Lluvia. Hoy hace un día hermoso, me siento feliz porque recibí una muy buena noticia después de mucho tiempo, Devora por fin se marcha de la casa, ahora por fin podré ir por ahí con total libertad sin tener que traer a Kurt pegado a mí en todo momento, no es que me moleste, es mi mejor amigo, pero sé que me cuida por órdenes de Rexon, ahora no va a ver razón alguna por la que no pueda andar sola por ahí…˜˜˜˜˜˜˜˜˜˜˜˜˜˜˜— Te dije que no...Rexon permanece parado en la puerta con los brazos cruzados observándome con una mirada severa, yo estoy igual, con los brazos sobre mi pecho mirándolo enojada, me prohíbe salir de la habitación porque Kurt no puede estar conmigo ahora. — No soy una bebé, ni una discapacitada, no me trates como tal - estoy molesta, entiendo que quiera protegerme, cuidar de mí y los bebés, pero esto es excesivo. — Si no quieres que te trate como tal entonces compórtate, no puedes salir, Kurt no puede cuidar de ti y yo por desgracia estoy hasta el cuello de respons
Kurt. Lluvia se da la vuelta y va a encerrarse al baño, noto su espalda tensa al alejarse, no puedo evitar sentirme mal por ella, entiendo que Rexon quiera cuidar de ella, pero solo la está ahogando.— Espérame fuera... - Rex me ordena y sin querer apartar la vista de la puerta en la que ella desapareció me doy la vuelta y me posiciono al otro lado del pasillo en la espera de él. Hoy la manada de Devora se marcha y quiere que yo personalmente me asegure que se larguen todos y no quede nadie ni nada de ellos en esta casa, él sospecha que Devora quiere hacerle algo a Lluvia, pero yo no la creo capaz, y no es que la defienda por supuesto que no, esa mujer es insoportable, pero no creo que sea tan ruin para intentar algo en contra de una mujer embarazada, hasta los malos deben tener honor. A los minutos Rex sale de la habitación, con mala cara, empieza andar por el pasillo, yo me posiciono al lado de él, su frente arrugada me deja ver que no esta de humor, no era muy diferente de cuand
Sin importarme nada ni nadie camino en dirección a Devora y la tomo de la muñeca del brazo que tiene levantado para golpear de nuevo a Nala, ni siquiera me tomo la molestia en medir mi fuerza, mi enojo se refleja en mi firme agarre, ella me voltea a ver enojada, sus ojos azules lanzan llamaradas de odio que chocan con mi glasear mirada, esta mujer no me provoca nada más que asco, yo no le tengo miedo, es una loba de un rango mayor que yo y según le debo respeto, pero esta mujer con sus acciones de lo único que es digna es que yo le escupa en la cara. Sus lobos se ponen en alerta, en especial su Beta quién me lanza una mirada de advertencia para que suelte a su Alfa, está en la espera de una orden de la perra, el ambiente de pronto se carga de tensión, pero mi mirada está fija en la de Devora, ella espera que simplemente la suelte, yo espero que ella intente zafar su brazo a otro lado para quedarme seguro que no la golpeara de nuevo, no pienso soltar su mano para permitirle que la gol
Nala. No puedo evitar llorar, aunque ya sabía lo que pasaría, Devora me despertaría delante de todos después de chocar conmigo y el café terminara en su ropa, tenía que crear una situación de tensión para desterrarme delante de ellos, pero nada salió como lo planeamos. Se supone que el príncipe Rexon sería quién vendría, no esperábamos que no se presentara; pero aún sin él teníamos que continuar con el plan, crear la situación que la orilló a echarme, es solo que... la reacción de Kurt fue tan inesperada, en cuánto la tomó de la muñeca sabía que esto se saldría de control, Devora nunca sede ante nadie y en cuanto él le soltará la mano sabría que me tenía que preparar para otro golpe, porque ella siempre deja en claro que hace lo que quiere y no obedece a nadie, pero Kurt no la soltó. Se supone que los Omegas tenemos que obedecer a las órdenes de nuestros superiores, sean de nuestra manada o no, pero él no lo hizo, incluso desobedeció a su Beta, las cosas estaban en un punto crítico
Rexon. Pateo un trozo de madera carbonizado... llegamos a una cabaña en el fondo de un bosque alejado de casa, hoy no podré regresar a dormir, todo parece indicar que sabían que veníamos, se marcharon y quemaron todo para que no quedara ni un rastro que seguir; esto es absurdo, solo quiero llegar a un puto acuerdo con ellos, que frustrante es solo querer hablar y que te evadan. Taxon se mueve a mi lado con la frente arrugada, no le he dirigido la palabra desde que nos está ayudando, ni él lo ha hecho lo cual agradezco.Me tragué mi orgullo hace días, fui a pedirle ayuda para encontrar a los renegados, solo se burló en mi cara negándose a ayudarme, para que dos días después le dijera a mi padre que aceptaba ayudar, lo más seguro es que solo quiere joderme, digo ¿Por qué confiar en él? Se alió con el enemigo solo para eso, joderme. — Pensé que eras el mejor rastreador...- le digo molesto, me siento como un perro tras su cola, que no llego a nada. Faltan unos 2 meses aprox. para el pa
Lluvia. Kurt y yo avanzamos por los pasillos, vamos al jardín... desde que llegó por mí a mi habitación hoy, me contó toda la situación que se dio con Devora cuando su manada se marchaba, en verdad fue tan intenso, casi me voy para atrás cuando me dijo que la golpeó... e independientemente que lo hiciera por mí y los cachorros como me dijo le pedí que no volviera a pelear así con alguien por defenderme, pero de igual manera se lo agradecía; el desenlace de la situación no me lo esperaba, me cuesta creer que esa mujer se marchara sin hacer un escándalo, pero al parecer si lo hizo. Echó de su manada de la manera más cruel e hiriente a la loba tímida que llegué a mirar en ocasiones con ella, Nala, me dijo Kurt que se llama, lo miro extraño mientras avanzamos, jamás lo había escuchado hablar con ese entusiasmo, ver ese brillo en sus ojos cada que menciona su nombre, no puedo evitar sonreír mientras lo veo hablar y hablar, él se da cuenta, la sonrisa en su rostro se borra y me mira con s
La chica es muy agradable, curiosa y amable, me cae bien la verdad, tiene una esencia liviana que hace que te sientas cómoda con ella, al principio no hablaba mucho, ahora que parece que agarro confianza está hablando mejor conmigo, cada cosa que le digo parece ser un gran descubrimiento para ella, me recuerda tanto a mí antes. Le conté mi historia con Julienth, mi pasado con el rey de los vampiros no es un secreto, quizás no todos conozcan los detalles, pero no tengo problema para compartirlo, ahora no me duele hablar de eso, al contrario cada vez lo cuento con más facilidad, ese recuerdo ya no tiene peso sobre mí, y eso me pone feliz, al terminar mi historia ella se queda en silencio, Kurt se marchó a traer cosas para comer dejándonos solas. — ¿De verdad nunca lo odiaste, después de todo lo que te hizo?.- miro al frente, pensando mis próximas palabras. — Cuando estaba cautiva lo único que deseaba era morir para dejar de sufrir, cuando logre escapar solo pensaba en huir para no se
El día de hoy está algo nublado, el cielo está cubierto por nubes grises y el viento a pesar de que no es muy salvaje, es lo suficiente fuerte como para desacomodarme cada cierto tiempo el cabello. No me parece desagradable este clima, al contrario me parece bien poder descansar un poco de asfixiante calor, me he estado poniendo mal por las altas temperaturas, mi ritmo cardíaco se descontrola mucho y me siento mareada. Han pasado dos días desde que estuve en el jardín con Kurt y Nala, por el calor no pude salir de la comodidad que me brindaba el aire acondicionado de mi habitación, pero hoy el clima me parece agradable para estar fuera. El aire acondicionado no se compara a la caricia del viento salvaje, este día me encanta; Kurt pasó por mi habitación todos los días, para ver que haríamos, pero como el calor estuvo muy fuerte los días anteriores le dije que me la pasaría en mi habitación; hoy cuando pasó le dije lo mismo, pero para mi buena suerte comenzó a ponerse nublado, salí de