derecho de conocerlos, los niños no tienen la culpa…”Ella comienza a argumentar mientras yo me acerco paso a paso, a través de las penumbras, mirando su ancha espalda y él está de pie, frente a la cunita.Mis manos tiemblan, me imagino que me va a reclamar por esconder a sus herederos, digo lo primero que me pasa por la cabeza, palabras que pretenden herirlo, cuando en realidad, solo nos estoy hiriendo a los dos.— Aléjate ahora mismo de la cuna o no respondo - lo amenazo esgrimiendo el arma.*****AJAX— ¡Dime la verdad de una vez Amalia! – le exijo tomándola por los hombros y pegándola a mi pecho.Me ha amenazado con ese tonto cuchillo, gritándome todos sus agravios, todo lo que me merezco por imbécil.— Sí, es obvio que los bebés son tuyos y no diré nada más, debes hablarme tú primero con la verdad, Alfa Ajax, ¿desde cuándo te estabas convirtiendo en un Renegado? – me pregunta y me tenso.Parece
AJAXEstoy más preocupado por el llanto de los niños que por sus estúpidas amenazas.— ¡Amalia, este hombre es el origen de todas nuestras desgracias, entiendo que sea tu mate, pero ahora que él te descubrió puedes rechazarlo!— ¡NO! – le rugí, ahora si molesto, ¿cómo se atrevería a sugerir tal sacrilegio? — Hermano, no te metas en eso, te dije que era mi vida y mi decisión - Amalia le respondió con firmeza dándome algo de paz mental. Estaba dispuesto a empujarlo a la fuerza para sacarlo de la habitación y que Amalia atendiera a los cachorros. Me importaba una mierd4 que esta fuese su manada, ellos son mi familia.— Sal de la habitación Vladímir, ¡que salgas de una vez! – Amalia lo empuja y yo me tenso.Espero por su bien que no toque a mi hembra o no me contendré.— ¡No si él se queda aquí!— Esa es mi decisión, hermano…— Amalia…— Nunca les haría daño y tampoco escaparé, no lo haré, yo más que nadie, soy el interesado en limpiar mi nombre – le digo – Hoy, príncipe, aclaremos tod
AJAX— ¿Es capaz de reconocer la voz o el olor del hombre, que amenazó a su madre con que los asesinaría bajo mis órdenes? – le pregunto a tal Vladímir.Él está sentado detrás del escritorio y Amalia y yo frente a su posición, ambos en unos cómodos sillones.Quisiera que estuviese sobre mis piernas, ese es su lugar, pero por ahora me conformo con su cercanía y el tener la oportunidad de limpiar mi honor frente a ellos.— No he reconocido el aroma en nadie, ni siquiera en el Rey, que según usted es el culpable. Tampoco la voz. Lo he intentado, pero ha sido casi imposible, había demasiado ruido esa noche, estaba con miedo y todos los sonidos se amortiguaban por la cubierta de madera de la pared, lo que recuerdo con mayor claridad fue la frase “… culpa por esto al Alfa Ajax, yo no creo en tus maldiciones de bruja…”Él responde de manera hosca, sé muy bien que lo está intentando y tolerándome por Amalia.— Quiere decir, que quizás la Sacerdotisa castigó a su atacante con alguna maldición
AJAX— Mi objetivo era acabar con el padre de ustedes, el anterior Rey Alfa, pensando que había mantenido a mi hermana prisionera, violándola hasta su muerte y luego haberle ordenado a su leal Beta que asesinara a mi sobrino.— Supuestamente, Alfred no pudo cumplir con la orden y lo llevó hasta mí, contándome indignado “la verdad” de ese tirano. No me avisó antes, porque se enteró en los últimos momentos de todo ese asunto sucio y secreto del Rey y escuchó toda la confesión de mi hermana antes de morir.— Casi llorando me dijo que él mismo enterró su cadáver, creo que eso fue lo único real que salió de su boca venenosa y mentirosa – agregué con ironía.— Ese hombre que asesinaste no es nuestro padre - Amalia habló repentinamente.— Amalia…— Vladímir, él nos ha revelado su pasado, yo le creo, hermano, si no confías en él, confía en mí, el Alfa Ajax no te miente – mi corazón latió emocionado al escucharla defenderme, pero a la vez, también estaba confundido.— ¿Él no era su padre? Pero
ALFRED— Su majestad, lo acabo de confirmar, esas mujeres que le dije odiaban al Alfa Ajax, al fin pudieron seducir a uno de los mineros – escucho atentamente esta noticia de la boca de Edgar desde mi posición acostada— Me acaban de llamar que el hombre no les dijo exactamente de qué se trataba, él trabaja en logística, pero en una ocasión la caja estaba media abierta y vio el destello de unas piedras en su interior, mientras la cargaba.Me dice entusiasmado y aprieto los puños por debajo del edredón reprimiendo mi alegría.Esto es una excelente noticia, lo sospechaba desde que Edgar me dijo que lo echaron repentinamente de la mina, había algo raro porque supuestamente la iban a vender, pero investigué y no fue el caso, sin embargo, la seguridad aumentó y solo un grupo reducido de personas se le permitía el acceso.Incluso esas mujeres que iban a “atender” a los mineros, ya no pudieron acercarse, ellos tenían que ir hasta el pueblo cercano donde ellas vivían.— Parece que el Alfa Aja