Un año después...—Te ves preciosa, mi amor.—Eso lo dices porque eres mi padre.—Claro que no —mi padre soltó una risita—. Conny y tú son las princesas más bellas de mi castillo. ¿Sabes una cosa? Aun estás a tiempo. Si decides no casarte, te ayudaré a escapar.—¿Qué dices, papá? —reí, mirándolo con atención—. No creo que pueda dejarle la vida en paz a ese pobre hombre que eligió mi oscuro corazón.—Pobre hombre, no sabe con quién se involucró. No creas que lo hago por ti, le estoy salvando la vida a uno de los míos.—Lo siento mucho, pero hace tiempo me lo dieron a cambio de un par de muñecas y un vestido y ya no aceptan devoluciones. Ese hombre no tiene escapatoria alguna de mis garras.—Uy, va a sufrir, pero qué le hacemos, a algunos nos gusta sufrir.—¿A ti también? —le pregunté y se encogió de hombros.—Pero no le digas a nadie, ya sabes, debemos aparentar lo contrario, aunque en realidad las mujeres son las que dominan.—Tu secreto está a salvo conmigo.Reímos y mi padre me abra
Leer más