ADAM.-Hacía ya una semana que estábamos en Brasil ya estábamos terminando de viajar solo nos quedaban dos destinos, gracias al cielo por este trabajo que me mantuvo casi siempre sin pensar en Isabel, aunque el trabajo me ayudaba habían cosas como fotos en mi celular con ella que me la hacían recordar… Recibía llamadas de Jessica y de Aaron…Estaba en el hotel descansando y tomando una buena ducha, habíamos pasado dos semanas en la selva amazónica y disfrutaba una buena ducha con agua caliente, salí de la ducha con una toalla sobre mi cintura y secándome con la mano el cabello, abrí la pequeña nevera que estaba cerca de mi cama y tomé una cerveza, cuando escuché el llamado en mi puerta- Hermano déjame al menos... -No podía creer ver a la persona que estaba parada frente a mí- Isabel…- ¡Hola Adam! –Dice apenada-- ¿Qué haces aquí? ¿Cómo supiste?- ¿Podemos hablar?- Sí, por supuesto pasa -Ella me mira de arriba abajo y noto que solo tengo una toalla sobre mí- ¡Uhm! Voy a vestirme -Me
ISABEL.-Llegué a Nueva York y me dirigí al edificio donde vivía o donde vivo con Michael ya frente a él miro hacia arriba e inhalo profundamente antes de entrar deseaba volver con Adam no podía creer lo que estaba sintiendo por él, creí haberme enamorado de Michael pero no amo a Adam y a Michael lo quiero profundamente y ahora me necesita, procedo a entrar al edificio.El sonido del ascensor me saca de mis pensamientos se abren las puertas y me adentro dejando mis maletas en la entrada, solo hay un silencio ensordecedor, decido caminar hacia la estancia y no hay nadie, voy hacia el despacho de Michael donde la puerta está cerrada toco antes de entrar, nadie responde y dispongo a entrar vacío. Me dirijo hacia la habitación y escucho ruido la puerta está un poco abierta, la abro y escucho el ruido proveniente del vestier.Me coloco en el lumbral de la puerta del vestier y veo a Michael colocándose una corbata.- ¡Hola! -Con mi cara sonrojada le digo alzando mi mano, mientras él gira y
ISABEL.-A la mañana siguiente.- Estoy despierta desde las cinco de la mañana, pensé que todo lo que estoy viviendo podría ser un sueño pero al ver mi cama vacía me doy cuenta que es la realidad pero ya tomé mi decisión.Me levanto me ducho y me visto, a esta hora ya Michael debe estar levantado, salgo de la habitación y veo la puerta de la otra cerrada - Frunzo el ceño- Me apresuro y bajo hasta la cocina para hacer un desayuno para mi sorpresa hay una mujer mayor preparando de comer.- ¡Buen día! ¿Quién es usted? - Digo frunciendo el ceño-- ¡Buen día señora!, soy Linda, la nueva ama de llaves -Asiente y se gira hacia la cocina-- ¿Ama de llaves? - Me acerco con cautela y me siento en una de las sillas-- Sí, el señor Michael me contrató ayer, me encargare de todo lo que tenga que ver con el lugar y su comida, me especializo en comidas saludables, disculpe que le pregunte ¿Usted es?- Isabel, soy… la prometida de Michael -Una voz me hizo pegar un brinco del asiento-- ¿Prometida? -
ADAM.-Salgo rápidamente de ahí, mi respiración esta agitada como si hubiese corrido un maratón, cierro mis ojos intentando calmarme.- Señor ¿Se encuentra bien? – Dice el hombre de traje-- ¡NO! Tu jefe una vez más se entromete -Le grito-- Él no decide por ella señor Dhorn, si por él fuera la alejaría para que no tenga que sufrir por su enfermedad, incluso le coloco condiciones pensando que ella no aceptaría, que se iría pero ella lo aceptó todo- Eso solo porque Isabel tiene un gran corazón y siempre piensa en los demás, más que en ella.- ¡Lo sé! Solo le queda poco tiempo de vida a mi jefe, permitale solo un poco mas de felicidad – Noto tristeza en su mirada-- ¡Lo lamento! Pero mi vida es Isabel, no tengo la culpa de lo él padece, además que está consciente de que ella me ama a mi - Pero también lo ama a él, recuerde eso señor Dhorn -Se da media vuelta y entra de nuevo al ascensor-Salgo del edificio con un sinfín de emociones rabia, decepción, tristeza una vez más Isabel me rec
Mykonos- Grecia.-ISABEL.-Estoy en la habitación observando el hermoso vestido de novia corte sirena color blanco nieve ceñido al cuerpo de seda el busto fruncido con un escote en V, espalda descubierta con tirantes entre cruzados es un vestido clásico pero elegante combina con el ambiente de Mykonos.Nos casaremos en un yate de lujo solo nosotros dos y los testigos que serán Jeff y Linda, nunca pensé que me casaría y menos en estas condiciones, solo para complacer a alguien al que le queda poco tiempo de vida.Desde que llegamos hace dos días la convivencia con Michael no ha sido fácil y me preocupa porque sé que esto no le hace bien, duermo sola en la habitación y me dirige la palabra para cosas puntuales, cosa que no entiendo porque me condicionó a que siguiera siendo su mujer, pero hice una promesa y la voy a cumplir.Salgo de la habitación para buscar a Michael, llego a su oficina y paso sin tocar veo que está al teléfono, está parado con una camisa estilo playera blanca y panta
ADAM.-- ¡Adam! –Jessica me recibe con una gran sonrisa y un abrazo, de inmediato le sostengo sus brazos para soltarme de su amarre- ¿Cómo pudiste mentirme con tanto descaro?- ¿De qué hablas? – Me mira confundida-- ¿De qué hablo? no finjas estoy seguro que Aaron te aviso que sé todo sobre Isabel y la maldita manipulacion de ustedes dos –Digo tensando mi mandíbula y presionando mis dientes, abre los ojos de la sorpresa, intentando hacerse la desentendida-- ¿Isabel?¡Sí! Isabel la mujer que realmente amo, sé todo lo de su pérdida de memoria, tu acuerdo y plan con mi hermano ¿Qué demonios te pasa? –Grito, pega un brinco asustada, dando un paso hacia atrás-- Adam yo te amo, siempre me he sentido atraída hacia ti y esa noche fue… fue…- No me interesa lo que fue esa noche para ti, para mí no fue nada estuve contigo pensando en Isabel, te pedí, te suplique que me dieras noticias de ella y aun así no lo hiciste ocultaste una verdad que para mí era importante por puro egoísmo vete de mi c
CONTINÚA ADAM.-A la mañana siguiente.-Durante toda la noche no pude pegar un solo ojo pensando en esa inesperada noticia, salgo del baño y me siento en el borde de la cama aun mojado y con la toalla en mi cintura, escucho el tono de mensaje de mi celular, voy hasta mi mesa de noche y lo tomo un mensaje de Jessica>Me tumbo en la cama- ¡Aaah! ¿Dios que voy a hacer? me levanto de la cama y me visto, tomo mis llaves y me pongo en camino hacia el consultorio, debo hablar con Jessica y aclarar las cosas.(…)Llego al centro médico y voy caminando hasta el consultorio toco la puerta y escucho una voz femenina que me da permiso a pasar.- ¡Buen día! –Veo a Jessica que alza la mirada y me mira dándome una gran sonrisa-- Pensé que no vendrías- Vine por mi hijo Jessica y porque tenemos que hablar y aclarar las cosas de como será todo a partir de ahora –cuando me va a responder una chica nos indi
ISABEL.-París, Francia Acabo de colgar la llamada de Jessica, me siento en el borde de la cama mirando hacia la bella ciudad de París, me siento triste ¿Cómo pude equivocarme tanto con ella? la consideraba mi amiga pero su manera de tratarme todo por un hombre.- ¡Está embarazada! -no sé si será verdad, pero, de ser así es algo que la unirá a él toda la vida, pongo mis manos sobre mi rostro, sé que ese bebe no tiene la culpa pero no voy a pedirle a Adam que se casé con Jessica y arruine su vida solo por un bebe, ella sabía lo que hacía que resuelva como una mujer y no como la hijita de papa y para ser sincera no quiero que se casen.- ¡Ay dios! ¿Pero que me pasa? yo no quiero que Adam se case pero yo si me casé con Michael, nunca pensé que podría ser tan egoísta- Si tan solo pudiera hablar con Adam, pero le prometí a Michael no volver a hablar con él en todo este año y medio -Escucho la puerta de la habitación abrirse y me repongo de inmediato-- ¿Isabel?- Sí, estoy aquí en el bal