GeorgeEl grito salió desde lo más profundo de mi alma, el dolor quemó cada parte de mí, otro grito y cuando abrí mis ojos, estaba a oscuras, la luz a mi lado se encendió, estaba jadeando, está temblando, tenía dolor en todo mi cuerpo.— ¿George? —era mi padre. —Dios mío, estás tiritando, estás hirviendo y sudando—intenté tomar aire pero me fue imposible. — ¡Victoria! —gritó mi padre, las arcadas aparecieron haciendo que solo hiciera un movimiento para hacerlo a lado de la cama encontrándome con el bote, lo atrapé y empecé a vomitar.— ¿Qué es lo que pasa? —debió de mirarme vomitando hasta mi alma—Dios mío, ¿George? ¿Qué tienes? Llamemos a un doctor—pidió cuando se quedó a mi lado, —intenta no hacer tanto esfuerzo, amor. —Pasó mi mano por mi espalda y la retiró—Estás hirviendo, ¿Tienes dolor? —terminé de vomitar minutos después, tomó el bote al ver que se había calmado, el dolor se intensificó, necesitaba mi morfina. —George, ¿Tienes dolor? —asentí recostándome de nuevo y empecé a llo
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