Lara sentía que su cuerpo estaba en llamas, se estaba quemando de adentro hacia afuera y no podía hacer otra cosa que gemir ante la incómoda sensación que se ubicaba, sobre todo, detrás de su hombro derecho. Allí era insoportable. Algo húmedo y frío pasaba por su rostro y cuello dándole un poco de alivio, pero no era suficiente, necesitaría un baño de hielo para poder relajarse.Con mucho esfuerzo abrió sus ojos que pesaban una tonelada. Había luces alrededor de ella, siluetas moviéndose, pero no podía definir nada, así como pensar. Estaba en una densa nebulosa de agotamiento.-…ra, Luna… ra, Luna Lara- por fin un sonido familiar llegó a sus oídos y lo buscó encontrándose con las fracciones de su loba de confianza.-Dy… na- su voz se oyó horrible y hablar solo intensificó la quemazón de su cuerpo.-Mi luna – la loba sonrió posando el paño húmedo sobre su frente después de enjuagarlo- Nos tenía muy preocupados--¿Despertó?- la voz de Byron retumbó desde la puerta para después detenerse
Leer más