Inicio / Romántica / Doctora del Sr. Mafioso / Capítulo 31 - Capítulo 40
Todos los capítulos de Doctora del Sr. Mafioso: Capítulo 31 - Capítulo 40
41 chapters
Capítulo 31
Después de la pequeña e insignificante discusión que tuvieron Valeria y Balduin, este le prometió que hará que paguen con su vida esas dos personas que le intentaron hacer daño, no solo a ella, sino que a sus hijos también.El mafioso le ofreció mucho dinero adicional a la administración de la clínica para que le permitieran dejar por unos días más a su esposa y estuvieran al pendiente de su salud, él quiere llevarla completamente recuperada a su país. Quince días más estuvieron en la clínica y luego decidió emprender el viaje nuevamente a su tierra, pero esta vez no correría con tanta suerte, ya que en uno de los puntos de la ciudad cuando se trasladaban en vehículo hasta la pista clandestina en donde tenían la avioneta esperándoles, las autoridades cubanas les dieron persecución sin que ellos se enteraran.Al detenerse en un semáforo de la carretera, el auto policial se les atravesó delante de ellos con las sirenas encendidas, los hombres del mafioso se confiaron, pues pensaron que
Leer más
Capítulo 32
Ya hace una semana que capturaron a Balduin, pero todavía está en su país porque aún no se ha llevado a cabo la audiencia de presentación de pruebas. Valeria no ha tenido la oportunidad de ir a visitarle porque él le pidió que no diera a conocer que es su mujer, bueno además no la dejarían ingresar porque con el único que tiene comunicación es con su abogado y con su hombre de confianza.A él lo tienen guardando prisión en el cuartel general de las fuerzas especiales, por ser un hombre de alto poder y peligro tuvieron que ingresarlo allí para mantenerlo bajo vigilancia las veinticuatro horas del día, también hay efectivos de las fuerzas armadas de los Estados Unidos, custodiando el perímetro, porque como ya saben que las autoridades de este país son “vendidas” y los gringos no se confían de nadie, entonces mandan a sus propios elementos a montar guardia.Por el momento Valeria está en la casa de su familia, no se quiso ir para la mansión porque como allá aquellas mujeres no la quieren
Leer más
Capítulo 33
— Bueno muchachos, como todos ya saben que mi hijo ya no les puede dar órdenes porque ya no está aquí y es probable que ya no vuelva, entonces a partir de su detención yo vuelvo a ser su capo, hasta que elijamos a uno nuevo en el futuro. — Dijo el padre de Balduin, mientras sostiene una reunión con todos los socios del Clan del Norte.— Está bien señor. — Respondieron todos a una sola voz, sin embargo, ellos ya están instruidos por Martín, para que le hagan creer al señor Carmelo, que ellos le apoyan.— Señora, no se quite su cinturón de seguridad por favor. — Le ordenó su chofer al ver que ella quiere ir solvente sin el cinturón.— Ash, que no ves que se me hace incomodo llevarlo puesto, por mi barrigota. — Esto solo es un estorbo.— Pero ese estorbo le puede salvar la vida en caso de que suceda un accidente de tránsito. — Le advirtió el hombre, entonces la doctora se lo volvió a colocar y abrió la ventanilla para que le entre aire natural porque siente que el acondicionado que va ad
Leer más
Capítulo 34
— ¿Ya habéis notado quién es la persona que quiso envenenar a nuestra Valeria?¿No? ¡Pues verán, ahora mismo se los contaré! El señor Carmelo, no quiere que su nieto nazca con vida (bueno, él no sabe que su hijo Balduin, apuntó y metió tres goles de un solo tiro a la portería) y como en aquella ocasión en la clínica cubana, no pudo lograr su objetivo, y tampoco se le ha podido volver a acercar a ella porque pasa permanentemente bajo el resguardo de los hombres de su marido.¡Sí! Como te lo cuento, el señor Carmelo es el culpable de aquel atentado que recibió Valeria, cuando estuvo internada en una clínica en la hermana nación cubana. Pero ¿quién será la otra persona que lo acompañaba?El señor Carmelo, citó a su nuera para hablar, esta le dijo que lo esperaría en un determinado restaurante, de inmediato se movilizó hasta ese lugar el señor Carmelo, y amenazó a todo el personal del restaurante porque ninguno aceptaba llevar a cabo lo que él les estaba pidiendo, al final hubo uno que sí
Leer más
Capítulo 35
Han pasado dos meses después de que la doctora Valeria, dio a luz. A sus bebés cada día los llevan a la clínica para que ella los amamante por dos veces y luego vuelven a casa en donde son alimentados con biberón por sus niñeras.En la cárcel del extranjero, el juicio de Balduin está programado para dentro de cinco meses, allí se definirá cuantos años estará en la prisión, lo que se rumora en su país es que tendrá que pasar toda su vida allá pero aún no se sabe a ciencia cierta, hasta que el juez le dicte la sentencia condenatoria.— ¿Saben quién es la que acompaña al Señor Carmelo a hacer sus maldades en contra de Valeria?Claro que sí es ella, la joven Teodora, es la mujer malvada que ha hecho hasta lo imposible para dañar a Valeria. Ella lo hace porque quiere alejarla de su primo Balduin, puesto que ella desde hace mucho tiempo está enamorada de él, pero éste nunca la ha visto como mujer, solo la ve como lo que es, su prima.Por eso es que ella siempre la ponía en mal delante de Ba
Leer más
Capítulo 36
Narra Balduin...— Estoy aquí encerrado en esta maldita prisión, alejado de todo y de todos. Pero lo que más me duele es que no estoy para cuidar de mis hijos, Valeria me lo advirtió, pero yo por miedo a que a ella le hicieran daño, me fui para Cuba, y prácticamente solo a que me capturaran llegué.Me pregunto ¿quién será el infeliz que me vendió? Porque es obvio, que fue así como dieron con mi paradero, pero juro que si un día salgo de aquí los haré pagar muy caro su traición.Cuando mi abogado me dijo que mi esposa ya había dado a luz, me emocioné demasiado, jamás se me cruzó por la mente que un día formaría una familia. Pero luego él me dijo de qué forma lo había hecho y entonces yo me enfurecí, no entiendo porque quieren hacerle daño a ella si yo ya no estoy en el país y por lo tanto ya no les represento un peligro o competencia a mis rivales.A los días volvió a venir el abogado y me comentó que ahora ella está en coma, yo me siento como la mismísima mierd4 del infierno porque yo
Leer más
Capítulo 37
— ¡Señores, les tenemos excelentes noticias! — dijo una de las enfermeras de la clínica en la cual están atendiendo a la doctora Valeria.— Díganos, señorita. — Respondió Vitorino.— La paciente ha respondido con positividad a la desfibrilación, ella nos ha comentado que se siente muy bien, por lo que en unas horas el médico determinará si le dan el alta para el día de mañana en horas de la tarde.— ¿De verdad ella se siente mejor? — Preguntó su hermano muy emocionado, pero a la vez incrédulo porque anteriormente le dijeron que ella estaba bien y de repente le dieron otro diagnóstico negativo.— Claro que sí, y si desea comprobar por sí mismo puede pasar a verla en este momento. — Dijo la enfermera, con una sonrisa.Ni corto ni perezoso, Vitorino se encaminó hasta la sala en donde está su querida hermanita del alma y allí la encontró, ella sentada en la camilla como si lo estuviese esperando.— Te extrañé mucho hermanita, te juro que pensé que te perdería. ¡Eres una tonta por asustarn
Leer más
Capítulo 38
En casa de la doctora Valeria todo está muy tranquilo, hasta que uno de los bebés se despertó y comenzó con su habitual lloriqueo para que le den su pechito. Con los movimientos del niño, Valeria se despertó y cuando vio solo a dos de sus tres hijos se asustó mucho y pronto salió en busca de las niñeras, iba gritando como loca por aquel largo pasillo, e hiso que los escoltas se alarmaran.En cuestión de segundos todos estaban frente a ella, pero nadie está cargando a su hijo. — ¿Dónde está mi niño? ¿Quién de ustedes lo tiene? — Pregunta entre gritos y sollozos, y se desespera aún más cuando mira que todos se voltean a ver entre sí como preguntándose quién de ellos lo tiene. — Hace un rato yo entré a su habitación Señora, y los tres niños estaban junto a usted y creo que nadie más ha vuelto a entrar. — ¡No, no puede ser! busquen a mi hijo ¡Ahora mismo! — Les ordenó la doctora, sintiendo la adrenalina en sus venas, todos salieron en busca del bebé, las niñeras lo buscaron en cada rinc
Leer más
Capítulo 39
Dos años más tarde…— Señora Valeria, ya que hoy es su cumpleaños número 27 nosotros le hemos preparado una sorpresa y queremos que usted asista sin poner pretextos. — Dijo uno de los escoltas.— No muchachos, lo lamento mucho pero ustedes saben que yo no tengo ánimos para celebrar. — Le respondió Valeria.— Ándele Señora, no nos deje mal parados, mire que hemos sacrificado parte de nuestro sueldo para hacerle esa sorpresa a usted, si no la acepta pensaremos que es una presumida y que el poder la ha hecho cambiar.— No digan eso, yo sigo siendo la misma de siempre. — Está bien vamos todos a festejar. — Dijo finalmente, la doctora.— A las seis de la tarde nos vamos.Valeria se acostó a dormir un rato y cuando ya solo faltaba media hora se levantó porque la niñera estaba tocando la puerta para entrar a vestir a los pequeños traviesos e inquietos diablillos (así les llama el joven Gonzalo).A las seis y veinte minutos de la tarde ya todos sus guardaespaldas estaban esperando por ella, h
Leer más
Capítulo 40
Al día siguiente…Valeria amaneció entre los brazos de su amado, ella aun no lo puede creer que él ya esté aquí con ellos. Con mucho cuidado para no despertarlo, se levantó y sacó un pantalón y una blusa de la maleta que ha traído, se colocó su ropa interior limpia y salió en busca de sus hijos para que cuando su marido se despierte, se encuentre rodeado de sus pequeños diablillos.— ¿Qué pasa mami, a dónde nos llevas? —Preguntó el pequeño Jafet, todo somnoliento.— Vamos a conocer a papá mi amor. —Le respondió ella con mucha emoción.— ¿A papá? Preguntó la pequeña Gaby.Ellos conocen a su padre pero solo mediante fotografías, ya sea en la televisión o en los periódicos. Son unos niños de dos años de edad, por eso Valeria teme que no se sientan tranquilos con su papá.La niñera se quedó en la habitación y Valeria se llevó a los niños, abrió la puerta y su esposo aún está dormido. Ella colocó a sus hijos en el suelo al lado del camarote y los niños traviesos hicieron de las suyas.Siem
Leer más