La sensación que apenas estaba empezando a sentir, se expande de tal forma que no puedo evitar gemir muchas veces al igual que Danell, quien presiona con fuerzas sus manos en mi piel, ante la sensación que ambos sentimos. No podía entender cuanto lo necesitaba, hasta que me aferro a él y comienzo a moverme, para sentir más su contacto. El desespero me invade y yo muerdo mis labios al sentirlo plenamente.No sé si me muevo como se debe, porque lo hago de una manera tan desorganizada, pero, que expande las sensaciones que invaden mi cuerpo. Gimo y Danell lo hace igual, mientras él mueve como puede su pelvis y se aferra a mi cadera, para alejarme y pegarme a su cuerpo, tanto como sea posible. El agua choca con violencia por cómo nos movemos y yo sonrío satisfecha porque me estoy sintiendo muy bien. No hay promesas, solo hay deseo, uno que recibe lo que quiere con cada choque de nuestros cuerpos, q
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