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Todos los capítulos de But, Saranghe: Capítulo 11 - Capítulo 13
13 chapters
ONCE
Cuando había llegado del hospital, James estuvo conmigo todo el tiempo, hasta se había ofrecido llevarme en el auto rentado a mi casa.—Estoy muy feliz con todo esto Shun Pei. —murmuro James mientras conducía con una mano y con la otra besaba el dorso de mi mano.—Yo también ángel… —le sonreí manteniendo la vista fija en él, viendo como su rostro reflejaba la gran felicidad que tenía.No podía tener un bebé, éramos demasiado jóvenes, arruinaría todo. Apenas James se iría a Londres en el bufete de abogados de su sueño pronto, no podíamos tener un bebé. No arruinaría los sueños de James, él siempre había querido trabajar en ese lugar y no le quitaría eso. No podía mirar la terminal tampoco, no podía ver al bebé allí porque necesitaba estar fuerte.
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DOCE
James y yo nos encontrábamos en la jurisdicción casándonos, se encontraba mi madre, mi padre, mi hermana, Fen Mi, y mi suegra.Estaba muy nerviosa, pero… ¡Me iba a casar con el hombre que me volvía loca y había vuelto mi mundo patas arriba!Ahora se notaba un poco más mi abultada barriga de embarazada, lo que me hacía querer romper en llanto.Me sentía tan especial el día de hoy, como si fuese una vez más la mujer más feliz del mundo.Al estar allí frente al amor de mi vida, mi ángel, la persona la cual amaba con locura, mi corazón latía con fuerza.—Te ves hermosa Qio Shun Pei…—James Montgomery, ¿aceptas a Qio Shun Pei como tu esposa para amarla y respetarla en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte los separe?—Acepto.—Qio Shun Pie, ¿aceptas a James Montg
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TRECE
Dos meses después Por fin el día más esperado para nosotros había llegado, por fin nacería nuestra pequeña, no sabía quién estaba más asustado… si James o yo.Todo en ese momento pasaba tan rápido, saber que en unas horas no seriamos James y yo en casa, sino que seriamos oficialmente tres.Yo había decidido que, para el momento del parto, seria en una bañera en el hospital.—¿Cómo te sientes? —me pregunta James nervioso ayudándome a subir al auto.—Bien… —fue en ese momento cuando me retorcí de dolor a causa de una contracción.Desde que habían empezado mis contracciones, ya hace unas horas, me había dado una ducha de agua tibia y también utilizaba una pelota de pilates para aliviar el dolor de forma natural.Al llegar al hospita
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