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Todos los capítulos de LOS HIJOS OCULTOS DEL CEO: Capítulo 51 - Capítulo 60
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Cap. 44:  TRICUMPLEAÑOS – PARTE II
Cap. 44: TRICUMPLEAÑOS – PARTE IIIsabel, llamó a Brizna y le preguntó, después de saludarla:—Amiga, ¿es cierto que te invitaron a los cumpleaños de los trillizos mañana?—¡Ah, sí! ¡Por qué? ¿A ti, también te invitaron?—Creo que los niños hicieron algo que los obligó a llamarme para que les lleve a la niña, y la verdad es que la niña también ha llorado mucho por ellos hoy, es que ese lazo que a ellos los une es muy poderoso.—¡Pues tráela! Ellos son sólo niños, ¡ni de coña les niegues que estén juntos este día! Finalmente ellos no son responsables de los pecados de los adultos, así que no tienen porque cargar con la penitencia. ¿Y Ricardo? ¿Vendrá?—Ricardo está gestionando cosas más importantes que sus hijos.—Isabel, aún hay cosas que no sabes… Dale, por lo menos, el beneficio de la duda. A veces se lo merece. Y te juro que estoy, cien por ciento, de parte tuya, pero en este momento tengo motivos, amiga mía.Brizna sólo sabía que no se podían regresar a Madrid aún, desconoc
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Cap. 45:  TRICUMPLEAÑOS – PARTE III
Cap. 45: TRICUMPLEAÑOS – PARTE IIILos invitados comienzan a llegar, los animadores y todo el personal contratado por Mara, están haciendo su trabajo de manera rigurosa, ella misma los supervisa y dirige, ya que Sofía aún esta arreglándose y Mara no confía en ella para eso.Don Marcos recibe a los invitados. Mara lo ve acercarse a Sofía y camina hasta allá. En cuanto la ven se quedan callados.—¿Qué tanto cuchichean ustedes dos? —les dice y está algo enojada.—¿Qué pasa Mara? ¿Acaso no puedo conversar a solas con mi futura yerna?—Pues no deberías, yo sé por qué lo digo… —Caminó a la puerta, ya que sus amigos de siempre, los Arruti, estaban llegando.—Bienvenidos, Adelante —les dijo abrazándoles. Brizna buscó entre los presentes, con mirada azorada.—No ha llegado Isabel, ¿es a ella a quién buscas? —Brizna se sintió apenada y Mara le obsequió una sonrisa cómplice.—Si quieres jugar, hay máquinas en el anexo que está decorado. Sé que eso te gusta.—Está bien, gracias —se fue allí y
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Cap. 46:  DESHONRA
Cap. 46: DESHONRAIsabel, al terminar de subir las escaleras, vio salir a Eneida del despacho de su padre. Esta, al pasar a su lado le masculló con desprecio:—Desvergonzada, aún no aceptas que nadie te quiere en esta casa.Isabel la miró con el mentón levantado y le soltó:— Claro que si, Ricardo me ama…A Eneida le hirvió la sangre —: ¡Maldita zorra!Isabel continúo riendo en la garganta y terminó de subir.Al entrar al despacho de Marcos Del Hoyo…—Buenas tardes, Don Marcos —le saludó—Entre usted y yo no cabe ni un saludo —le espetó Marcos—. Usted enlodó y deshonró el apellido Del Hoyo, por eso usted no se merece ser recibida en esta casa. Así que márchese ahora mismo.Isabel frunce el ceño y siente la mayor de las impotencias al ser tratada de esa forma. Mira fijamente a don Marcos.—¿Y usted cree que estoy aquí a gusto?—Sus palabras no me importan. —Eso ya lo sé, pero quiero dejarle en claro que fue Mara quien me pidió que estuviera aquí.—Yo estaba con ella cuando le ll
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Cap. 47:  SIEMPRE TARDE
Cap. 47: SIEMPRE TARDEEneida corrió a decirle a don Marcos, y salió al salón con él del brazo.—¿Quién te crees para entrar así a mi casa? —le atajó don Marcos molesto. —Don Marcos, devuélvame a mi hija —Isabel estaba ardida.—¡Ah! —le espetó con desprecio—. Tú tienes que probar que no eres una mujerzuela y entonces yo te devuelvo a tus tres hijos.—Don Marcos mis hijos no tienen nada que ver con lo que pasó aquella noche en esta casa.Eneida apretó el brazo de su padre.—Papá contente, no puedes agarrar estas rabietas, esa mujer lo que quiere es eso, causar tu muerte.—¡Bah! Esa es una basura cualquiera —Dijo Marcos y Eneida lo repitió.—¿Escuchaste? ¡BASURA! —Entonces se oyó—¡PAFF! La bofetada certera de Isabel en el bien maquillado rostro de Eneida.Don Marcos la fue a agarrar, pero Isabel se fue corriendo a las escaleras, pero había guardias arriba, en las escaleras, con la única intención de evitar que ella subiera a donde estaban los niños. Los guardias se le atravesaron imp
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Cap. 48: ¿HERMANA? – PARTE I
Cap. 48: ¿HERMANA? – PARTE IHoras previas al festejo del Tricumpleaños…Eneida iba al garaje y vio a Marcos, desayunando solo en el jardín, se acercó y le preguntó:—¿Por qué desayunas solo? ¿Mara sigue molesta contigo?Don Marcos le contó lo acontecido esa mañana.« Si Mara sigue presionando a Marcos, este va a devolver a los niños, y si Ricardo queda sólo, Sofía se meterá en su cama y eso no me conviene »—Quédate con la niña. Todos los trillizos se sienten incompletos si no están juntos durante su primera infancia. Tú, con una llamada, tienes la custodia en un tris.Como si decía cualquier chiste, se rio y subió a su auto.Don Marcos quedó calentando la idea. Luego, cuando iba al jardín, Sofía venía con los niños después de las compras. Don Marcos conversó con ellos sobre los regalos y luego que los niños siguieron a la habitación, él preguntó a Sofía:—¿Cómo te está yendo con los niños? Veo que te llevas bien con ellos ¿te hacen caso?—Ah, sí, pero hoy están tristes, su herma
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Cap. 49:  HERMANA – PARTE II
Cap. 49: HERMANA – PARTE IIRicardo sintió que su corazón dio un vuelco al oír la voz de su madre en el umbral de la puerta. Sabía que tenía que actuar con cautela, porque sus padres tampoco podían tener impresiones fuertes. Se quedó de espalda bajando la cabeza y poniéndose sus dos manos en ella.—Mara, es algo entre Ricardo y yo —dijo don Marcos.—Ah, ¿no me piensan decir que está pasando? — Mara se dirigió a Guzmán.—Por favor, muchacho, ve y trae a la niñera, que Ricardo quiere decirle algo.—Mamá ve a dormir, luego hablaré contigo.Mara caminó hasta donde estaba Ricardo y le quitó las manos de la cabeza, al ver la venda se ofuscó:—¿Ricardo, hijo que te pasó? ¿Por qué estás así?—No me ha dejado llamar al médico —dijo Marcos.—Mamá, este hombre te dijo que le iba quitar la niña a Isabel cuando viniera hoy al cumpleaños de los trillizos.—¿Qué dices? —Preguntó Mara y se volvió a Marcos y le habló molesta —: ¿Qué fue lo que hiciste? ¿Hasta cuándo te metes en la vida de Isabel
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Cap. 50:  HERMANA – PARTE III
Cap. 50: HERMANA – PARTE IIIRicardo quedó con un sabor amargo en sus labios, cuando Ricardito salió de la clínica, descendieron dos lágrimas lastimeras. Ahora tenía que enfrentar su realidad, y esa era sólo una, Eneida.***Guzmán llegó a donde Brizna y ambas mujeres corrieron afuera. Isabel corrió a tomar a sus hijos en sus brazos, ya estaba más tranquila y ella siempre sonreía para sus hijos.—Mami, papi llegó de su viaje —le dijo Ricardito, Isabel volvió sus ojos a Guzmán y este asintió.—Señora Isabel, el jefe le manda a los niños para que estén con usted hasta que el los vaya a buscar, y será como dentro de un mes, porque… —Guzmán se quedó callado un instante y luego continuó—. Perdón, mañana temprano yo mismo la llevaré al puerto con los niños, mi jefe irá luego por Ricardito y Marcus. Doña Mara le llamará para explicarle, pero el jefe le manda a decir que Maiara no se quedará en la casa de los Del Hoyo.Brizna, que estaba aún echando chispas, tomó a Isabel del brazo y le dij
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Cap. 51: SORPRENDIDOS
Cap. 51: SORPRENDIDOSMara se quedó helada en la puerta de la habitación de su hija. Desde allí pudo oír claramente lo que Ricardo le decía a su hermana.—¡HABLA! Son muchas las vainas que me tienes que explicar, ¡hermana! —Eneida estaba temblorosa, trató de zafarse, pero Ricardo no la dejó—. Le metiste en la cabeza a mi padre que le quitara la niña a Isabel. Tú fuiste quien lo hizo.—¡Suéltame! —exclamó Eneida. Ricardo la empujó soltándola y jalando el diván se sentó frente a ella, aún seguía la habitación en penumbras—. No sé de dónde carrizo sacaste esas vainas, yo no sé de qué me hablas.—Lo sabes muy bien. ¿Sabes dónde estaba? ¿Sabes quién me partió la cabeza a traición y luego casi me mata de un disparo en la cabeza?Eneida tartamudeaba.—Se…, se…, seguramente en un riña de bar donde te lo pasas metido.—Yo estaba en Francia y no en un bar precisamente… Fue tu amiguito francés. ¿Lo recuerdas? Lo hizo para que le devolviera su teléfono, porque lo tengo yo…Eneida cayó senta
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Cap. 52: DECISIONES
Cap. 52: DECISIONES Isabel quedó preocupada después de enterarse que Ricardo y Mara estaban lastimados en el hospital. —Guzmán, sé que no debes decirme nada, incluso ahora mismo entiendo a Ricardito que se debate entre una promesa y su deber como hijo conmigo, pero sólo quiero saber cómo esta Ricardo realmente y si puedes lo llames para saber de doña Mara, ella es alguien bien significativo para mí.—Está bien, señora Isabel.Guzmán bajó a llamar a Ricardo, pero este no le contestó. Guzmán entró de nuevo.—Señora Isabel me deja que cargue la pila aquí…—Claro Guzmán, ven aquí.La niñera llamó a los niños para el aseo diario y prepararlos para el agasajo, cuando se bañaban, el teléfono de Ricardito estaba repicando en el estudio, Isabel entró y al ver la llamada entrante era de Ricardo. La aceptó y lo puso en su oído, pero no se percató que era video llamada. Oyó a Ricardo decirle:—También amo tu oreja, tu mejilla… —le oyó reír. Al Isabel ver la pantalla, ya había colgado —ocultó s
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Cap. 53: PROYECTO
Cap. 53: PROYECTODespués de 15 días, Mara se recupera positivamente en la clínica, la estaban pasando a una habitación.Eneida esta con su mamá en la habitación, don Marcos esta medio dormido en el diván que le han colocado al lado de Mara.—Mamá, estás como incómoda, déjame arreglarte las almohadas.Mara se revolvió cuando ella la tocó y le rezongó como pudo.—¡Hum, hum!—Mamá ¿qué tienes?Marcos se despertó con el chillido de Eneida, Mara cuando la sacudió para quitársela de encima, le dio una bofetada con el dorso de la mano.—Mara, ¿qué te pasa? ¿Qué comportamiento es ese con tu hija?Mara se volvió a verla, sus labios estaban tensos y apenas si los podía mover.—¡Ve…, te! —Le soltó enojada.Ricardo ha dejado los moretones y la hinchazón y la herida ha cerrado, aunque todavía no ha cicatrizado del todo. Él estaba llegando a la habitación. Mara desmesuró sus ojos. Ricardo se acercó y la abrazó.—Mamá, quédate tranquila —se volvió a Eneida y le dijo con desdén —. ¡Sal!—Papá —c
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