Adina abrió la puerta del coche y se subió al asiento del conductor.Justo cuando estaba a punto de encender el coche, se abrió la puerta del asiento del copiloto.Duke se agachó y entró en el coche. Él lucía tranquilo y relajado, como si estuviera en su propio coche.Adina le dirigió una sonrisa sarcástica. “¿Qué está haciendo, Señor Winters?”.“Mi coche se averió. Por favor, llévame de vuelta”, dijo Duke despreocupadamente mientras se recostaba en el asiento. “No será una pérdida de tu tiempo”.Adina apartó las manos del volante antes de decir tranquilamente: “Creo que los miembros de la familia Daugherty estarían dispuestos a llevarte de vuelta. ¿Debería llamar a Dew?”.“¿De verdad tienes miedo de quedarte a solas conmigo?”.Duke incorporó de repente su cuerpo y su frío rostro se acercó unos centímetros hacia Adina.Ellos podían sentir el aliento del otro, y por alguna razón, el aire entre ellos se volvió coqueto.El corazón de Adina se agitó de repente.Fingió mantener la

Ella había investigado la situación de los negocios en Ciudad del Mar, y podía decir que la Corporación Winters la dominaba.Si pudiera trabajar con la Corporación Winters, sería como abordar un barco seguro. Podría solo esperar a recibir el dinero.Pero, ¿por qué Duke la elegiría?¿Era solo porque el profesor de la Universidad de Harfard la había recomendado?Ella no había sido la única estudiante con talento para diseñar chips en la Universidad de Harfard. Solo había conseguido ser la tercera mejor.Mientras Adina contemplaba en silencio, finalmente llegó a la villa de la familia Winters.Estaba situada a medio camino de la montaña. La villa independiente de tres pisos no era muy grande, pero la piscina, el jardín y el parque infantil ocupaban al menos mil metros cuadrados.Esta era la verdadera mansión.“Señor Winters, tendré la colaboración en cuenta. Le daré mi respuesta en tres días”.Adina tenía una ligera sonrisa en el rostro al decirlo.Duke abrió la puerta, asintió

Adina se quedó mirando seriamente a Harold. “Eres un niño. No puedes llorar tan fácilmente”.Melody era una niña, y rara vez lloraba también.“No voy a llorar más, Tía Adina...”, dijo Harold sonándose la nariz. “Hace… hace mucho tiempo que no te veo. Te extrañé…”.Tan pronto dijo eso, su cara se sonrojó.La comisura de los labios de Duke se contrajo.¿Cuándo este mocoso había aprendido a decir palabras tan vergonzosas? ¿Por qué no era consciente de esto?Además, ¿qué clase de encanto tenía esta mujer para hacer que este chico travieso, Harold, pareciera tan lamentable y triste?Adina también se sintió avergonzada por ello.En realidad, le tenía cariño al niño, pero Harold era un hijo de la familia Winters. Si le mostraba demasiada preocupación, podrían sospechar que intentaba buscar conexiones con la familia Winters.Ella dejó a Harold en el suelo y dijo en voz baja: “Todavía tengo algo más que hacer, así que me iré. Adiós”.“¡No!”.Harold se aferró a los muslos de ella.Pa

Duke, en cambio, la miraba con desprecio.Ella era una dama, quien había vivido una vida mimada. ¿Sería capaz de cocinar?Incluso si adquiría algunas habilidades culinarias a lo largo de los años, era imposible que fuera mejor que el cocinero, al que la familia Winters había contratado y pagaba generosamente.A Adina no le importaba lo que pensaran los Winters.Así que se dispuso a seguir al Señor Brown a la cocina. Había diferentes tipos de ingredientes frescos y la cocina parecía como si fuera de un gran hotel.Ella miró a su alrededor antes de sacar dos tomates y un paquete de espaguetis. Pensaba hacer unos simples espaguetis con salsa de tomate.El Señor Brown se paró a un lado y le recordó: “Al Joven Amo no le gustan los espaguetis...”.Le estaba insinuando que cambiara el platillo.Sin embargo, Adina soltó una ligera risa. “Él se ha saltado muchas comidas. Debería comer algo ligero para que su estómago pueda digerirlo”.Después de hablar, encendió la estufa y vertió el a

El plato de espaguetis contenía tomates, que le daban a la salsa un color completamente diferente al del agua.Cuando la salsa salpicó el pecho de Adina, su camisa se empapó inmediatamente, y el contorno de su brasier se hizo visible.“¡Lo-Lo siento!”.Harold estaba aterrorizado.La Tía Adina finalmente vino a verlo, pero él hizo una cosa tan estúpida.“Te ayudaré a limpiar…”.Fue rápidamente a buscar unos pañuelos para limpiar el pecho de Adina.Duke frunció el ceño de repente.No le gustaba que Harold tocara a la mujer en esa área.Él se puso de pie con indiferencia y dijo: “Señorita Daugherty, debería ir a cambiarse”.Adina utilizó los pañuelos para cubrirse el pecho.Podía sentir que su camisa y su sostén se habían mojado.Ella definitivamente no podía salir de casa con su ropa luciendo así.Frunció los labios y dijo: “Me gustaría ducharme y secar mi camisa. Me pregunto si es conveniente para usted, Señor Winters”.“¡Sí, por supuesto!”.Harold asintió inmediatamente

Era el sonido del agua que salía de la ducha. Duke estaba sentado afuera y de repente sintió sed. Miró ligeramente hacia el lado y pudo ver su figura borrosa detrás de la puerta de cristal del baño. Después de que Adina terminara de ocuparse de la salsa en su pecho, empezó a lavar su camisa. Tiró la camiseta de Duke a un lado, ya que no pensaba ponérsela. Sin embargo, después de lavar su camisa, se dio cuenta de que no había secador de cabello en el baño. Podía salir a buscarlo ella misma o pedirle al hombre de afuera que le entregara un secador, pero no podía salir desnuda. Así que no le quedó de otra que ponerse la camisa.La camisa blanca era tan grande que le llegaba a las rodillas y le cubría todo el cuerpo. Adina abrió la puerta del baño y salió solo después de mirarse al espejo y asegurarse de que se veía presentable. El vapor de agua del baño flotó en el aire al instante, y su cuerpo parecía estar rodeado por una fina capa de niebla. Parecía que incluso su

Adina levantó su muñeca y miró la hora. Ya eran las cuatro de la tarde, y la clase en el preescolar iba a terminar pronto. Inconscientemente, había estado mucho tiempo con la familia Winters. Inicialmente, tenía intención de ir a su estudio a echar un vistazo, pero era tarde. Por lo tanto, fue directamente al preescolar a recoger a sus hijos.Adina condujo hasta allí y, después de esperar un rato en la entrada, vio a sus hijos salir tomados de la mano. Sus hijos estaban rodeados por un gran grupo de niños. “Alden, estuviste increíble hoy. ¡Definitivamente eres el niño más inteligente de nuestro preescolar!”. “Alden, eres muy guapo. Yo también quiero ser tu amiga. ¿Puedes sentarte conmigo mañana?”. “Quiero sentarme con mi hermana”, respondió Alden con indiferencia. “Si quieres ser amiga de mi hermana, yo también seré tu amigo”. “Melody es muy bonita. Si juego con ella, ¡me convertiré en una hermosa princesa como ella!”. “¡Yo también quiero ser amiga de Melody!”. Por l

Alden frunció el ceño. “Mami, vayamos a ese restaurante y veamos quiénes son desde allí”.Dadas las circunstancias, eso era todo lo que podían hacer por ahora. Adina giró el volante y, justo cuando estaba a punto de estacionarse frente al restaurante, escuchó de repente un fuerte golpe detrás de su coche. Cuando miró hacia atrás por el espejo retrovisor, se dio cuenta de que la camioneta había sido chocada por un sedán. La camioneta tenía una gran hendidura y prácticamente ya estaba inservible. El conductor de la camioneta tenía la culpa, por lo que no se atrevió a bajarse para pedir una compensación. Se alejó rápidamente con su camioneta chocada. La puerta del sedán se abrió y salió un hombre con un traje gris ceniza. El hombre era alguien que haría gritar a las damas en cuanto apareciera. Sus ojos eran marrones y parecían deslumbrantes bajo la luz del atardecer. Al mirarlos más de cerca, no eran más que un par de ojos encantadores estándar. El hombre sonrió ligeramen

Adina llevó las compras y entró en la villa mientras decía: “Esta es la casa de mi abuela”.“Tu abuela es muy buena contigo”. Flint chasqueó la lengua. “Pero igualmente, la casa es de tu abuela. No está a tu nombre. Tal vez puedas casarte conmigo. Te daré una villa con vista al mar, y solo estará a tu nombre”. Adina le dio una patada. “¡Flint Morton, si sigues diciendo tonterías, puedes irte!”. “¡Eh, Addy, ten cuidado! ¡Duele!”. Flint cargó a Melody mientras fingía esconderse. “Lo siento. No volveré a bromear contigo”. Corrió hacia la sala de estar y se sentó en el suelo para hacerle compañía a Melody mientras jugaba con sus bloques. Alden miró a su hermana antes de encender habitualmente su computadora portátil y entrar en su cuenta personal. De repente, frunció el ceño y su cálida mirada se llenó de cierta frialdad. Alguien en realidad estaba descifrando el vídeo de vigilancia que había encriptado. La mitad de las ciento ocho contraseñas ya habían sido descifradas. A

Duke frunció los labios. Se acercó y levantó a George por la parte trasera del cuello. “¡Papá, suéltame!”. George se resistió. “Te juro que esta es mi última vez siendo un jáquer…”. Duke lo echó a un lado y se sentó frente a la computadora portátil. George pensó que su padre apagaría la computadora, pero vio que Duke ponía los dedos en el teclado para escribir. Los extraños solo conocían a Duke como un genio de los negocios. Sin embargo, solo George sabía que su padre era un auténtico experto en la piratería. Cuando tenía tres años, había visto por accidente a su padre luchar contra un jáquer extranjero utilizando la computadora, haciendo que descubriera su talento en el mismo campo. El problema se resolvió finalmente con la ayuda de su padre. Media hora después… “¡M*erda! ¿El oponente es un demonio o qué?”. Flint lanzó un puñetazo a la computadora. “¡Me mataron!”. Alden frunció los labios y dijo en voz baja: “Nuestro oponente cambió. La persona que vino después e