Ares termino el beso y miro a Penelope, no sabía que pensar de ella, pero se estaba arriesgando mucho...—Es un regalo muy bonito, gracias... — Penelope sonrió al ver las pulseras en su respectiva muñeca, estaba feliz de estar aquí con él, lo quería de verdad, ahora que iba a estar lejos de la comisaria, de la unidad, de Carlo, de Tae... Todo sería más fácil con Ares, ella estaría protegida por si Rock decidía hablar, Ares estaría a salvo si Carlo ya no obtenía información de su parte y le impedía conseguir más, sabía que Carlo quería destruir a Marcos, pero eso significaba que hundiría también a Ares y no podia permitirlo ahora que había dejado dejar todo esto a un lado, iba a ayudarlo.— Creo que sería conveniente que conocieras a mis socios, tengo un local a las afueras, tranquilo, se puede arreglar y podemos hacer una fiesta, una cena, si quieres podrás organizarla tu. — Ares la abrazo y beso su frente, Penelope se sorprendió al escuchar que quería presentarle a sus socios, el de

Penelope había quedado con su hermano en la cafeteria donde siempre iban juntos, está ya estaba sentada en la mesa esperándolo, el frio comenzaba a ser fuerte, así que pidió un cafe largo bien caliente, Carlo llego a los pocos minutos viendo a su hermana sentada en la terraza esperándolo, estaba nervioso... Salio a la terraza y se sentó frente a ella, esta lo observaba sin ninguna expresión, este puso sobre la mesa una carpeta bastante gruesa, Penelope le dedicó una corta mirada, conocía a su hermano sabía lo que iba a intentar hacer, esta se cruzó de brazos reacia, Carlo comenzó a hablar. — Se lo que hice, pero tenía mis motivos, he cometido un error, pero son demasiadas cosas para llevar adelante y la presión de Marcos estaba ahi. — Se suponía que yo me metí en esto contigo por eso, para ayudarte y no te comiera la presión, pero no me dejaste hacer nada, te dije que mis sentimientos estaban a raya podia haberlo hecho de otra manera, esto podría haber tomado otro camino, pero tú no

Penelope volvió a la que ahora era su casa, había cambiado las clases por la tarde ais sería más fácil que Tae ya no fuera su compañero y así fingir que no lo vería más, las mañanas podría estar en la mansion incluso buscar un trabajo mientras, Ares no estaría en las mañanas o eso pensaba ella, cerca del mediodía Ares estaba en casa parecía más relajado, entro rápidamente en la casa encontrándose a Penelope estudiando cosas de la universidad, este sonrió ante el hecho de que parecían una pareja normal sin problemas ni peligro, esta se percató de que estaba ahi y sonrió, se acercó a ella y la beso sin interrumpir mucho su estudio se sentó en el sofa frente a ella quitándose su chaqueta y poniéndose comodo.—¿Como te va? —Pregunto Ares sonriéndole. — Bien estudiando un poco antes de clases, no te esperaba aquí tan pronto. — Dijo con la misma felicidad. — Bueno antes no tenía nada bonito, sexy y especial esperándome en casa así que trabajo más eficiente para poder volver cuanto antes. —

Carlo se había levantado temprano ya que casi no había dormido nada, había sido una semana muy dura, había dado luz verde para entrar a ese lugar, seguía pensando quien podia haber conseguido su número para mandarle aquella información, su hermana podría estar allí también y podría desatarse un caos porque Tae y Tommy la reconocerían y podían pasar muchas cosas, quizá su hermana tenía razón y el poder había comido su cerebro pero había conseguido en pocos meses muchos logros y eso lo había llevado a tener a Marcos al borde del precipicio, había elegido también así que era el momento de actuar, no sabía la hora de la reunion, no sabía si esa persona le mandaría la hora de la reunion o ya no diría nada, había intentado rastrear la llamada pero había sido imposible, sospechaba de Cat, aunque Penelope había dicho que ese hombre la había amenazado cara a cara y había sacado fotos, era el informante de Marcos así que debía quitárselo de en medio el primero para dejar a Marcos sin información

Penelope y Ares habían llegado al lugar donde se llevaría a cabo la celebración, Penelope se puso nerviosa al ver a traves de la puerta abierta a todos los socios de Ares, aunque conocía a varios de ellos, no dejaban de ser mafiosos allí reunidos, ella estaba totalmente indefensa en ese momento, a lo lejos vio a Rock apoyado en la pared más lejana, mirándola con una sonrisa tenebrosa, esto hizo que tragara saliva y apretara su bolso más fuerte.¿Y si alguien más sabía quién era?Ares le acaricio los brazos, intentando relajarla, sabía que esto era un paso importante para los dos y cada uno estaba nervioso por una razon diferente, aunque no fuera así, le dio la mano a Penelope y la pareto un poco para darle seguridad, entraron al bar y avanzaron lentamente hasta llegar frente a los invitados, parecía gente muy rica y bien portada, todos iban elegantemente vestidos, bebían de las copas de vino sonriendo y mirándolos ahora, esto hizo que Penelope se hiciera pequeña, poco a poco la gente

Luca acelero al ver el estado de Penelope, llego a la casa rápidamente y aparco en la puerta, se bajó rápidamente del lado del conductor y fue a abrir la puerta, la abrió y examino a Penelope por si estaba herida pero no vio nada, aunque las salpicaduras estuvieran por todo el vestido.— ¿Señorita se encuentra bien, le duele algo? — Penelope miro a Luca sin saber que hacer o decir, solo quería estar lejos de todo y todos, solo quería saber cómo estaba Tae, saber de su hermano... Todo había sido su culpa, Luca la saco del coche como pudo y la ayudo a avanzar hasta dentro de la casa y la sentó en el sofa, avanzo rápidamente hasta la cocina y le sirvió un poco de agua, está la bebió despacio intentando calmarse.—¿Los demás también han salido de allí? — Luca que miraba el teléfono sin parar esperando indicaciones. — No lo sé, se quedaron defendían el bar así que seguirán allí, aunque hayan acabado con ellos, no se preocupe señorita, estamos acostumbrados a lidiar con la policía así que n

Ares, Arsen, Ben y Cat no entendían como podia haber llegado Penelope aquí sin Luca ¿Como podría ella saber la dirección de este sitio? Luca se lo habría dicho... Pero llevaba un arma con ella y era la misma que Ares había encontrado con anterioridad en su mochila, Cat estaba perpleja la había dejado con la palabra en la boca, había estado a punto de contar lo que sabia pero el disparo certero de Penelope le había aterrado, creo que no duraría en ser la próxima con un agujero en la frente por parte de Penelope por esos momentos, así que guardo silencio.Ares la llevaba fuera de la fábrica, no sabía que era lo que sentía en esos momentos, ver a Penelope disparar así cuando estaban acusándola... Tenía muchas dudas que tenía que resolver cuanto antes o se volvería loco, la sentó en el asiento del copiloto y él fue al del conductor, ya no tenían nada que hacer aquí con Rock muerto, así que dirigió a la mansion de nuevo. Ninguno dijo nada en todo el trayecto pero Penelope había comenzado a

Ares entro a la habitación encontrándose con Penelope levantada y asomada a la ventana, este paro en seco. — Penelope... — Ares sospechaba que lo había escuchado todo, sus brazos cruzados indicando rechazo le daba la primera pista, la pregunta lo hizo soltar el aire. — ¿Te acostaste con ella cuando ya nos habíamos conocido? No más mentiras. — Ares miro el rostro serio de Penelope. — Si... Cuando dejamos de vernos por meses, te estuve siguiendo a todas partes, me aseguraba que estabas bien, yo mismo intentaba alejarme de ti, pero acababa frente a tu puerta, una noche bebi más de lo normal y acabe en su apartamento, no me acuerdo de mucho, pero puedo imaginar que, si lo hice, no se repitió más. — Si ella va a estar rondando siempre cerca tuyo como un satélite debes contarme todo, ella no lo va a dejar aquí, entra en tu casa como quiere hace y deshace, ni siquiera la oímos entrar, escuche como rompía la botella a tus pies... Una mujer despechada es muy peligrosa. — Penelope suspiro e hiz

Penelope había llamado por teléfono por tercera vez a su hermano, este había ignorado todas sus llamadas desde aquel incidente, no aguantaba más sin saber nada de ellos, necesitaba saber si Tae estaba bien, así que había decidido ir a buscarlos ella misma, lo que no sabía era como librarse de Luca. Había llegado la hora de salida de la universidad y Luca como siempre la esperaba en la puerta, siempre se robaba la mirada de las chicas del campus de actuación ya que era un chico joven y apuesto, todas querían conocerlo, su aire misterioso y que siempre iba impecable en su traje negro llamaba demasiado la atención.— Hola Luca, hoy me quedare en la biblioteca hasta tarde, tengo varios exámenes y necesito estudiar, en casa no poder conseguirlo. — Este la miro entrecerrando los ojos, no se fiaba de ella y tenía sus motivos. — Vendre de nuevo cuando me avises. — Luca le hizo un gesto con la cabeza en modo de despedida esta le sonrió y vio cómo se marchaba, volvió a entrar en la universidad

— Debes irte nos matara a los dos, no vuelvas más. — Penelope no quería irse, queria ayudar a Tae queria cuidarlo ella. — No lo hare, por mi culpa estas así, vendré después de clases y lo haré todo por ti, él no lo sabra. — Tae y ella se miraban con tristeza, aun sentía cosas por ella y se le estaba dificultando negarse, Penelope fue rápida no lo dejo terminar, así que comenzó a arreglar la casa, fue a la cocina para preparar algo de cena a Tae, Tae suspiro para que negarse si había empezado, no podia detenerla en su estado.Penelope después de un rato sirvió la mesa con la comida de Tae, está la ayudo a levantarse para llevarlo a la mesa, lo sentó y lo dejo todo a mano para que pudiera comer solo, este la cogió del brazo. — Para ya, si vienes todos los días tendrás tiempo de hacerlo todo. — Solo te preparare un baño y arreglare tu cama... Esto parece una pocilga no una casa... — Tae miraba con una expresión feroz, sus ojos gatunos se habían afilado y pensó lo que había dicho, se rubo