Un año más tarde.Gabriela se había adaptado a vivir justo como su madre se lo pidió, retomó su carrera de modelaje y aunque cada día añoraba ver a Emilio, se repetía que ese era su sacrificio por amor.«Será que él me olvidó» pensó con tristeza, cada día se hace la misma pregunta. «O tal vez nunca me amó» sentía inseguridades, porque ha soñado con que él fuera a verla así sea una sola vez.Veía a su hermano ser feliz con su esposa embarazada, todos habían avanzado menos ella. Estaba en el jardín junto a Carol.—Me ha pateado, esta es su primera patadita— dijo Carol maravillada, casi voceando.—Esa bebé de tía será una peleadora sagaz—le manifestó Gabriela sintiendo emoción, ansiaba ver a su sobrina, tocó el vientre de Carol y volvió a sentir otro movimiento de la bebé, y celebró echándose a reír.— Es momento de empezar a mirar hacia otros horizontes cuñada, ya tu esposo tiene un año que murió, deberías volver abrir tu corazón para que un nuevo amor sane tus heridas— le aconsejó Caro
Leer más