Nueva York.-ISABEL.-- ¿Apartaste cita para el doctor?- Si, amor mañana iremos, por favor enfócate en el evento del lanzamiento -Niego con la cabeza- ¡No! primero está tu salud, el lanzamiento lo podemos retrasar- De ninguna manera, este es tu momento, el evento ya está listo, la prensa está citada más bien debes enfocarte en tu imagen, ir al salón, el vestido que te pondrás- ¡Ay, Michael! Por favor ¿Cómo quieres que piense en eso? –Le grito sorprendida-- Amor, escúchame, estoy bien, mañana iremos al doctor y lo verás, seguro me mandara vitaminas y eso- Es solo que… pensar que puede pasarte algo -brota una lagrima y cae sobre mi mejilla, él me abraza-- Estaré bien tranquila, no pensemos en cosas negativas, yo siempre he sido un roble cielo, pero no podemos negar que no me estoy haciendo mas joven y me encanta que te preocupes por mí y que quieras que este bien para estar contigo- Pues sí, creo que te quiero más de lo que pensé -Le digo apretándome más a su pecho.-- Y eso me
CONTINUA ISABEL.- Estamos en el consultorio del doctor Sanders a la espera de los resultados de los exámenes practicados a Michael, no puedo evitar sentirme nerviosa, deseo que solo sea estrés y cansancio - Amor todo estará bien. –Me dice con una tierna sonrisa- - Lo sé, es solo que no puedo evitar sentirme nerviosa –Le tomo la mano y entrelazo sus dedos con los míos- Pasado diez minutos llega el doctor y no con muy buena cara - Bien aquí tengo tus resultados Michael - ¿Y? - Tus exámenes de sangre salieron bien, pero tu TAC -La cara del doctor dice preocupación por todos lados- - ¿Qué pasa? dímelo sin rodeos -Dice Michael exasperado- - Tienes un tumor en el cerebro - Ambos nos quedamos en silencio - ¿Un tumor?- Repito sin mirar a Michael- - Sí, la ubicación del tumor hace imposible que pueda ser extraído con cirugía por ahora - ¿A qué te refieres con por ahora? -Noto a Michael tan sereno, mientras que yo siento que estoy a punto de explotar en llanto como una niña- - Sí c
ISABEL.- A la mañana siguiente.- No dormí más de una hora, esperando a que Michael aparezca, me pase toda la noche pensando, seguramente Michael estará pensando que no me quedaré con él, que no podré con esto, voy a la cocina y enciendo la cafetera, veo en la encimera la taza que le regalé hace dos días, sin poder evitar brotan lágrimas, el ruido del ascensor hace que pegue un brinco y rápidamente me limpio la cara y me echo un poco de agua, inhalo y exhalo, me coloco frente a la puerta esperando a que se abra, cuando abre veo a Michael con la misma cara que yo, con ojeras, hinchados de tanto llorar - ¡Hola! – Me dice casi susurrando- - ¿Dónde estabas? – Le reclamo cruzando mis brazos sobre mi pecho- - Pensando, ven debemos hablar -Caminamos hacia la estancia y nos sentamos en el sofá- - Michael si piensas que me voy a alejar de ti -Me interrumpe colocando un dedo en mis labios- - Isabel debo confesarte algo, seguramente después que te lo diga te irás y si lo haces está bien -
ADAM.-Hacía ya una semana que estábamos en Brasil ya estábamos terminando de viajar solo nos quedaban dos destinos, gracias al cielo por este trabajo que me mantuvo casi siempre sin pensar en Isabel, aunque el trabajo me ayudaba habían cosas como fotos en mi celular con ella que me la hacían recordar… Recibía llamadas de Jessica y de Aaron…Estaba en el hotel descansando y tomando una buena ducha, habíamos pasado dos semanas en la selva amazónica y disfrutaba una buena ducha con agua caliente, salí de la ducha con una toalla sobre mi cintura y secándome con la mano el cabello, abrí la pequeña nevera que estaba cerca de mi cama y tomé una cerveza, cuando escuché el llamado en mi puerta- Hermano déjame al menos... -No podía creer ver a la persona que estaba parada frente a mí- Isabel…- ¡Hola Adam! –Dice apenada-- ¿Qué haces aquí? ¿Cómo supiste?- ¿Podemos hablar?- Sí, por supuesto pasa -Ella me mira de arriba abajo y noto que solo tengo una toalla sobre mí- ¡Uhm! Voy a vestirme -Me
ISABEL.-Llegué a Nueva York y me dirigí al edificio donde vivía o donde vivo con Michael ya frente a él miro hacia arriba e inhalo profundamente antes de entrar deseaba volver con Adam no podía creer lo que estaba sintiendo por él, creí haberme enamorado de Michael pero no amo a Adam y a Michael lo quiero profundamente y ahora me necesita, procedo a entrar al edificio.El sonido del ascensor me saca de mis pensamientos se abren las puertas y me adentro dejando mis maletas en la entrada, solo hay un silencio ensordecedor, decido caminar hacia la estancia y no hay nadie, voy hacia el despacho de Michael donde la puerta está cerrada toco antes de entrar, nadie responde y dispongo a entrar vacío. Me dirijo hacia la habitación y escucho ruido la puerta está un poco abierta, la abro y escucho el ruido proveniente del vestier.Me coloco en el lumbral de la puerta del vestier y veo a Michael colocándose una corbata.- ¡Hola! -Con mi cara sonrojada le digo alzando mi mano, mientras él gira y
ISABEL.-A la mañana siguiente.- Estoy despierta desde las cinco de la mañana, pensé que todo lo que estoy viviendo podría ser un sueño pero al ver mi cama vacía me doy cuenta que es la realidad pero ya tomé mi decisión.Me levanto me ducho y me visto, a esta hora ya Michael debe estar levantado, salgo de la habitación y veo la puerta de la otra cerrada - Frunzo el ceño- Me apresuro y bajo hasta la cocina para hacer un desayuno para mi sorpresa hay una mujer mayor preparando de comer.- ¡Buen día! ¿Quién es usted? - Digo frunciendo el ceño-- ¡Buen día señora!, soy Linda, la nueva ama de llaves -Asiente y se gira hacia la cocina-- ¿Ama de llaves? - Me acerco con cautela y me siento en una de las sillas-- Sí, el señor Michael me contrató ayer, me encargare de todo lo que tenga que ver con el lugar y su comida, me especializo en comidas saludables, disculpe que le pregunte ¿Usted es?- Isabel, soy… la prometida de Michael -Una voz me hizo pegar un brinco del asiento-- ¿Prometida? -
ADAM.-Salgo rápidamente de ahí, mi respiración esta agitada como si hubiese corrido un maratón, cierro mis ojos intentando calmarme.- Señor ¿Se encuentra bien? – Dice el hombre de traje-- ¡NO! Tu jefe una vez más se entromete -Le grito-- Él no decide por ella señor Dhorn, si por él fuera la alejaría para que no tenga que sufrir por su enfermedad, incluso le coloco condiciones pensando que ella no aceptaría, que se iría pero ella lo aceptó todo- Eso solo porque Isabel tiene un gran corazón y siempre piensa en los demás, más que en ella.- ¡Lo sé! Solo le queda poco tiempo de vida a mi jefe, permitale solo un poco mas de felicidad – Noto tristeza en su mirada-- ¡Lo lamento! Pero mi vida es Isabel, no tengo la culpa de lo él padece, además que está consciente de que ella me ama a mi - Pero también lo ama a él, recuerde eso señor Dhorn -Se da media vuelta y entra de nuevo al ascensor-Salgo del edificio con un sinfín de emociones rabia, decepción, tristeza una vez más Isabel me rec
Mykonos- Grecia.-ISABEL.-Estoy en la habitación observando el hermoso vestido de novia corte sirena color blanco nieve ceñido al cuerpo de seda el busto fruncido con un escote en V, espalda descubierta con tirantes entre cruzados es un vestido clásico pero elegante combina con el ambiente de Mykonos.Nos casaremos en un yate de lujo solo nosotros dos y los testigos que serán Jeff y Linda, nunca pensé que me casaría y menos en estas condiciones, solo para complacer a alguien al que le queda poco tiempo de vida.Desde que llegamos hace dos días la convivencia con Michael no ha sido fácil y me preocupa porque sé que esto no le hace bien, duermo sola en la habitación y me dirige la palabra para cosas puntuales, cosa que no entiendo porque me condicionó a que siguiera siendo su mujer, pero hice una promesa y la voy a cumplir.Salgo de la habitación para buscar a Michael, llego a su oficina y paso sin tocar veo que está al teléfono, está parado con una camisa estilo playera blanca y panta