El sol brillaba sobre la ciudad cuando Ethan se dirigió decidido hacia la oficina de Mervin. Su mente estaba llena de furia y determinación mientras repasaba en su cabeza las palabras que planeaba decirle. No podía dejar que Mervin escapara de su responsabilidad.Con pasos firmes, Ethan llegó a la puerta de la oficina de Mervin y entró sin siquiera llamar. La expresión en su rostro era un claro indicio de la ira que estaba a punto de desatar.Mervin, que estaba revisando algunos informes en su escritorio, levantó la mirada sorprendido al ver a Ethan entrar tan repentinamente. Frunció el ceño, confundido por la expresión en el rostro de su colega.—"Ethan, ¿qué haces aquí? ¿Pasa algo?" preguntó Mervin, su tono lleno de sorpresa y preocupación.Ethan avanzó hacia él con determinación, su mandíbula tensa por la ira contenida. Sin decir una palabra, levantó la mano y le dio una cachetada a Mervin que resonó en toda la oficina.Mervin quedó estupefacto, llevándose la mano a la mejilla en u

El oscuro pasado de Katy estaba envuelto en sombras de dolor y sufrimiento, una historia que había mantenido oculta durante años, incluso para aquellos más cercanos a ella. Mientras caminaba por los pasillos de la mansión, sus recuerdos la transportaban a un tiempo pasado, a una infancia marcada por la adversidad y la crueldad de aquellos que deberían haberla protegido.Desde el momento en que nació, Katy fue separada de su hermana gemela, Olegda, y entregada a una familia ajena que la trató con desprecio y crueldad. Mientras Olegda crecía en el lujo y la comodidad de la mansión, Katy se encontraba luchando por sobrevivir en un mundo que le era hostil desde el principio.La madre de ambas niñas, cegada por la ambición y la codicia, solo tenía ojos para Olegda, la elegida para heredar el legado de la familia. Katy, por otro lado, fue abandonada a su suerte, entregada a una de las criadas de la mansión que la llevó lejos de todo lo que conocía y la dejó a merced de una familia que la con

Mientras Mervin era llevado a la prisión, una sensación de serenidad y determinación lo envolvía. Aunque la perspectiva de enfrentar cinco años tras las rejas era desalentadora, había aceptado su destino con calma y resignación. Sabía que cada día sería un desafío, pero también estaba decidido a hacer lo mejor de la situación y a mantenerse fuerte para Katy, quien lo acompañaba en cada paso del camino.Las visitas de Katy se convirtieron en un rayo de luz en los oscuros días de Mervin en la cárcel. Cada vez que la veía entrar por la puerta, su corazón se llenaba de alegría y esperanza, recordándole que no estaba solo en este viaje. Juntos, encontraron consuelo y apoyo el uno en el otro, compartiendo risas, lágrimas y momentos de intimidad en medio del frío y la oscuridad de la prisión.Las visitas conjugales se convirtieron en un bálsamo para el alma de Mervin, ofreciéndole un breve respiro de la monotonía y la dureza de la vida en la cárcel. En esos momentos de intimidad compartida,

El silencio se apoderó de la habitación mientras Olegda, Katy, Mervin y el comisario Guedez procesaban la impactante revelación que acababan de descubrir en los documentos entregados por Cassandra. La verdad que se revelaba era más desconcertante de lo que nunca habían imaginado."Ethan... medicado... secuestro..." murmuró Olegda, apenas capaz de articular las palabras mientras leía los detalles sobre el estado de salud de Ethan y la impactante verdad detrás de la desaparición del cuerpo de Marcos. Él no había muerto, evidentemente...—"No puedo creerlo," dijo Mervin, con la voz cargada de emoción. "¿Cómo pudimos no verlo? ¿Cómo pudo Ethan hacer algo así?"El comisario Guedez frunció el ceño, profundamente preocupado por las implicaciones de lo que habían descubierto. Sabía que tendrían que actuar con rapidez para enfrentar la situación y traer a Ethan ante la justicia por sus acciones.—"Tenemos que encontrar a Ethan y poner fin a esto de una vez por todas," dijo el comisario en tono

El sol brillaba en lo alto del cielo, iluminando el jardín donde se celebraría la boda de Felix y Cassandra. Era un día perfecto, lleno de amor y emoción, y la pareja estaba radiante de felicidad mientras se preparaban para dar el siguiente paso en su vida juntos.El jardín estaba decorado con elegantes arreglos florales y delicadas luces que se balanceaban suavemente con la brisa. Familiares y amigos se reunían, ansiosos por ser testigos del amor que había florecido entre Felix y Cassandra.Mientras la música comenzaba a sonar suavemente en el fondo, Felix esperaba nervioso en el altar, con el corazón latiendo con fuerza en el pecho. Vestido con un impecable traje oscuro, sus ojos brillaban con anticipación mientras esperaba ver a su amada caminar hacia él.Y entonces, el momento llegó. Con un resplandor de belleza, Cassandra apareció en el extremo del pasillo, luciendo deslumbrante en su vestido blanco. Su sonrisa iluminaba la habitación mientras caminaba hacia su futuro esposo, con