Narra KimUna semana después ¿Quién podía pensar que aceptar recibir la comida y ser custodiada era algo agotador? Al parecer, incluso lo más simple, se vuelve molesto con Alessandro. Ya que, siempre se va a los extremos. — Aquí tiene su merienda, señorita Morgan — me dice Sienna, una francesa que se encarga de preparar todo lo que mi nutricionista envió para que comiera. ¿El problema? Son en total, seis comidas en el día. Tres de ellas son desayuno, almuerzo y cena y las tres restantes, son meriendas. Que van desde una papaya y yogur griego con hojuelas a carne a la plancha. Porque todo debe ser saludable: sin grasa, salsas, carnes grasosas, alimentos con elevados niveles de grasas saturadas, ni azucares. Adiós a las gaseosas o jugos siquiera con una pizca de azúcar. Nada de café porque es tan tóxico como un cigarrillo o cualquier droga legal o no. Nada de golosinas y mucho menos, nada de actividades sedentarias por más de dos horas. Por lo que, si debo estar en el escritorio, es
Leer más