No sabía que hacer en estos momentos, bueno la verdad si sabía que decir, pero las palabras no salían de mi boca estas parecía que estaban atrapadas dentro de mí, empecé a jugar con mis dedos no podía ver la cara de Jayce porque si lo hacía tendré pesadilla para siempre que ni con años con un buen psicólogo se me quitaría exagerado pero cierto. Pero si tenía miedo, moví mis labios sin emitir algún sonido a lo que Jayce hizo un sonido como: ¡MMM!, tragué saliva y lo vi fijamente.

¡Sálvame Simba, o los indestructible quien sea, ya!

- Antes de que grites o digas algo, no es nada de lo que estás pensando. Solo fuimos a comer y platicamos después me dio náuseas y ya. - Observé sus ojos mientras este se cruzaba de brazos.

- ¿Y se puede saber de qué diablos hablaron?, porque por lo que yo recuerdo solo te da náuseas cuando estas nerviosa o recibes noticias fuertes. - Me toco el hombro y me miro de manera acusadora. - ¿Tú me estas ocultando algo?, ¡Dime la verdad Charlotte