Estaciono la camioneta afuera de la casa.Miro a Damián y mi padre sentado en el porche tomando una cerveza.Parecen agotados.Bajo de la camioneta, tomo las cosas y mamá me sigue de cerca— ¿Qué tal les fue? — Damián empina su bebida en respuesta haciéndonos reír a ambas.— Lo hizo bien —responde papá—Solo, le falta algo de práctica.Subo los escalones y dejo un beso en sus labios.— Pobrecito.— Solo mátenme—dice imitando mis palabras esta mañana cuando me desperté.— Voy a dejar esto y te llevaré a dar un paseo— le digo guiñándole.Entro a la casa y coloco las flores en la cocina.— Mamá, ¿Te importa si llevo a Damián al río? — ella deja su bolso en la encimera.— No tengo problema— dice— Tu tía debe estar por llegar y la verdad, no hay mucho que puedas hacer en la cocina.— Lo sé— suspiro— Pero, hago una sopa instantánea que te mueres—le digo.Me fulmina con la mirada como si hubiera dicho que el pollo de los Ángeles es mejor que el de Kentucky — Fuera de mi cocina—dice señaland

POV DAMIÁN.Estoy en un gran problema.Siempre he sido un hombre sin complicaciones.No buscaba una relación, pero tampoco huía de ellas. De hecho, mi profesión me ha dejado mal sabor de boca a la hora de salir en una cita.La mayoría solo quería salir con el actor y no se tomaba el tiempo de conocer al ser humano. No soy perfecto, pero tengo mucho que dar a alguien.Cuando conocí a Cara me pareció hermosa y claramente, conectamos de una manera inusual. Es una mujer con un talento increíble que estoy seguro de que, cuando salga a la luz, la hará resplandecer.Ambos somos personas testarudas que estamos aprendiendo a convivir como un matrimonio. Sí. Compartimos casa, gustos y encuentros sexuales que en verdad no tienen precedentes.Esta tarde en el río fue fantástico. Mi esposa es una mujer que no teme entregarse al placer y disfrutar.Me gusta como suena.Esposa.MierdaMe gusta.El problema es que, más que gustarme.Me enamoré de Cara.No quiero complicar nuestra relación. Pero, mien

Esta mañana cuando nos levantamos, no esperaba lo que estoy viendo. Y, si no lo estuviera haciendo diría que es una total mentira.Primero habíamos desayunado y preparado todo para venir al mercado. En un principio le había dicho a Damián que si lo deseaba se podía quedar descansando. Sin embargo, no quiso hacerlo y decidido acompañarnos.Ahora estoy alucinada con la fila que hay en el puesto de mi padre.Sí.Una fila de mujeres que esperan comprar. Obviamente, no hace falta ser un genio para saber que están aquí por Damián.La voz se corrió rápido.Hay habitantes de otros pueblos cercanos y no tan cercanos.Papá lo ha tomado con humor y Damián de manera amable posa con ella para las selfis.Tomo una botella de agua y me acerco hasta donde está de pie.— ¿Qué se siente ser explotado para que mi padre venda todo en media mañana? — Damián ríe y mira la fila que parece no acabarse.Creo que primero se acaba todo lo del puesto y de igual manera la fila se mantendrá.— Está bien, han sido

Frente al espejo termino de retocarme el labial y me doy un repaso rápido de mi aspecto.Llevo un vestido coctel cuello redondo en beige y por encima tiene un bordado semejando el patrón de un panal de abeja en color negro, sandalias negras y un pequeño clutch metalizado. El cabello lo arreglé en ondas dejándolo suelto.Ya lista y satisfecha con mi aspecto, salgo de mi habitación y por un momento pienso en tocar la puerta de la habitación de Damián, pero no sé si ya llegó.Resignada hago mi camino hasta la planta baja y una vez en el salón me siento a esperarle. Es frustrante estar en una situación así. Damián me trata como si no estuviera en casa. Me habla lo justo y cuando le molesto por su comportamiento. Solo se va de la estancia. Ayer cuando llegamos a LA. Se fue con la tonta excusa de que, debía ir a ver a Zane. Lo esperé y sucedió lo mismo que en casa de mis padres.Nunca lo escuché llegar.Está mañana me desperté decidida a solucionar cualquier problema que haya entre nosotro

El tiempo pasa lentamente y no sabemos nada de Damián ni se Zane. E intentando llamar varias veces a Damián, pero me manda a buzón. Lo que me hace penar en diferentes escenarios y ninguno es favorable.Miro hacia la cama del hospital y Abby duerme gracias al calmante que la enfermera tuvo que suministrarle. Ella esta aterrada de lo que, ese par puede hacer. También me siento de la misma manera, pero sé que no le sería útil a Abby si también me hago escenarios en mi cabeza.Estoy a punto de quedarme dormida sentada en el sofá individual junto a la cama cuando Zane entra poniéndome en alerta. Tiene el traje algo sucio y su rostro algo golpeado.Me enderezo y es cuando veo a Damián entrar llevando el mismo aspecto.—¿Qué hicieron? —susurro poniéndome en pie tratando de no despertar a Abby.—Encontré a Hamilton en casa de sus padres—comienza—Ahora sabe cómo se siente Abby—gruñe en tono severo Zane.Bajo la mirada a sus puños y miro a Damián.—¿Se han peleado ambos con él? —inquiero. Damiá

En silencio, avanzo por el pasillo del hospital al día siguiente. Esta mañana me obligue a levantarme y no ceder a las ganas de quedarme sola en la habitación.Después de mi intercambio con Damián anoche no sabía qué hacer. Por un momento pensé en irme, pero no pude. En cambio, me entregué al sentimiento y las letras que surgieron en el momento. Tomé una hoja y escribí lo que sentía en ese momento. Cuando acabé, le di una melodía suave la letra e increíblemente tengo la mitad de una canción, hace mucho que no escribía media canción de un tirón.¡Diablos! Es la primera vez que lo hago.Llego a la habitación Donde Abby paso la noche y toco suavemente dejando a un lado un momento mis problemas con Damián. De hecho, no sé, si está aquí, ya que como se le está haciendo costumbre no estaba en casa cuando me levante.Escucho una voz que me invita a pasar y abro la puerta para encontrar a Abby recostada en la cama con mejor semblante. Y sentada a su lado con cara de disgusto encuentra sentada

Cuando entro por la puerta de la casa, busco a Celeste y la encuentro en la oficina de Damián limpiando el lugar. Le informo que la hermana de este viene a pasar algunos días y ella de inmediato se va para tener todo listo para su llegada.Una vez a solas, camino por el sitio. El mismo refleja por entero lo que es Damián. Ordenado y meticuloso. Siempre apostado a lo grande. Sin duda, un hombre con las cosas claras.—¿Tú, Cara? —Susurro —¿Tienes un propósito y estás clara en lo que quieres?Necesitando a alguien con quien hablar, busco el móvil en mi bolso y encuentro a la única persona en que confío para esto.Marco y espero paciente a qué responda.—¡Hola! —Sonrío ante el saludo efusivo de Keyla.—Hola Key—respondo— ¿Cómo has estado?—Con mucho trabajo—suspira—Siento que no hemos hablado mucho en los últimos días.—Lo sé—digo sintiéndome culpable—Es solo que han pasado muchas cosas—me siento en el sofá de la oficina de Damián—¿Quieres la historia corta o larga?Ella se ríe.—Sabes qu

La puerta principal se abre y veo entrar a Abby en una silla de ruedas con cara de cabreo. —¿Qué sucede? —inquiero cuando la veo así. —No quiere la silla de ruedas, pero no puede caminar erguida—responde Damián. —Eres un dramático—bufa Abby. Oculto la sonrisa que quiere salir. Miro a Damián y le regalo una sonrisa. En que estabas pensando Cara. Mejor dicho, no pensabas. Está claro que amo a Damián. —Ya la habitación esta lista—digo. —Gracias—responde Damián en tono sincero. —No me agradezcas a mí—niego—Celeste hizo todo el trabajo. —¿Quieres ir la cama? —inquiere Damián. —¡No! Prefiero ir al sofá, para variar. —Mejor, ¿Por qué no vas a la sala de televisión? Ahí puedes entretenerte un rato. —Sí. Creo que veré unos capítulos de The Walking Dead. —¡Jesús! ¿De verdad vez esa atrocidad? —Damián parece indignado y ella abre la boca ofendida. —Me gustan, ¿Está bien? Sabes que, cada que me siento a ver una serie o película me recomiendan tu película. —Imagino que no la has

Junto a Abby, veo otra película de su elección. Mientras en la pantalla se está reproduciendo Once Upon a Time in Hollywood. No puedo dejar de pensar en las palabras de Damián y en lo bien que se siente el poder decirle lo que siento.Cuando se fue, hice lo que me dijo. Bueno, algo de eso, ya que no sabía que podía o no mover en sus cosas. Deje la mitad de mis cosas a la espera de que entre ambos podamos encontrarle sitio.—¿Has sabido algo de Zane? —escucho a Abby.Desvió la mirada de la pantalla hasta ella. Me mira expectante y algo triste.—La verdad. Es que lo último que supe de él, es que estaba rindiendo declaración. Pero eso ya lo sabes—asiente—Verás como todo saldrá bien.—Si—murmura antes de concentrarse de nuevo en la película. ¿Quién diría que Brad Pitt con cincuenta y ocho años podría verse tan bien?Ambas estamos embelesadas viendo al adonis, cuando la puerta de la sala de televisión se abre. Al ver quien es, una sonrisa se extiende en el rostro de Abby al observar a Dami

POV ABBY.En toda mi vida me he caracterizado por ser una mujer fuerte e independiente. A pesar de provenir de unos padres con medios y tener un hermano que es un famoso actor. No me importa ensuciarme las manos para lograr mis objetivos. Eso es lo que en realidad le da valor a lo que tenemos.La Abby profesional es determinada y tiene todo lo que se propone. En cambio, la Abby que nadie ve es una mujer con temores e inseguridades. Pero, sobre todo que ama de manera incondicional.Hace un tiempo me hice a la idea de que no era correspondida. Y, por intentar ser lo que todos querían que fuera. Le seguí el juego a mi padre. Y ahora, estoy herida por culpa del hombre que él consideraba el mejor partido para su hija.Sin embargo, esto también me ha traído consigo algo que no esperaba.Miro al frente esperando que Zane, el representante de mi hermano y también el hombre con el que tuve una relación me diga algo. Me remuevo en el sofá y me aclaro la garganta. Estoy en casa de mi hermano rec