Al inicio Emily que fue incapaz de responder, tras reaccionar segundos después tomó a Drew de la nuca, acomodandolo a su lado para hacerlo ingresar de cuerpo entero, cerrando la puerta al hacerlo y envolviendose en la fogosa caricia de bocas. Sentir sus labios era lo más parecido al cielo, la lengua inquieta de la chica sometía a la suya a sensaciones tan nuevas como excitantes. Le encantaba. El vestido blanco de Emily era pegado al cuerpo, cosa que le complicó pero no imposibilitó que se colocara sobre el regazo del chico, quedando cara a cara, con las piernas a cada lado. Drew acarició una de sus piernas por debajo de la prenda en lo que ella continuaba besándolo abrazada a su cuello. Sintió desfallecer cuando la morena se movió sobre su pantalón, a propósito, una y otra vez, sacando ventaja de la posición en que se encontraba. La
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