—El nuevo convenio lo tenía muy en claro,después de leerlo aceptaste sin un solo "pero" salido de tu boca,ahora no pongas esa cara de confusión—Layla no entendía ni una sola palabra de las que su esposo soltaba. —No sé de lo que estas hablando.—susurra la rubia parándose de la mesa,gracias a su esposo su hambre había desaparecido. Cada segundo se encontraba aún más confundida que antes,no sabía que hacer ni mucho menos que decir,solo su cara reflejaba su ignorancia hacia las palabras de Henry,se sentó en su cama con lentitud,tratando se no apoyar mucho su pierna herida. El castaño observó el pánico en los ojos ajenos,le sorprendían las habilidades actorales de su esposa,sabía que le había reclamado lo mala que era actuando pero estaba muy equivocado,ahora mismo la joven mujer podía convencer a cualquiera que entrara a la habitación,su rostro se había desfigurado en desconcierto. Henry sonrió de lado,tal vez si no hubiera escuchado la conversación d
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