realidad

¿Qué ocultaba la heredera de Hidden Beauty? Todos se lo preguntaban debido a que se destacaba por ser tan extraña. Lenya Parodi lo tenía todo en charola de plata, pero vivía sus días melancólica e irritable, y por esa razón, siempre era el blanco de las críticas y se presumía que escondía un secreto importante. A decir verdad, no estaban equivocados. Lenya escondía un secreto, uno estremecedor. Nadie sabía que, en realidad, debajo de sus vestidos estampados se ocultaba un chico, quien estaba condenado a vivir como el reemplazo de su hermana gemela.

Lawrence de Arabia dijo una vez que, aquellos que sueñan despiertos, son los que ven sus sueños hechos realidad. Y sí, ¿De pronto esto fuera cierto y tus sueños salieran de tu cabeza? Francis es una chica con una vida acelerada, y todo eso cambia cuando sus sueños comienzan a entretejerse con la realidad, dudando de todo lo que cree conocer. Una conexión con su pasado podría darle las respuestas a su realidad, pero una vez comienzas a dudar de todo, ¿Cómo puedes asegurar que lo que conoces es la verdad? Solo te queda estar al borde del abismo... ¿Y después? Después queda la locura.

Mi instinto de sobrevivencia me mantiene corriendo por los pasillos del enorme salón, solo quiero escapar antes de que muy tarde, antes de que atrape y termine por devorarme, pero escucho el sonido de unos leves pasos chocando sobre los mosaicos y no puedo distinguir si son solo mis tacones o sus perfectos zapatos Gucci ... -No hagas esto más dramático de lo que en realidad es conejita, no tienes en donde escapar, ni a quien pedir ayuda, tú vida y todo tu mundo ahora dependen de mí- dice con tono divertido. Choco contra una pared no hay más puertas, me tiene acorralada, el lobo va a comerme... - Sólo déjame irme, prometo jamás aparecer nuevamente en tu vida, por favor déjame- apenas y sale mi voz en forma de susurro, mis manos tocan la fría pared y veo su silueta acercarse hasta quedar frente a mí. El extiende su fría mano y toca uno de mis mechones de cabello y yo no puedo evitar temblar por el miedo que me provoca su toque, se que no puedo escapar. - Se acabó el juego conejita, tú eres mía y lo que tú desees a nadie le importa - apenas termina de pronunciar esas palabras, me jala el cabello, doy un grito ahogado y lo último que siento son sus labios sobre los míos...

Como hice que el primer amor de Fernando Ruiz se diera una ducha fría, Fernando me encerró en el congelador y le puso candado. —¡Milena se resfrió, así que tú vas a sufrir con ella! —me gritó. Desesperada, me aferré a la puerta pidiendo ayuda, pero solo estaba Milena: —Ya ves, Fernando me adora, y yo… ¡no puedo contradecirlo! —dijo, mientras ponía la temperatura más baja y soltó el anti polvo que cubrió la caja dejándome sin visión. Ella ajustó el congelador a la temperatura más baja, y la funda antipolvo bloqueó mi último rastro de visión. Cuando Fernando regresó de su luna de miel, por fin se compadeció y dijo que me dejaría salir. —Te perdono por esta vez, ¡pero hay de ti, si te atreves a meterte con Milena de nuevo! Ya no lo haré, porque para entonces ya me había convertido en un enorme bloque de hielo que se hacía añicos al menor roce.

Minett Biancheri. —¿Qué estás haciendo? —espeto girando el monitor—. Lee bien el documento, dice Bianchi. Me enfrenta levantando el mentón. —Es un simple error, ¿pero quién era? —formula ante mi evidente molestia. —Es la chica que, en contra de sus instintos, no logró evitar mi muerte.

Valentina Parísi, hija de un magnate de la tecnología. En su fiesta de 16 años, comete la peor locura de su vida, le confiesa su amor al socio de su padre, 12 años mayor. Por supuesto este la rechaza y le dice que ella es una niña para el. Ahora toda una mujer de 23 años, ha un paso de graduarse de ingeniera electrónica, necesita hacer pasantías pero la empresa de su padre no es una opción. Su padre le pide a su amigo y socio, que acepte a su hija como pasante en su empresa y este no le deja opción a negarse. ¿ Que pasara si su amor prohibido se convierte en una realidad?

María Aragall tenía mala suerte, estaba segura de ello y, aunque en algún momento de su vida no lo creyó de esa manera, tarde se dio cuenta de que lo peor que le había pasado era haberse topado con ese chico guapo, agradable y millonario que sumaría a su vida una nueva historia con final triste y desesperanzador, ¿o no?

Tras un hecho que la marcó de por vida, Alaia se vio obligada a vivir encerrada y protegida durante años. La princesa y loba alfa de la manada más poderosa del mundo sobrenatural, fue besada por un ángel estando en el vientre de su madre. Hasta ahora, nadie ha logrado saber el propósito de ese acto, debido a que la pareja destinada de Alaia es el ser más perverso que existe...: El emperador de los demonios. Zain es la oscuridad personificada; jura que borrará la marca que dejó el ángel en su pareja sin importar lo que deba hacer para conseguirlo. Por eso, elabora un plan macabro jugando con la mente de la cachorra para enamorarla a como dé lugar sin que ella perciba que él, es el hombre a quien más aborrece. Cuando Alaia descubra que el ser al que odia desde pequeña, en realidad es al que más ama gracias a las tretas que utilizó para enamorarla, ¿podrá perdonarlo creyendo que ha jugado con sus sentimientos para vengarse de su padre? En el momento que el ángel aparezca... ¿Se rendirá Zain dejándole el camino libre o luchará por recuperar al amor de su vida?

Aria desde que tiene 8 años descubrió el lado oscuro de los seres humanos. Su madre la abandonó, eligió salvarse dejándolo atras, a merced de su padre alcohólico para finalmente también ser descartada por él, cuando creyó que la luz podría salir en su vida, entendió que estaba equivocada. En realidad no puede confiar en nadie, ella sabe que pronto será desechada. Entonces, ¿Quién salvo salvo su vida?.

A lo lejos de algún lugar se avecina un ser radiante, un caballero de porte impecable y majestuoso, acompañado por una estela de poder y elegancia, con un toque sublime de frialdad. Dejando huellas de magma en su andar. En un parpadeo se hace existente su talón de Aquiles, una chica que apaga de golpe a un alfa. «Larisa, calma de mis tormentas y tempestades» —Eres mi gran debilidad, eres la nena de los ojos apaciguante —susurro. —Si —alza su mirada. Y sus manos cálidas y confortable, provoca un choque térmico al roce de las mías, ¿Qué pasa? Me distrae de la vil realidad, y a sí mismo dejándome derretido por su aroma y su trato, atrapándome en un encanto difícil de rechazar.