Jeremith había perdido las esperanzas de que Perla apareciera ese día, se despidió de su madre y los demás, luego subió a la habitación a descansar un poco, aunque su mente estaba revuelta con tantos sentimientos y deseos de ver a Perla. Dejó el celular sobre la cómoda, seguidamente se quitó la chaqueta y la dejó sobre el perchero, luego se sentó al borde de la cama y se inclinó para soltar las agujetas, de pronto el celular sonó, él levantó su rostro y miró hacia la cómoda con expectativa."Será Perla"Se levantó y caminó, rápidamente agarró el celular, obsevó la pantalla y vio que era un número internacional, aunque no sabía exactamente de dónde, pero estaba casi seguro que si se trataba de ella, le dio contestar.—¡Perla!—¡Jeremith!—Perla, estaba esperando que llamaras. —Se oyó un sollozo.—No había visto los noticiarios, por eso tardé en llamarte.—¿Dónde estás?—En Colombia… eras tú el que estaba en le jardín?—Si.—Oí tu voz, pero creí que era una jugada de mi imaginación, de
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