A la Deriva 71—no creo, pero ese man sabe muchísimo sobre plantas. Bueno, masca un poco ahora después vamos a buscar otra forma mejor para mantener tu mente segura, igual Mateo también es de confianza eh. Bueno, voy a ver por mis compas si ya tienen todo listo— Francis lo abrazó, gracias a él su preocupación se había disipado… Leo solo sonrió y fue donde sus compas. —fresca mamita qué yo no digo nada ah— le dijo Mateo a Francis cuando salió de su habitación. —y no es que yo me haya metido en su cabeza ¡eh! No señora, yo no hago eso. Tu expresión me dijo todo. Así que cuidado con eso. Igual lo más práctico seria que uses talismán o algo así. Pero bueno hablamos más tranquilos después—dijo Mateo volteándose y comenzando a caminar. —entonces ¿vos sabés lo de Laurine y Edgar?— preguntó Francis nerviosa. —pues sí ome. Mujeres letales como ella se reconocen a leguas, hombres también— —¿hombres?— —claro, mamita. Los tritones por ejemplo, que son de su especie y bueno su capitán tam
A la Deriva 72—no, tenía mucho sueño y solo habló de usted un momento hasta que se quedó dormida, entonces salí a buscar algo para tomar y ahí fue que me crucé con Leo y me invitó a ver la niebla——ah bueno gracias igual. Desde ahora yo me haré cargo— dijo él serio y seguido de eso respiró profundamente y la volvió a besar con pasión… Todo el cuerpo de Francis se estremeció cuando sintió las manos gélidas de él acariciar su cintura con delicadeza. Ese choque entre su cuerpo caliente y el frío de Theo hizo qué se excitara más al punto de lanzar un gemido… Sin dudarlo Theo comenzó a desprender los botones de la camisa para apreciar los pechos de Francis. Una parte de ella quería que se detuviera pero la otra que siguiera adelante. Sabía que no estaba preparada ni por lejos para lo que iba a suceder. Pero el sentir placer por primera vez hacia qué esas inseguridades y temores se desvanecieran, claro también amaba a Theo, de eso ya no tenía dudas… Él comenzó a b
A la Deriva 73—no creo, pero ese man sabe muchísimo sobre plantas. Bueno, masca un poco ahora después vamos a buscar otra forma mejor para mantener tu mente segura, igual Mateo también es de confianza eh. Bueno, voy a ver por mis compas si ya tienen todo listo— Francis lo abrazó, gracias a él su preocupación se había disipado… Leo solo sonrió y fue donde sus compas. —fresca mamita qué yo no digo nada ah— le dijo Mateo a Francis cuando salió de su habitación. —y no es que yo me haya metido en su cabeza ¡eh! No señora, yo no hago eso. Tu expresión me dijo todo. Así que cuidado con eso. Igual lo más práctico seria que uses talismán o algo así. Pero bueno hablamos más tranquilos después—dijo Mateo volteándose y comenzando a caminar. —entonces ¿vos sabés lo de Laurine y Edgar?— preguntó Francis nerviosa. —pues sí ome. Mujeres letales como ella se reconocen a leguas, hombres también— —¿hombres?— —claro, mamita. Los tritones por ejemplo, que son de su especie y bueno su capitán tambi
A la Deriva 74—no, tenía mucho sueño y solo habló de usted un momento hasta que se quedó dormida, entonces salí a buscar algo para tomar y ahí fue que me crucé con Leo y me invitó a ver la niebla——ah bueno gracias igual. Desde ahora yo me haré cargo— dijo él serio y seguido de eso respiró profundamente y la volvió a besar con pasión… Todo el cuerpo de Francis se estremeció cuando sintió las manos gélidas de él acariciar su cintura con delicadeza. Ese choque entre su cuerpo caliente y el frío de Theo hizo qué se excitara más al punto de lanzar un gemido… Sin dudarlo Theo comenzó a desprender los botones de la camisa para apreciar los pechos de Francis. Una parte de ella quería que se detuviera pero la otra que siguiera adelante. Sabía que no estaba preparada ni por lejos para lo que iba a suceder. Pero el sentir placer por primera vez hacia qué esas inseguridades y temores se desvanecieran, claro también amaba a Theo, de eso ya no tenía dudas… Él comenzó a b
A la Deriva La Travesía Del Vampiro Theodore, o Theo como le decían, era un jovencito pirata muy temerario y de fuerte carácter. Con tan solo trece años ya era dueño de una embarcación. Su padre el temerario Dorother había fallecido tras haber sido asesinado en una emboscada. Dorother junto a sus hermanos, todos piratas infundían terror en el océano Atlántico y el Pacífico. Todos los hermanos Bartomek eran oriundos de Santa Cruz, Argentina o casi el fin del mundo como ellos decían. Theo había aprendido todo sobre piratas, incluso cosas que niños de su edad no debían saber… Era muy bueno en el manejo de armas, no dudaba si debía atacar. Por eso cuando Dorother falleció nadie se opuso a que él quedara a cargo de La Cruz del Sur, como había bautizado su padre al navío. Una mañana después de dar un largo trago a una botella de vino Theo exclamó: —Bien señores es hora de partir hacia Europa— Todos lo miraron consternados. Él los observó con sus penetrantes ojos ce
A la Deriva… 2 El tío de Theo había quedado muy abatido al ver el cadáver de su sobrino flotando en la costa de la isla. Él y unos pocos habían sobrevivido al naufragio. —todos estuvimos de acuerdo en que no debíamos tomar esa ruta, pero el capitán es el que sabe, se lo tiene bien merecido lo que le pasó— exclamó el grumete con furia mirando la expresión de horror en el rostro de Theo. ¡Respétalo, era mi sobrino y el hijo del gran Dorother! — le gritó el tío muy dolido. —si, te oirá, su alma aún ronda este mundo— dijo otro de los hombres asustado. —bien ya, lo siento, estoy desesperado. Con el capitán muerto y el navío desecho ¿que vamos a hacer?— dijo el grumete preocupado. —Oí algo a lo lejos, al parecer esta isla está habitada— dijo un joven. —eso es algo bueno, mientras no sean salvajes—dijo el tío de Theo serio. Todos lo miraron y asintieron con la cabeza. Estaban asustados, todo había ocurrido tan de repente que no les había dado tiempo de asimilarlo, y solo e
A la Deriva 3…Había caído la noche y la luna llena brillaba sobre el mar y la Cruz del Sur.—¿Porqué están tan callados?—preguntó Theo sarcásticamente.—¿cómo pudiste hacerle eso a Ian?—preguntó Jorge molesto.—ay ya tío, tenía que alimentarme, además nunca me cayó bien. Gracias a él no tendré hambre por un tiempo y cuando eso pase me comeré a alguno de ustedes, tal vez al grumete, lo detesto——¡ni se te ocurra acercarte demonio del mar!—gritó el grumete apuntándole con una espada.—¿Cómo podés decir esas cosas?— gritó exasperado Jorge.—ya no soy el mismo tío—dijo Theo mirando a la nada.—sabía que ese tipo te haría daño——&
A la Deriva… 4 —¡che, nené, arriba!—dijo el tío y apenas tocó su frente Theo abrió los ojos de golpe. Eso asustó a Jorge que inmediatamente se echó para atrás de un salto. Theo lo miró fijamente con su penetrante mirada gélida y sonriendo dijo: —tranquilo tío, sabés que a vos no te voy a matar, sos mi familia y además el contramaestre, así que tranquilo— Jorge no hizo más que sonreír torpemente. —bueno che, entendé, para mi no es fácil. Perder a mi hermano, embarcarnos en este viaje incierto y ahora esto… —ya tiito, yo ya me acostumbré a mi nuevo yo, es lo mejor que me pudo haber pasado, y… ¡no morir como una porquería a manos de esos monstruos inmundos!— Jorge quedó sorprendido. —hace mucho no me decís así, desde que eras un niño— —ya no soy un niño, y nunca te diré así frente a la tripulación, solo se me escapó— dijo Theo desviando la mirada. Jorge lo abrazó. Él lo empujó. —ya, suficiente cursilería por hoy— dijo Theo serio. —Em, bueno, este a lo que venía— dijo Jorge n