Helena Recibí un mensaje muy temprano de Thomas, quien necesitaba mi ayuda de urgencia, así que me arreglé con un traje de oficina con una falda lápiz y esperé a que llegara mi novio por mí. Cuando lo hace, mi hermosa Carmelita lo invita a desayunar. Él, encantado, acepta, entra y me da un tierno beso en la frente. Lo tomo de la mano y lo dirijo al comedor, donde Carmelita sirve el desayuno. —Cuéntame, cariño, ¿qué sucede? Te veo un poco preocupado. Él comienza a contarme todo lo que pasó con Emily, su amiga, y no puedo evitar derramar una lágrima al saber lo que le ocurrió. Ahora está en una cama a la espera de que reaccione. Sé que no hay mejor médico que mi amigo para ayudarla. —Tranquilo, amor, Derek es el mejor, podrá ayudarla —le sonrío. —Lo sé, gracias, cariño. Ahora tengo que llamar a Axel, estoy seguro de que también querrá saber quién fue el tipo que le hizo esto —me dice con enojo. —Lo van a encontrar, lo sé —le digo con esperanza.
Leer más