MICHAEL.-Salgo para atender la llamada de Aaron Dhorn, debe ser por las fotos de Isabel y mías que le envié para que le muestre a su hermanito y vean lo feliz que es conmigoSería más sencillo si Isabel decide quedarse aquí apartada de todo casi nadie sabe que tengo una casa aquí por eso decidí traerla- Señor Aaron ¿En qué puedo ayudarlo?- ¿Cómo esta señor Cooper?- Excelente, ¿recibió mis fotos? -Giro de vez en cuando cerciorándome que Isabel no oiga-- Así es pero no lo llamo por eso lo llamo porque llevaré el caso de Robert Thompson- ¿De qué quiere hablar? te dije que lo haría pagar- Lo sé, pero su hija suplica que le tenga clemencia- Él no la tuvo con Isabel al mandar a atropellarla- Lo sé y lo entiendo, pero Robert se declarara culpable y usare su expediente sin antecedentes a su favor y el que Isabel sigue viva, no pasara muchos años en la cárcel pero si pasara algunos, quise hablar con usted para que lo sepa por mi, lo hago por su hija y su esposa que no tienen la culpa
ADAM.-Espero que este nuevo año sea mejor, estoy entusiasmado por crear el contenido y las rutas para la segunda temporada de mi programa, he dejado de pensar en Isabel bueno lo hice el día de su cumpleaños y he estado de mejor humor gracias a Aaron y a Jessica, quien increíblemente se ha convertido en una buena amiga.Desde que nos encontramos en Nueva York solo nos hemos acostado una sola vez y fue porque no echamos unas borracheras de aquellas que hacen que pierdas la conciencia, a pesar de eso ella no ha dejado de ser mi amiga y ha sido agradable tener su compañía me ha hecho olvidar por un momento a Isabel. Mi hermano me mostro unas fotos de ella y su pareja en un evento, ella se veía muy feliz con ese tipo eso me deprimió un poco pero si es feliz con él no puedo hacer nadaSupe por Aaron que a Robert le dieron ocho años por el intento de homicidio a Isabel, acompañé a Aaron a Nueva York a la corte creyendo que vería a Isabel, pero solo por la parte acusadora fue un tal Jeff qui
OCHO MESES DESPUES.-ISABEL.-Salgo a respirar el exquisito aroma del mar, la vitamina D entrando por mis porosLlevamos ocho meses viviendo aquí en Mykonos, luego de celebrar mi cumpleaños y las festividades navideñas regresamos a Nueva York para afinar los detalles de nuestra mudanzaDesde diciembre del año pasado hasta hoy mi vida ha sido estupenda, Michael decidió alquilar un yate lujoso para mi cumpleaños y pasar las navidades nosotros dos solos, fue perfecto, él comparte mi preferencia de la soledad, un recorrido por Grecia, hicimos turismo, tuvimos un chef profesional al cual Michael decidió contratar para que trabajara en Food Center, la comida que nos sirvió esas dos semanas estuvo deliciosa por decir menosAmaba vivir en Grecia, mi memoria iba y venía aún no la recuperaba por completo, varias veces intenté contactarme con Jessica pero fue en vano recordaba estar en mi casa, escribiendo y haciendo ejerciciosHe tenido sueños extraños pero el que más me sorprendió fue un sueño
Nueva York.-ISABEL.-- ¿Apartaste cita para el doctor?- Si, amor mañana iremos, por favor enfócate en el evento del lanzamiento -Niego con la cabeza- ¡No! primero está tu salud, el lanzamiento lo podemos retrasar- De ninguna manera, este es tu momento, el evento ya está listo, la prensa está citada más bien debes enfocarte en tu imagen, ir al salón, el vestido que te pondrás- ¡Ay, Michael! Por favor ¿Cómo quieres que piense en eso? –Le grito sorprendida-- Amor, escúchame, estoy bien, mañana iremos al doctor y lo verás, seguro me mandara vitaminas y eso- Es solo que… pensar que puede pasarte algo -brota una lagrima y cae sobre mi mejilla, él me abraza-- Estaré bien tranquila, no pensemos en cosas negativas, yo siempre he sido un roble cielo, pero no podemos negar que no me estoy haciendo mas joven y me encanta que te preocupes por mí y que quieras que este bien para estar contigo- Pues sí, creo que te quiero más de lo que pensé -Le digo apretándome más a su pecho.-- Y eso me
CONTINUA ISABEL.- Estamos en el consultorio del doctor Sanders a la espera de los resultados de los exámenes practicados a Michael, no puedo evitar sentirme nerviosa, deseo que solo sea estrés y cansancio - Amor todo estará bien. –Me dice con una tierna sonrisa- - Lo sé, es solo que no puedo evitar sentirme nerviosa –Le tomo la mano y entrelazo sus dedos con los míos- Pasado diez minutos llega el doctor y no con muy buena cara - Bien aquí tengo tus resultados Michael - ¿Y? - Tus exámenes de sangre salieron bien, pero tu TAC -La cara del doctor dice preocupación por todos lados- - ¿Qué pasa? dímelo sin rodeos -Dice Michael exasperado- - Tienes un tumor en el cerebro - Ambos nos quedamos en silencio - ¿Un tumor?- Repito sin mirar a Michael- - Sí, la ubicación del tumor hace imposible que pueda ser extraído con cirugía por ahora - ¿A qué te refieres con por ahora? -Noto a Michael tan sereno, mientras que yo siento que estoy a punto de explotar en llanto como una niña- - Sí c
ISABEL.- A la mañana siguiente.- No dormí más de una hora, esperando a que Michael aparezca, me pase toda la noche pensando, seguramente Michael estará pensando que no me quedaré con él, que no podré con esto, voy a la cocina y enciendo la cafetera, veo en la encimera la taza que le regalé hace dos días, sin poder evitar brotan lágrimas, el ruido del ascensor hace que pegue un brinco y rápidamente me limpio la cara y me echo un poco de agua, inhalo y exhalo, me coloco frente a la puerta esperando a que se abra, cuando abre veo a Michael con la misma cara que yo, con ojeras, hinchados de tanto llorar - ¡Hola! – Me dice casi susurrando- - ¿Dónde estabas? – Le reclamo cruzando mis brazos sobre mi pecho- - Pensando, ven debemos hablar -Caminamos hacia la estancia y nos sentamos en el sofá- - Michael si piensas que me voy a alejar de ti -Me interrumpe colocando un dedo en mis labios- - Isabel debo confesarte algo, seguramente después que te lo diga te irás y si lo haces está bien -
ADAM.-Hacía ya una semana que estábamos en Brasil ya estábamos terminando de viajar solo nos quedaban dos destinos, gracias al cielo por este trabajo que me mantuvo casi siempre sin pensar en Isabel, aunque el trabajo me ayudaba habían cosas como fotos en mi celular con ella que me la hacían recordar… Recibía llamadas de Jessica y de Aaron…Estaba en el hotel descansando y tomando una buena ducha, habíamos pasado dos semanas en la selva amazónica y disfrutaba una buena ducha con agua caliente, salí de la ducha con una toalla sobre mi cintura y secándome con la mano el cabello, abrí la pequeña nevera que estaba cerca de mi cama y tomé una cerveza, cuando escuché el llamado en mi puerta- Hermano déjame al menos... -No podía creer ver a la persona que estaba parada frente a mí- Isabel…- ¡Hola Adam! –Dice apenada-- ¿Qué haces aquí? ¿Cómo supiste?- ¿Podemos hablar?- Sí, por supuesto pasa -Ella me mira de arriba abajo y noto que solo tengo una toalla sobre mí- ¡Uhm! Voy a vestirme -Me
ISABEL.-Llegué a Nueva York y me dirigí al edificio donde vivía o donde vivo con Michael ya frente a él miro hacia arriba e inhalo profundamente antes de entrar deseaba volver con Adam no podía creer lo que estaba sintiendo por él, creí haberme enamorado de Michael pero no amo a Adam y a Michael lo quiero profundamente y ahora me necesita, procedo a entrar al edificio.El sonido del ascensor me saca de mis pensamientos se abren las puertas y me adentro dejando mis maletas en la entrada, solo hay un silencio ensordecedor, decido caminar hacia la estancia y no hay nadie, voy hacia el despacho de Michael donde la puerta está cerrada toco antes de entrar, nadie responde y dispongo a entrar vacío. Me dirijo hacia la habitación y escucho ruido la puerta está un poco abierta, la abro y escucho el ruido proveniente del vestier.Me coloco en el lumbral de la puerta del vestier y veo a Michael colocándose una corbata.- ¡Hola! -Con mi cara sonrojada le digo alzando mi mano, mientras él gira y