GeorginaCualquiera creería que luego de una noche como la que he pasado junto a Adam, estaría feliz, saltando emocionada, o quizás despertando en sus brazos; pero no, y creí que no podría doler más. No sé lo que sucede, ¿por qué no puede llegar a quererme?...Aún siento sus manos acariciarme y su boca recorrerme completa. Todo fue tan intenso que no tengo palabras para describirlo. Aunque fue extraño que no llegara a más, no hizo nada para aliviar su propia tensión y necesidad, se dedicó a besarme y tocarme hasta enloquecer, por largas horas, complaciéndome hasta el límite de la cordura. Me hizo sentir muy bien, especial y tan deseada.Miro, en el espejo de mi baño, como ha dejado mi cuell
Leer más