Mi señorita, cómo estuvo su día?- le saludó el asistente de su esposo apenas le vio llegar al auto, vio su cara pálida al acercarse más.- … señora está bien?-- Sr. Park, buenas tardes, trajo a Tom a su revisión?-- Sí, guardaré esa caja en el maletero.- se la quitó de los brazos.- El sr. Miller esta a punto de llegar.- Tom venía desde el ascensor caminando con ayuda de sus muletas.-… señor!!! Aquí estamos!!!- le llamó con su mano.-Tom llevaba un gorro negro y un buzo suelto, se quitó la mascarilla al llegar donde ella estaba. Supo sólo con mirarla que algo malo había ocurrido.-- Usar muletas debe ser incómodo.- observó Anaís mientras él se acercaba- El Sr. Park me comentó que tú recuperación es rápida, es un alivio.- Ya les tomé el ritmo… sólo necesito un par de sesiones para volver a jugar...¿ Anais, pasó algo?-El Sr. Park se quedó en el maletero para dejarlos hablar.-<

Sofía caminó por media hora, aún le faltaba media más para llegar a su destino. - El metro ya está cerrado y no tengo dinero para un taxi, debí pedirle a la señora..uff… mañana tengo clases temprano... - Un auto le tocó la bocina, al principio se asustó, prendió y apagó las luces, se estacionó cerca de ella. - Sofía.- le llamaron del auto.- “Se parece al auto de ese tonto”- pensó.- Adam se bajó del auto, la miraba enojado.- - ¿ Cómo puedes ser tan irresponsable? Es peligroso que camines sola…- - No es tu problema, ¿ cómo supiste que tomaría este camino?- - Le pregunté a Anais.- El hombre le tomó del brazo y abri&o

Ninguno habló de vuelta al departamento, le sostuvo la mano, ni siquiera en el ascensor, Tom estaba molesto, no llevó las muletas por lo que caminaba con dificultad.Ingresó al departamento y se sentó en el sofá, recién en ese momento recordó que su pie estaba lesionado e hizo gestos de dolor.-- Tom, no debiste salir sin tus muletas o un apoyo, revisaré tu pie.- se arrodillo a sus pies y le quitó la pantufla, la venda estaba suelta y sus dedos se veían edematosos.-- No lo hagas.- le quitó el pie de sus manos, estaba dolido, a pesar de todo, no lograba hacerle confiar en él.-¿   Cómo supiste que había ido allí?-- Te escuche cuando desperté, tuve un presentimiento así que te seguí.-- ¿ Qué investigó el Sr. Park? ¿ Por qué Bárbara se asustó tanto?-- Es lo que escuchaste, no puedo darte más detalles.- seguía molesto, Anaís había creído todo sin cuestiona

Tocaron el timbre insistentemente, apenas Anais alcanzó a vestirse y lucir presentable. Se miró en el espejo del recibidor antes de abrir la puerta, sus labios ya habían recuperado su tamaño.-- Hermano, hola.- lanzaba fuego por los ojos, le pareció más alto que antes.-- Ese hombre… ¿dónde está?-- En el dormitorio, debe hacer reposo por su lesión.- reposo que no hacía.- Bruno me contó lo que sucedió.- hizo un silencio incómodo.- Lo sé, sientate, bebamos un café y te cuento. –Le contó como le informaron de su despido y que la novia de su director clínico estaba implicada.-- Otra vez… esa mujer metiendo su nariz.- rechinó los dientes.- … ¿ Qué dice Tom con respecto a su ex pareja? Espero que no la defienda.-- No estoy de su lado Marco.- El aludido avanzó hacia ellos con un bastón.-- ¿Qué medida

¿Me ves cara de chiste? Supongo que le dirás a esa modelo que haga mi trabajo, no sabes el alivio que siento de no llevar tu apellido en estos momentos, saludos a mi hermanito Danilo – y dio un portazo.-   -¿   Adam…eres el presidente del sindicato de enfermeras?- preguntó Ginger  - Sí.- -¿ Y el presidente del colegio de enfermeras?- siguió Anaís. - También.-- ¿En qué momento haces todo eso?- su amigo era increíble. - Mmm, tengo mis tácticas Ginger.- le cerró un ojo.- -¿          De verdad, te ofrecieron un puesto de coordinador en la clínica de la competencia?- quería saber Anaís. - Sí. No era una mentira, mi padr

 Desde que fue despedida pasaron 3 semanas, Adam no volvió a trabajar en la clínica de su padre y se tomó ese tiempo para descansar a su manera, ya que pasaba todo el día atendiendo en la cafetería. El ritmo de trabajo en la cafetería era mucho más llevadero que en la clínica. Por lo mensajes del grupo de enfermeros, su renuncia generó problemas a nivel del personal de la clínica. El ex marido de Anais tampoco se quedó quieto, su padre le escribió para comentarle que fue personalmente a conversar con él y le pidió explicaciones, no le había reconocido al principio porque llevaba una mascarilla cubriendo su facciones, al escuchar su nombre se levantó del asiento por la sorpresa.   - Si no me equivoco, Tom no querrá hablarle de su visita al director de la clíni

 Le abrió la puerta del copiloto, Sofía se sentó en silencio, no entendía su comportamiento, sus manos no se movían, sabía debía colocar el cinturón, pero estaba muy nerviosa.  Adam se inclinó hacia ella, parecía que iba a besarla, pero sólo tiró del cinturón y se lo colocó.  - ¿Qué quieres de mí…?- preguntó finalmente de camino. - Hace 3 semanas que intento hablar contigo pero me evitas.- se escuchaba dolido. - ¡No te evito!!!- lo negó. - No hemos podido estar solos.- - ¿… Necesitas llevarme a tu depto para eso?- - Sí.- respondió seguro.   El corazón de Sofía se mantuv

 En paralelo en la vida de Anais, estar en casa todos los días se le hacía extraño a la enfermera. En las últimas semanas había cambiado todos los cuadros de lugar, ordenado la ropa, limpieza profunda, todo lo que se imaginaba para no pensar en lo sucedido. - Anais, no necesitas hacer tantas cosas, aprovecha de descansar.- le sugirió Tom.   - No puedo estar quieta, demasiado tiempo libre me pone de malas.-   Tom le observaba caminar de un lado a otro en la sala de estar, le tiró de la cintura y le hizo caer sobre él en el sofá.- Deja que ocupe tu tiempo… - le ofreció su ex marido.   - ¿Acaso me darás trabajo?- le preguntó inocente.   - Puedo, pero no como enfermera&hel

 Tom y Anais, viajaron por el fin de semana a una ciudad cercana, era un centro recreacional con piscina y juegos. Anais leía una novela, mientras su hija jugaba en la piscina con su papá.  Llevaba 3 semanas desempleada, prefirió tomarse con calma lo de su despido, Tom trató de animarla, le ofreció ir a la clínica con una demanda por su abogado, ella no acepto.-  Los observaba jugar en el agua, el parecido de ambos era increíble, tenía sueño, hace un par de días que se sentía así, muy somnolienta, puso el libro sobre su regazo y se durmió. Unos labios húmedos y fríos tocaron los suyos, le miró atontada, Tom había salido del agua y aún estaba mojado.Desde la.conversscion con el director de la clínica, Tom recibió una llamada de su parte q

Tom llamó a su cuñado, el Dr. Schneider no tardó en llegar, la chica estaba en la cama ya había recobrado el conocimiento.-- Bruno, ¿Qué haces aquí?- se veía desorientada.- Tom me llamó, te desmayaste antes de entrar a tu pieza.- le explicó con la calma que lo caracteriza.- Me puse nerviosa por la visita del Dr. Spencer, Tom no debió molestarte- se sentó- ¿El Dr. Spencer? – le colocó el brazalete del toma presión en su brazo-¿ … vino hasta aquí?-- Sí. Quería devolverme mi puesto en la clínica.-- ¿De verdad?- se iluminó su rostro.- Me pareció sospechoso a que accediera, así que le dije que no.-- Es lamentable, me hubiese gustado tenerla devuelta jefa.-- Los extrañaré, pero Ginger y tú seguiremos viéndonos, no podía volver a un lugar que me desvincularon por la lengua venenosa de esa mujer, no me