Capítulo 28. Burbuja de Pasión.
En el elegante palacio de Amalienborg, la princesa Elizabeth se encontraba en su aposento disfrutando de un momento de tranquilidad. La luz suave del atardecer se colaba a través de las cortinas, creando un ambiente acogedor. Su asistente, Gía, estaba a su lado, organizando algunos documentos, mientras veían un programa de cotilleos que se emitía en la televisión. De repente, la pantalla mostró la imagen de Oliver Campbell, duque de Cambridge, presentado como el soltero más guapo y cotizado de la ciudad. Elizabeth, con una chispa de picardía en la mirada, no pudo evitar comentar:—Gía, ¡mira a ese hombre! —exclamó, señalando la pantalla. —Con esa gallardía y virilidad, será mi esposo en un abrir y cerrar de ojos.Gía sonrió un poco sonrojada, pero antes de que pudiera responder, Elizabeth, sintiéndose abrumada por la idea de compartir ese momento, frunció el ceño y dijo:—De hecho, creo que necesito un momento a solas. ¿Podrías salir un momento, Gía?Gía, sorprendida pero comprensiva,
Leer más