Llega el final del verano, y con ello también volvemos a la vida normal.Después de una semana algo agitada, los niños están listos para su regreso a clases, a pesar de que no creo que estén muy felices al respecto, ya que hicieron muchos pucheros cuando les compré sus nuevos uniformes y preparé las cosas que necesitarían para su regreso a clases.No voy a mentir, me llena ilusión verlos usando esos bonitos uniformes de escuela privada, especialmente a mi hermosa Lily. En el pasado cuando yo ni siquiera tenía dinero para comer, solía llenarme de ilusión pensando en mi hija acudiendo a uno de estos lugares, una escuela privada con todos los lujos y cosas geniales, a las cuales antes creía que solo podían acceder los ricos. Sin embargo, ahora es un sueño hecho realidad, y viendo a Lily al lado de David, los dos en sus bonitos uniformes escolares, siento algo extraño, como un tipo de “felicidad” que no puedo explicar.Con el inicio de las clases, también significaba que yo debía volver a
Leer más