Faith Mi cuerpo me falló, una vez más fui seducida por la tentación. Mis labios reclamaron los suyos, sintiendo esa necesidad de sentirlo, de probarlo. ¿Lo extrañaba? Si, estas noches no salió de mis sueños, recordando lo que era tenerlo a mi lado, a sus manos tocar mi cuerpo, tener sus besos por todo él, sentir el éxtasis y provocar el suyo. —Lo ves, Faith, por mucho que luches tu cuerpo me pertenece, sólo mira como me reclama y cómo quieres que te vuelva a follar —susurró acariciando mi trasero y bajando su boca a mi escote, el miedo a que alguien más nos viera se apoderó de mi. —Matt, aléjate, alguien podría vernos. —¿Y qué importa? Que todos sepan a quien le perteneces, quien es el que te folla todas las noches, a quien es que deseas...—Y a quién es que quiero —terminé por él sintiendo las lágrimas asomarse por mis ojos, él de inmediato se apartó mirándome sorprendido y quedándose como una estatua. —Faith...—Si, señor Senador, perdí en este juego y es por eso que decidí ret
Leer más