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Todos los capítulos de Moda, Poder y Pasión. : Capítulo 11 - Capítulo 20
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CAPÍTULO ONCE
Gina Renaux¿Han oído la expresión de ...”me quede con la boca abierta”...? Bueno en mi caso fue literal, la mansión de los Martínez  era más de lo  que espere. Por supuesto que sabía que eran muy ricos,  es casa del dueño de la prestigiosa Zandal, pero uno jamás se mentaliza con encontrarse con una humilde vivienda cómo está , ¿dije vivienda?. No, esto más bien debería considerarse mausoleo. Solo con los jardines me parece que hemos llegado al mismísimo Palacio de la Zarzuela, hogar de la corona española. Con razón no había ninguna necesidad de pagar un hotel, acá d
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CAPÍTULO DOCE
Ginna RenauxFue arduo prepararme para el bendito  desfile. Mi pelo no cedía a colaborar conmigo, después de lavarlo y secarlo pase horas para que se viera decente.Desempaque el vestido de gala, realmente tenía que haberlo  hecho en la mañana, se me pasó totalmente de la cabeza.Mi vestido es lindo, más  no es un vestido espectacular, lo que si estoy segura que  resaltará mis atributos. Por irónico que parezca  yo no puedo  llevar un vestido Ginna R de esta temporada, ya que todos los meses una no se compra un vestido valorado en casi diez mil libras esterlinas; así que tendré que conformarme con uno de mis primeros diseños.Leer más
CAPÍTULO TRECE
Ginna Renaux Clave mis uñas en su espalda desnuda deleitándome con todo lo que me provocaba el avance de su boca sobre la mía. Su lengua me acariciaba despacio la comisura de los labios .Su beso no era sutil, no era uno de esos besos que terminan cuando acaban en la boca. No, este beso prometía una noche larga e intensa. Una noche para recorrer de extremo a extremo ese cuerpo de infarto, esos músculos perfectos y duros que conforman al Dios Ra.Me estaba comiendo la boca, probándome  hasta saciarse de mi. Demasiada pasión contenida en este hombre. Una bomba atómica destruyendo mis barreras y atacando mis sentidos.Sus manos se encajaron sobre mis glúteos y me atrajo hacia
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CAPÍTULO CATORCE
 Ginna Renaux  Me relajo, mi respiración no me ayuda. Pensé que era más valiente, pero no me importa, estoy decidida, y llegado a este punto no quiero parar, pero sería muy hipócrita de mi parte si digo que no tengo miedo.  No soy ninguna monjigata, no soy Virgen por eso. Es que nadie me había hecho sentir el incendio que provocó Emi, y no solo con sus besos, desde la primera vez que lo vi me sentí atraída; y si lo cierto es que es demasiado guapo, eso no es lo que más me atrae. Lo que me mata es esa fuerza en el carácter, esa energía de hombre macho Alfa que desprende, la seguridad que emana es lo que lo hace irresistible ante mi. Emi
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CAPÍTULO QUINCE
 Ginna Renaux  Me tomo casi diez minutos terminar con mi diatriba de autocompasión. Quién  además de mi tiene que sufrir tanto, ahora además de virgen, tengo una vida sexual frustrada, y tengo que verle la cara a el culpable de mi frustración. Creo que más que el orgullo, me lastimo en mi feminidad. Primero me hizo sentir deseada como una diosa, para después bajarme la autoestima a niveles que ni siquiera podrían ser contados. Me metí en mi baño, tomé una ducha larga y me saqué del cuerpo el olor a ese maldito demonio, Ra. A cada vez que  Leer más
CAPÍTULO DIECISÉIS
Emiliano SantoriniSalí de la habitación de Ginna con la frustración de no poder explicarme, o despedirme. Mi entrepierna latía con la imagen de su cuerpo desnudo ante mi.  Tenía que haberme tomando unos minutos más para hacer entrado en razón a esa hermosa impertinente.Tiempo es algo de lo que no dispongo ahora mismo. Maria Eduarda no está bien y es lo más importante para mi en este momento.  Regresarla a casa a su zona de confort es una necesidad imperiosa.Pero aunque mi responsabilidad con mi hermana me obligue a partir, no impide que tenga sentimientos encontrados. Es la primera vez que me aferro a un lugar, siempre habia tenido la libertad de partir sin sentir un nudo en la garganta, donde estuviera Duda pues
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CAPÍTULO DIECISIETE
Ginna Renaux  Cuando aterrizamos en Londres mi padre nos esperaba en el aeropuerto. Mila venía en su burbuja feliz y yo más callada que de costumbre. Mi hermana estuvo todo el vuelo narrando  todo de Carlos como si fueran hazañas todos sus movimientos . Yo me contenía el “¡yuppi!” y solo le ofrecía mi mejor sonrisa. No es que Carlos tuviera las dimensiones de Emiliano, porque sino Mila no se podría sentar derecha durante el viaje, después de dos días que la vi en unas escasas tres horas si sumamos todo el tiempo que estuvimos juntas. Pero a ella todo de él le parecía perfecto, al parecer es así cuando uno se enamora, maximiza todo lo del otro a extremos alarmantes. Leer más
CAPÍTULO DIECIOCHO
Ginna Renaux Yo: [¿Mi Galería? No te habrás atrevido o... si?]✅✅  Leo otra vez su mensaje. Si soy sincera... Ojalá no se hubiera detenido, sería épico haber sido suya. No me arrepentiría jamás de que Ra fuera el primer hombre en mi vida. De cierta forma lo es, fue el primero en llegar tan lejos y en tocarme tan íntimamente. También fue quien me enseñó que con los labios se puede dar y recibir tanto placer como no lo creía posible. Tal ves si me hubiese hecho suya,  todo habría terminado entre nosotros, es posible que toda esta tensión sexual qu
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CAPÍTULO DIECINUEVE
 Ginna Renaux  Me he  quedado absolutamente sin habla. No puedo gesticular palabra alguna. Alicia me habré los ojos como platos para que reaccione y salude correctamente a Emiliano Santorini y a su tía. La sonrisa de Emi ante mi sorpresa hace que su cara sea un poema, y yo solo puedo imaginármelo sosteniendo la almohada como lo he visto mil veces desde ayer en mi galería. Pareciera que es otro hombre enfundado en ese traje a la medida que marca el pecho y la espaldas perfectos.  No se parece  al coqueto salvaje que tengo semidesnudo posando para mi en tres fotos que tengo marcadas con la estrellas de favoritas.

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CAPÍTULO VEINTE
 Ginna Renaux Saque el paquete de toallas de mi gaveta y limpie el exceso de fluidos que bañaba mi entrepierna. Alcancé mis bragas destrozadas y miré a Emiliano de mal modo que en ese momento se abotonaba la estrujada camisa. —No me culpes—dijo alzándose de hombros— disfrutaré de sobremanera la tarde sabiendo que ese culo divino estará descubierto y disponible para ser tocado por mi en cualquier momento. —No se que te hace pensar eso—refute. —Ya veremos—agregó ladeando la cabeza. Salimos con cuida
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