Sus palabras me caen como una bofetada haciendo que retroceda por inercia, los ojos me pican, siento las lágrimas nublando mi visión. No soy tan fuerte para soportar esto, no importa cuanto me repita que no soy la culpable sus palabras me siguen lastimando, haciendome dudar y regresar al agujero negro donde me encontraba cuando llegué a River Hills.—Eso… eso no es cierto— Mi voz tiembla, las lágrimas caen en cascada por mi rostro y puedo sentir mis manos cerrarse con fuerza— Yo no quería que nada de eso pasara, estaba asustada, Austin... él… él me iba.. ¡me estaban lastimando! ¿es que acaso eso no te importa? Al escucharme, su cabeza deja de negar y sus ojos se posan con determinación sobre los míos. Sólo ahora puedo notar que ella también está llorando, sus ojos están rojos e irritados y cuando habla su voz sale tan fría como se ve por fuera.—Tu te lo buscaste al aceptar irte con él, pero en lugar de enfrentar las consecuencias arrastraste a tu hermano a tu desastre ¿cómo acabó es
Leer más