Dominic sintió como la rabia recorría su cuerpo, al mismo tiempo que algo desagradable se instalaba en su corazón al imaginar a Jacob alejando a la madre de su hijo de él y haciendo uso de todo su autocontrol para no terminar atacando a Jacob cuando estaba tan furioso, aclaró: — Ella no está a la venta. —¿Por qué no? Si es una simple esclava para ti no veo porque no puedes vendérmela, más cuando estoy dispuesto a pagar mucho, incluso te puedo dar diez de las esclavas de mi manada a cambio de ella si lo que necesitas es más ayuda con las labores, porque aquí solo es útil para eso y yo tengo planes de que en mi manada desempeñe otro papel, uno más cercano a mí, si sabes de… — Jacob Insistió sin notar el cambio en Dominic, ya que estaba demasiado interesado en Aitana como para leer a las personas a su alrededor y pensó que Dominic aceptaría si le hacía una propuesta tentadora, pero antes de que pudiera terminar sus palabras, ya Dominic lo había tomado por el cuello de la camisa, mient

Dinora en este instante se sentía entre la espada y la pared, ella le debía lealtad a Dominic que era su Alfa, por lo que debía ser completamente sincera con él sobre sus sospechas, pero no podía evitar pensar en esta pobre chica que no la estaba pasando nada bien aquí y que a pesar de haberle dado ya un hijo a Dominic, él seguía manteniéndola como esclava y permitía que otros la maltrataran, por lo que decir lo que creía podría empeorar la situación de Aitana, debido a que Dominic tenía planeado casarse con otra persona y ella no deseaba perjudicarla. Además podía recordar lo nerviosa que Aitana se puso cuando le mencionó tal posibilidad, si ella prefería negar este hecho significaba que esto podría ser malo y si se lo decía a Dominic, él podría tomarlo mal. —Mi Alfa ella esta descompensada, su cuerpo sigue débil, sus heridas no se han estado curando adecuadamente y además parece no estar comiendo bien, lo que necesita es descansar, cuidados y alimentarse mejor o su salud se irá

«Mi vida no creo que sea buena idea que yo aparezca por allá aún, no podemos levantar sospechas y creo que tú puedes encargarte, eres muy buena resolviendo cualquier cosa que te de problemas.» «Sé que lo soy, pero quiero tu ayuda en esto, esta esclava puede causarnos grandes problemas si no le ponemos un alto pronto, así que es mejor si vienes.» Replicó Julia, creía que aunque Dominic había dicho que podía castigar a Aitana o decirle a él si ella la volvía a ofender, por el momento era mejor utilizar otro método ya que él parecía sentir algo por Aitana, entonces si ella insistía en castigarla, podría hacer que él la mirara de otra forma, por lo que necesitaba eliminar cualquier sentimiento que él tuviera por Aitana primero para poder lidiar con ella libremente. «Esta bien, pero necesito unos días, tengo algunos asuntos aquí de los que debo encargarme también.» Accedió él finalmente. «Que sea rápido, no podemos perder mucho tiempo y arriesgarnos a que algo salga mal en nuestro pl

Él sabía bien que no podía decirle la verdad a Julia o creería que él se preocupaba por Aitana y esto sin duda la lastimaría más y no era lo que él deseaba.Julia no se merecía sufrir por nada más y era su deber mantenerla feliz. —No, no interrumpes nada, estoy aquí porque Bastian había estado llorando estos días por ver a esta esclava y no tuve más opción que complacerlo, pero decidí que estuviera bajo mi supervisión para asegurarme que ella cumpliera mis instrucciones. — Respondió Dominic finalmente tenso, pero con su voz llena de alienación al referirse a Aitana, diciendo una mentira disfrazada con una parte de verdad, tratando de calmar a Julia para que no llorara. Aitana al escucharlo se llenó de amargura, ella había pensado que él finalmente había llegado a sentir un poco de piedad por ella y por eso había venido a verla y le había permitido ver a su hijo, pero una vez más se había equivocado. Dominic seguía siendo frío y cruel con ella, ese que parecía disfrutar de lastim

—Aitana si te he lastimado en algo lo siento, no ha sido mi intención, pero… — Musitó Julia con voz lastimera, pero luego de escuchar estás palabras la rabia de Dominic se había elevado mucho más, pensando en que Julia era demasiado buena, todo lo contrario a Aitana. —Julia tú no debes disculparte, no lo merece, es ella quien debe hacerlo, Aitana como te gusta tanto exigir, eres tú quién le pedirá perdón de rodillas a Julia o lo pagarás muy caro. — Espetó Dominic con su voz llena de amenaza. «Dominic basta ya.» Gruñó Xander, tratando de tomar el control nuevamente, pero Dominic una vez más logró reprimirlo. Aitana de inmediato negó con la cabeza desesperada, sintiendo como el miedo y la indignación la embargaban, aquí estaba su hijo y ella no quería que él presenciará algo así, no podía dejar que la humillaran de esa forma frente a Bastian, por eso a pesar del miedo que le tenía a Dominic, no estaba dispuesta a obedecer. No quería que Bastian la viera como alguien débil que se

La loba solo se la quedó mirando sin contestar a su pregunta, mientras Aitana se llenaba de miedo, nadie de la manada transformado se veía como está loba, así que sentía que podía estar en peligro ahora. Lo peor es que no tenía manera de defenderse, nunca podría ganarle cuando ella no tenía a su loba. —¿Quién eres? ¿Por qué estás aquí? — Inquirió Aitana nerviosa, pegando su espalda más al árbol detrás de ella como si esto pudiera protegerla. —Muy pronto lo sabrás y en ese momento muchas cosas cambiarán. — Respondió la loba, antes de empezar a retroceder, desconcertando a Aitana, pero al ver que se comenzaba a alejar sin atacarla, se llenó de dudas y curiosidad, entonces su miedo pasó a un segundo plano, ahora solo quería saber que era lo que ella quería decir con esto. —Espera. — Pidió Aitana, pero la loba blanca siguió alejándose, ignorándola y Aitana empezó a correr detrás de ella queriendo alcanzarla, pero entonces despertó sudando y sintiéndose aturdida al darse cuenta q

Aitana la miró llena de dudas, sabiendo que no debería hablar mal del Alfa o la Luna de la manada frente a nadie, pero no sabía de que otra manera convencer a Dinora, lo único que podía hacer era arriesgarse a confiar en ella, ser sincera y esperar que no le dijera lo que ella había dicho a nadie. —La diferencia sería que me daría tiempo para pensar en una forma de mantener a salvo al bebé en caso de que esté embarazada, pero si usted le dice hoy mismo al Alfa y la futura Luna se entera, es posible que haga que me vuelvan a castigar más severamente está vez y la vida de mi bebé y la mía propia estarán en riesgo, usted misma vio lo que me hicieron, no sé si pueda sobrevivir a algo así de nuevo y no quiero morir, tengo a Bastian de quién debo cuidar, ella es mala y al Alfa yo no le importo y creo que sí debe elegir entre ella y Bastian, la elegirá a ella, por lo que fácilmente Julia podría hacerle daño también a Bastian sin ninguna consecuencia, por lo que no puedo permitirme morir y

Aitana se tensó de inmediato y por inercia levantó la cabeza para mirarlo desconcertada, intentando encontrar una respuesta a por qué él quería perjudicarla cuando ni siquiera se conocían, pero al encontrarse con los ojos de James que como si hubiese sentido su mirada ahora también la miraba a ella, un escalofrío la recorrió y tuvo que bajar la cabeza nuevamente, porque en esos ojos había algo que daba miedo. — James, es que ella fue quien dio a luz a Bastian, ya que nos dio el hijo que tanto queríamos Dominic y yo, no podemos ser malagradecidos con ella, por eso la mantenemos en el palacio. — Respondió Julia antes de que Dominic pudiera hacerlo, queriendo provocar a Aitana con estas palabras, ya que no olvidaba que Dominic no la había castigado y aunque no entendía por qué él no había hecho esto, ella no había querido preguntarle para que él no pensara que ella estaba buscando que él lo hiciera porque esto podría perjudicar su imagen de buena, sin embargo quería buscar la manera de

Apenas Aitana terminó de recoger la mesa, pensó en aprovechar el momento para ir a ver a Bastian, ya lo extrañaba mucho, no había podido verlo en unos días y necesitaba asegurarse de que él estuviera bien, por lo que nerviosa, tomó de la cocina a escondidas una galleta de las que a él le gustaban y un vaso de leche para llevárselos, salió de la cocina mirando hacia todos lados antes de dirigirse al pasillo que conducía a la habitación del pequeño tratando de no ser vista. Sin embargo por estar volteando hacia atrás para asegurarse que nadie la viera, apenas entró al pasillo sintió que su cuerpo impactaba contra otro y la leche terminó derramada sobre los dos y la galleta en el suelo. —Maldita sea. Al escuchar esto Aitana retrocedió asustada, odiando su negligencia y alzó su rostro para encontrarse con los ojos llenos de desdén y algo más que ella no pudo identificar de James, entonces un escalofrío la recorrió. Él era una de las peores personas con las que podía equivocarse y

Aitana abrió los ojos completamente sorprendida al escuchar esta voz y James se congeló por un instante, antes de reaccionar y voltear hacia Dominic.— Primo esta esclava se atrevió a lanzarme un líquido encima de la nada y no conforme con esto cuando le reclamé, me abofeteó, lo cual me parece inadmisible, no entiendo como una esclava se cree con tal derecho, piensa que por dar a luz a tu hijo se convirtió en la Luna de la manada, por eso quiero darle una lección para que entienda su verdadero lugar. — Explicó James de inmediato soltándose del agarre de Dominic que se había aflojado y tomó un poco de distancia de Aitana para poder controlar sus ganas de golpearla, al menos hasta que Dominic entendiera su punto y no se opusiera a lo que él tenía en mente. — ¿Esto es cierto Aitana? — Cuestionó Dominic entrecerrando los ojos al mirarla y Aitana temerosa negó con la cabeza, sin querer enfrentarse a la ira de Dominic también. — No es cierto lo que dice, solo cometí el error d