Rexon Una vez que cubrí a Lluvia con todas las mantas que encontré en la cabaña salí al exterior y tomé mi forma de lobo para después adentrarme el bosque. No sabía de qué manera describir como me sentía, cuando ella me dijo que yo también le gustaba casi se me sale el corazón del pecho, pero ahora ¿Qué debía hacer? No sé por qué tenía la sensación de que no podía hacer las cosas con ella a como eran nuestras costumbres. No importa a cuantos lobos derrotará en batalla, estaba seguro de que no me miraría con orgullo y admiración, si iba al bosque a buscar la presa más grande y se la entregaba a ella, solo lograría que me mirara extraño y con terror, además de que ella no sabe que esa es nuestra manera de pedir matrimonio a una hembra, y tengo la ligera sospecha de que ellos no hacen las cosas así. Pero antes de investigar en eso quería ayudar a ricitos a que se recuperara de su enfermedad, llegué a la bonita casa de mi abuela y abuelo en el bosque. Tomé un albornoz de los que colgab
Lluvia. Han pasado dos días y ya me siento mucho mejor, pero Rexon sigue cuidándome como si yo fuera una niña pequeña, debo admitir que me sorprendió despertar el otro día y encontrar un desayuno echo por él, una sopa de pollo con verdura que no le quedó nada mal, como no me había dejado hacer nada ni salir de mi habitación hasta que estuviera mejor, él se había quedado conmigo en la habitación, no recuerdo con exactitud que cosas hablamos, solo sé que el tiempo pasaba volando y nos la pasábamos riendo; al día siguiente mando traer una televisión a mi habitación, ese día nos la pasamos mirando películas con palomitas. El día de hoy en la tarde Rexon llegó con varias cobijas para mí, tuve que devolver todas las demás y la que en verdad me pesó perder fue la de él, pero no podía aferrarme a ella como una pequeña, la entregué sin protestar, aunque a puerta cerrada tenía muchas ganas de llorar, me metí al baño a darme una ducha rápida antes de dormir, aunque el agua estuviera caliente e
Rexon. El día que estuve en casa de mi abuela, además de aprender hacer una sopa de pollo para mi ricitos, me tomé el atrevimiento de preguntarle sobre sus conocimientos, en especial como era que se desenvolvían las relaciones amorosas entre ellos. En primera me dijo que los humanos no eran como nosotros, que encontrábamos el amor a nuestra edad adulta nos imprimábamos de esa y estábamos juntos por siempre, eso parecía un cuento de hadas en comparación a ellos. Los humanos tenían múltiples amores a lo largo de su vida, tantos como ellos se permitiesen hasta encontrar a su amor verdadero o quizás no encontrarlo nunca; eso me preocupó, yo no quería ser un amor pasajero para Lluvia, quería que ella me viera de la misma manera que yo, 'como mi amor por siempre en esta vida". Me comentó también que eso de cazar, pelear con otros lobos para demostrar fuerza no funciona, ni tampoco se piden matrimonio ofreciéndoles un animal muerto sino con un anillo. En ese momento me di cuenta de que mi
Lluvia. Después de estar con ÉL, de solo pensar en amor eterno, se me erizaba completamente la piel del cuerpo, con ÉL solo conocí el dolor y el sufrimiento, además de siempre ver por las acciones de alguien, ya que las palabras se las roba el viento, quien mucho promete poco de todo eso cumple. Pero Rexon me estaba demostrando quererme, estaba intentando aprender a amarme como él supone que debe ser, como los humanos lo conocemos. Él y yo somos tan distintos, dos seres de mundos diferentes, que nos separaba un mar de conocimientos, actitudes y pensamientos distintos, pero aquí estábamos ahora, tratando de fusionar todo eso en uno solo. No voy a mentir que al principio le temía, me acostumbré a ver un hombre enojado con el mundo, al parecer, distante con un temperamento difícil., ahora lo notó diferente y me muero por averiguar si la razón del cambio fui yo, o solamente él siempre fue así. Me emocioné con sus palabras, en el fondo sentía que solo me miraba como un pasatiempo, pero
Dan. Creo que aún estoy soñando, quizás dentro de una ilusión, pero el día de hoy empezó de lo más extraño, en primera, en la mañana miré salir a Rexon de la habitación de Lluvia sonriendo como tonto, pero cuando lo miré después en la cocina le pregunté si había pasado lo que creía... él me dijo que no y me contó una historia algo extraña del perro de Lluvia que ahora resulta que abría puertas y él fue quién lo llevó a la habitación de ella, sospecho que me oculta algo. Después Lluvia apareció en la cocina para preparar el desayuno, pero ella no se le miraba perdidamente emocionada como Rexon, ella estaba dentro de lo que cabe normal como cualquier otro día. Al terminar el desayuno miré a Lluvia y Rexon salir al jardín, mis ojos no eran los únicos que seguían sus movimientos, el comportamiento de nuestro Alfa no era desapercibido para nadie. — ¿El Alfa Rex y Lluvia pasaron la noche juntos? — Juraría que escuché a Rex en la mañana en la habitación de ella, pero en la noche yo no e
Lluvia. Mis mejillas estaban sonrojadas, a pesar de estar haciendo un frío infernal, después de jugar con los chicos a la guerra de bolas de nieve me sentía muy acalorada, al final mi equipo terminó ganando y no lo atribuyo tanto a que tuviera al Alfa de mi lado, sino porque Rexon les parecía lanzar amenazas de muerte solo con la mirada a cualquiera del otro equipo que lanzará alguna bola muy cerca de mí, considero que fue trampa de alguna manera, pero bueno, fue divertido. Entramos todos a casa y cada quién desapareció en su respectiva habitación para darse un baño, la temperatura del interior era fresca, pero después de tanto vapor emanando de los baños quedó más cálida, fui a la cocina, me disponía a hornear unos panes para acompañarlos con un chocolate caliente, escuché la voz de Dan y Rexon en la cocina, me quedé quieta antes de entrar. — ¿Cómo me dijiste que se llamaba esa cosa? La que hace el interior más caliente.- Rexon le preguntó a Dan... — Aire acondicionado. — Perfec
No comí mucho durante la cena, me la pasé pensativa, Rexon no había regresado, yo me fui a mi habitación antes, sentía que tenía mucho en que pensar, las cosas entre Rexon y yo estaban avanzando a una velocidad descomunal en estos últimos días, especialmente desde que él aceptó sus sentimientos por mí, como dijo Dan, ellos no se andan con rodeos, el Alfa me había escogido como su pareja para toda la vida y yo, estaba disfrutando su atención y lo que estaba empezando a sentir, por eso es que a penas caía en cuenta de la realidad y la seriedad de todo esto. A pesar del frío invernal, tomé varias mantas en las que me enrolle y salí al exterior, el viento glasear me golpeó en el rostro mientras avanzaba a mi lugar favorito, debajo del árbol, sin duda me estaba congelando aquí, pero sentía que me ahogaba atrapada en las 4 paredes de mi habitación. Antes de seguir sobre pensando todo me permití deleitarme con el bello paisaje, los arbustos y las ramas del gran árbol estaban cubiertas por
Rexon. Habían pasado años desde la última vez que hablé de lo sucedido con mi madre y mi hermanita Annie con alguien más, hay muchos detalles que no le conté a ricitos, por ejemplo que entré en una fuerte depresión por su perdida en ese entonces, que aún después de matar a todos aquellos desgraciados no logré sentirme ni un poquito mejor y sobre todo, no tenía ni una pizca de culpa por ello a pesar de que mi padre estaba horrorizado por el desastre que había hecho por la ciudad, que me la pase durmiendo semanas enteras en el cementerio entre las lápidas de ellas, la fuerte discusión que tuve con mi padre cuando intentó deshacerse de sus pertenencias porque necesitábamos "cerrar ese ciclo" y como fue que terminó enviándome lejos antes de que intentara matar alguien del consejo Alfa si volvía a sugerir que papá necesitaba volver a casarse porque era muy necesario tener una reina.No sabía si aluna vez sentiría ese tipo de conexión mágica que hablaban los lobos con pareja, pero en ese m