Era incomodo, todo era muy incomodo, yo no supe cómo reaccionar a la pregunta de Lucian, y casi salí corriendo a meterme al gimnasio, el entro minutos después se veía algo decaído, yo no quise rechazarlo, pero esto era nuevo para mí, me latía el corazón a mil por hora, para no verlo me tuve que encerrar en mi pequeña oficina, pues yo no estaba segura de lo que sentía por él, sobretodo no sabía si yo era la mejor opción para él, puesto que era algunos años mayor y era divorciada, el no parecía tener tanta experiencia con las mujeres, no quería que la gente dijera que me estaba aprovehando.
Los siguientes días eran más o menos igual, así que era un poco difícil ir a trabajar, y pasar todo el dia cerca suyo, después de un largo día, llegue a darme un baño, el foco llevaba días amenazando apagarse en cualquier momento, parpadeaba mucho, y justo cuando me lavaba el cabello, se apago, volvió a prenderse, y después se apago en definitiva, dejándome en la oscuridad, cerré las llaves del agua, luego de enjuagar mi cabello, tenía mi viejo celular sobre la tapa del baño, lo había dejado ahí, por si eso pasaba, pero mientras trataba de agarrarlo, me sostuve de la cortina y esta se rompió, me resbale y termine en el piso, alcanzando a golpear mi cabeza con el borde la taza de baño, y perdí el conocimiento.
...
Desperté no se cuanto tiempo después estaba bastante desorientada, y me dolía la cabeza, me tomo algo de tiempo recordar donde estaba, mi cuerpo estaba helado, me levante como pude, abrí de nuevo el agua caliente, para entrar en calor, cuando por fin lo hice, busque a tientas la toalla, y después el celular, y por encendí el flash, para ver, y me vi en el espejo, tenía una bola en la frente, y me dolía una costilla, me había golpeado con el borde que se paraba la ducha del resto del baño.
Seguro tendría un moretón ahí, pero estaba acostumbrada, podría vivir con esto, el de la frente sería más difícil de tapar, no serviría el maquillaje, necesitaba algo de hielo, salí del baño y vi que afuera también estaba oscuro, encendí la luz, y me vestí, con cierto esfuerzo, aunque me puse hielo, el dolor no se iba, necesitaba un analgésico, comenzaron a tocar la puerta, así que le levante y fui a abrir.
-¡por Dios! ¿Qué te paso en la frente?– la persona frente a mi puerta era Zoe
-me caí en el baño, se fundió el foco, y me quede a oscuras –
-vamos hay que ir al hospital, podrías tener una contusión, ¿con que te pegaste en la cabeza? –
-con la taza de baño, espera ¿Qué haces aquí? –
-vine a traerte la ropa que te dije, te llame, pero no respondiste, ahora sé porque –
-venga ponte tu abrigo y toma tu bolso –
-no tengo dinero para ir al hospital –
-tienes seguro medico, mujer, al igual que todos en el gimnasio, si vienes conmigo voy a llamar a Basil, es un exagerado, y hará un alboroto –
Sin más opciones, fui con ella, me hicieron muchas preguntas, no parecían creerme muy bien que fue un accidente –mire soy una mujer divorciada, ya pase por eso, no volvería a proteger a nadie que me haga daño, vivo sola, me caí en el baño, se lo e dicho muchas veces –
-está bien señora, tranquila, le vamos a hacer una tomografía, para descartar una contusión, o hemorragia interna, venga con nosotros –
Cuando volví con Zoe, ella ya no estaba sola, no solo Basil estaba con ella, el chico tras la gorra y la capucha, era Lucian -¿Qué hacen ellos aquí? –
-lo siento, Basil, me llamo y tuve que decirle, no sabía que estaba con Lucian, le dije que estaba en el hospital, y creyó que la herida era yo, y entro en pánico –
-¿pueden dejarnos un momento? – el pedido de Lucian los sorprendió, pero Zoe tomo a su novio, y se salió
-¿de verdad estas bien? – me pregunto en voz baja
-ya dijo el doctor que solo fue el golpe, ¿Qué haces aquí? –
-me preocupe, ¿está mal que me preocupe por ti? me estas evitando desde ese día, ¿hice algo malo? –
-no, el problema fui yo, no supe como reaccionar, me tomo por sorpresa tu pregunta –
El doctor entro y Lucian se puso firme -¿de verdad está bien? Ese golpe se ve realmente mal –
-está bien, solo tiene que vigilar a su novia bien, esta noche, mientras no presente vomito, nauseas, o algún otro síntoma, si eso pasa la trae de inmediato, además hay que revisarla cada hora mientras duerme – el solo siguió asintió, y se salió con el afirmar el alta
-yo no soy su novia – lo dije en voz alta, pero ninguno de los dos escucho mi respuesta
El insistió en llevarme, y ni Zoe, ni su novio, se negaron -¿Por qué no le aclaraste al doctor que no soy tu novia? -
-a mi no me molesta – me respondió
-¿A dónde vamos? Mi casa está del otro lado
-ya escuchaste al doctor, tengo que vigilarte esta noche –
-se lo dijo a mi novio, tú no eres mi novio, además no traigo, ni cepillo de dientes, ni pijama ni nada, debo ir a mi casa primero –
De mala gana me llevo, y mientras yo ponía las cosas en mi bolsa, el revisaba el baño, el cual le iba pequeño.
-¿es poca cosa para ti mi casa? – le pregunte
-viví en un lugar así, mucho tiempo, solo recuerdo cosas –
-no te imago en un sitio así –
-ya no podría, por cierto hay que cambiar el foco, y recolocar la cortina, pero será por la mañana no se ve nada, no puedo dejarte aquí esta noche –
Cuando tome mi bolsa me lastime la costilla y él lo noto, así que me quito el bolso y se lo llevo él, si tan solo no fuera tan amable conmigo, yo la tendría más fácil.
Lucian
Ese moretón en su frente era demasiado grande, por eso no pude dejarla sola, así que aquí estaba, en mi casa otra vez, jugando con mi perro, ella comenzó a bostezar.
-ve a la cama, necesitas descansar –
Ella me miro sin decir nada, se levanto, y se fue, entro a la habitación, salió y después entro al baño, cuando salió yo la esperaba.
-¿estás aun molesta, porque te traje aquí? –
-no estoy molesta contigo, lo estoy conmigo, por haber sido tan torpe, ahora por mí culpa, tú no vas a dormir casi nada hoy –
-no te preocupes por mí, solo vete a la cama –
Se quedo dudando un momento, y después asintió – buenas noches –
-espera, tengo una pregunta –
-dime –
-¿Por qué no me llamaste? Le llamaste a Zoe y no a mí –
-yo no lo llame, ella fue a mi casa, porque tenía algo para mí –
-entonces… ¿no pensabas llamar a nadie? – ella negó con la cabeza
-¿Por qué te niegas a recibir ayuda? –
-porque nunca la tuve, no es la primera vez que me lastimo, siempre pude sola –
-pero ya no estás sola –
-sigo sola, estaba sola cuando me lastime, no hay nadie a quien pueda llamar en estas situaciones –
-¿entonces yo qué? ¿Acaso estoy pintado? estoy aquí Abigail, puedes apoyarte en mi, entonces ¿Por qué no lo haces? –
-Por qué temo que te vayas, tengo miedo de apoyarme en ti, y que después me dejes – Abigail comenzó a llorar, lo dude un poco, pero la abrace
-no voy a ir a ningún lado, lo prometo – no era una promesa vacía, de verdad no pensaba ir a ningún lado, mientras ella me permitiera estar a su lado.
Puse toda la ropa sobre la cama, y la mire, era tan poca y toda era tan anticuada, me hacía parecer mucho mayor de lo que era, tome un suéter y lo vi de manera detenida, estaba desgastado, y las mangas comenzaban a deshilacharse, ¿cómo pude vivir tanto tiempo así, como es que permití que me trataran de esa manera por tanto tiempo? Tire el suéter al piso, y después el resto de la ropa, me sentía asqueada de la persona que fui, me senté sobre la cama, y vi el sobre que estaba encima de la mesita de noche. Mañana era mi primer día de trabajo y no tenía nada que ponerme, tendría que comprar ropa con mi primer sueldo. Resignada tome el sobre, y mire el contenido, ni modo me dije tenía que comprar comida para sobrevivir el resto de la semana, no podía gastarlo en ropa. Cuando volvía con los víveres que se supone me durarían toda la semana, me detuve al ver, una tienda de segunda mano, y se me ocurrió una idea, y me sobraba un poco de dinero, así que entre. Después de tanto buscar enco
Como salí de mi casa muy temprano fui la primera en llegar, pues la puerta del gimnasio seguía cerrada, cuando ya tenía como diez minutos ahí, llego un auto deportivo de color azul y se estaciono, el tal Lucian se bajo de este, estaba usando un conjunto deportivo, traía la capucha arriba y audífonos, así que ni me vio o decidió ignorarme, saco sus cosas de el lado del copiloto, y vino a abrir la puerta. Me sentí tan pequeña ahí parada a su lado, el era tan alto, y mi 1.60 m no me ayudaban mucho. -¿no vas a entrar? – me preguntó de mala gana, yo estaba distraída mirándolo y pegue un salto cuando me hablo, pero asentí y entre tras el -oye espera – lo llame, pero como seguía con sus audífonos me ignoro, así que lo seguí, pero me frene en seco al ver que eran los vestidores y él se estaba quitando la sudadera -¿te vas a quedar parada mirándome? – -solo quería decirte que ayer te hice un perfil en redes sociales, y quería saber que opinas al respecto, puedo abrirlo en tu celular y ce
AbigailCuando salimos de ese lugar fuimos a comer, casi me asuste al ver el tamaño del sándwich que pidió, el mío era la cuarta parte del suyo, supuse que seguía molesto por lo de antes, ya que no habia dicho mas que lo necesario.Un chico de otra mesa no dejaba de mirarnos, así que deduje que era su fan, creo que verlo conmigo, lo animo a acercarse.-¿eres Lucifer, verdad? – pregunto, Lucian levanto la cabeza y lo vio, sin decir palabra-si es – respondí yo por el-¿puedo tener tu autógrafo? – pregunto emocionado-¿no ves que estoy comiendo? –Esa respuesta borro la sonrisa de la cara del chico, y yo recordé que mi trabajo era evitar situaciones así, por eso respondí yo.-no le gusta que lo molesten mientras come, pero si te esperas a que termine con gusto lo hará –El chico asintió, se disculpo y volvió a su mesa, a decirles a sus amigos-¿Por qué dijiste eso? A mí no me gusta dar autógrafos-porque es mi trabajo, además no pasa nada si das un autógrafo, eso mejorara tu imagen –Lu
Cuando dieron el cachorro de alta Abigail se lo llevo a su casa, pero además de la cuenta yo termine pagando otras cosas como medicamentos y el alimento, ella dijo que me pagaría todo, pero yo no pensaba cobrárselo, viendo el lugar donde vivía, y el hecho de que toda su ropa pareciera pasada de moda, dejaba entre ver que ella no tenía la economía para pagarme, no por el momento.No pasaron ni dos días, cuando llego con el cachorro al gimnasio, como siempre, ella y yo éramos de los primeros en llegar.-¿Cómo sigue tu cachorro? – le pregunte-el está mejor de su patita – me respondió, pero se veía algo triste, hasta yo que no era muy observador podía notarlo.-¿Qué es lo que sucede? – quise saber-la casera me acaba de decir esta mañana que no puedo tener mascotas en el departamento, yo no lo sabía, ahora debo buscarle otro hogar, pero no conozco a nadie por aquí, ¿crees que alguno de los chicos aquí lo adoptaría? –-lo siento por ti, pero la verdad no lo sé –-¿y tú? ¿No te gustaría ad
Por fin llego el día de recibir mi paga, eso me hacía mucha emoción, en primera porque era mi primera vez recibiendo un sueldo, me case nada más salir de la universidad, mi ex esposo era demasiado celoso jamás me dejo trabajar. En segundo lugar ya casi no tenía dinero, y necesitaba comprar más comida.Cuando me entregaron el sobre con dinero quería brincar de la emoción, pero sería extraño, así que agradecí, y me retire a mi pequeña oficina para abrir el sobre, lo conté, no una sino tres veces, era más de lo acordado, ¿se habrían equivocado?Tocaron la puerta y mi jefe se asomo - ¿sigues aquí? ¿Creí que te habías ido? –-estaba recogiendo mis cosas, pero tengo una pregunta, ¿hubo un error? Es más de lo acordado –-¡ah! No, para nada, se acordó darte un poco más, has hecho un muy buen trabajo, además trabajaste afuera con Lucian, es difícil, soportarlo, ahora vete a casa, ya es hora – se fue cerrando la puerta, me quede un poco confundida, pero después lo guarde en mi bolso, y lo cerré
El lunes incluso me alegre de tener que ir a trabajar, pues eso me mantendría ocupada, llegue y hasta creí que había llegado tarde, puesto que ya casi todos estaban ahí, y parecían emocionados.-¿Qué sucede? – le pregunte a Basil, que fue el que encontré más cerca-ya tenemos la fecha para la próxima pelea de Lucian, eso tiene a todos emocionados –Me quede parada viendo como le daban instrucciones, para sus próximos entrenamientos, parecía tan concentrado, en algún momento se alejo, y vino hacia a mí, se inclino, y recogió al cachorro del piso.-¿puedes cuidarlo? Alguien podría pisarlo por accidente – solo asentí y lo tome-¿ya le pusiste nombre? Creo que tus seguidores quieren saberlo –-aun no lo sé –-le compraste un suetercito – le dije mirando el cachorro con un pequeño suéter puesto-parecía tener frio – me respondió, encogiéndose de hombros-muy considerado de tu parte – le respondí – por cierto, escuche que ya tienes la fecha para tu próxima pelea –-así es, tengo mucho que
-¿Qué pasa si accedo a hacer ese documental? – pregunte, después de pensarlo demasiado- es lo mejor que puedes hacer, les estarías dando más visibilidad también a los otros chicos – me dijo BasilAbigail estaba también ahí, pero solo estaba en silencio, escuchando y tomando notas, en su libreta-si acepto pondré condiciones, si no aceptan no lo hare, y si las incumplen cancelo todo – esa fue mi respuesta definitiva, para Basil, aunque no estaba aun seguro de por qué había aceptado esta tontería -¿y cuáles son esas condiciones, si se puede saber? –-claro que las puedes saber, eres el primero que debe saberlas, porque este es tu trabajo y siempre lo haces mal, vamos a la sala de juntas –Abigail venia llegando y entro tras nosotros, para sentarse frente a mi – buenos días, escuche que al final si aceptaste –-buenos días Abigail –-¿o sea que solo ella se merece los buenos días? – se quejo Basil, a mí solo me regañas, y das ordenes-es lo que te mereces, si hicieras bien tu trabajo,
El asunto del documental marcho mejor de lo esperado, para sorpresa de muchos, el se porto demasiado bien, respondiendo las entrevistas y demás, solo que tenía un horario de grabación, y después todo mundo debía marcharse, ya que sus entrenamientos para competencias eran algo completamente privado.Para celebrar el termino de la filmación, Josué mi jefe invito a todo mundo a cenar, hasta yo termine ahí, en la misma mesa que Lucian, y Basil, eso era incomodo, ellos se llevaban pésimo. Pero extrañamente Lucian estaba más preocupado, porque yo estuviera comiendo bien, estábamos en una parrillada, era mi primera vez ahí, Basil asaba la carne, pero él seguía poniendo más carne en mi plato.-Ya es suficiente, no puedo comer más, si lo hago me dolerá el estomago – le dije deteniéndolo, para evitar más carne en mi plato-¿acaso no estás viendo su tamaño? Ella no puede comer todo eso – le riño Basil-perdón – me dijo dándome un vaso de refresco, me parecía extraño que estuviera siendo tan am