Llegué tan desesperada al hospital, me acerqué a la recepcionista y le pregunté si había llegado un paciente, el señor Parker, cuando me confirmó me dio la dirección en donde estaba.
—Tercer piso, habitación 26.
Rápidamente aborde el ascensor y presione para qué se cerrará, y presionar el botón del tercer piso.
Baje y busqué a mi familia hasta verla a lo lejos, estaban Tati, mi tía, y mi mamá sentada.
En ese momento verla mi corazón dolió, se veía más vieja de lo que en realidad era, su semblante estaba bastante decaído.
Me acerco a mi tía y la abrazo, para luego abrazar a Tati, por ahora iba a olvidarme lo que había hecho mi madre solo por mi padre. Cuando la mujer me vio se levantó para abrazarme y comenzó a llorar como una bebé, yo me quedé allí dándole palmaditas en la espalda tratando de no llorar también.
Había pasado media hora, pero aún nadie se dignaba en decir nada, estaba a punto de entrar y preguntar qué pasaba, hasta que al fina
Al día siguiente Tati y yo vamos a la estación de policía con la cinta de la agresión a mi padre. Fue duro verlo indefenso y que esos malnacidos le pegarán cuando efectivamente le pedía que pararán.Voy hasta donde está la chica de recepción.—Vengo para una denuncia.— le digo amable está me da una hoja y una pluma.—Rellenas esto y luego puedes hacer la denuncia.Asiento y me siento para que mi prima me ayude a llenar el formulario, cuando ya lo he llenado, se lo entrego a la chica y está me indique que espere al oficial a cargo.—¿Rae?, ¿Rae Brooks?— me llama un oficial.—Sí, soy yo.—¿Wilson?—se queda confundida Tati, y este asiente. Yo los miró confundida hasta que Tati me explica, lo que sucede. —No te acuerdas al niño regordete que siempre jugaba con nosotras de niñas, y que Alayha le decía osito.Miró al chico cuando recuerdo quién es, la maldita pubertad a él le dio mejor que al popular de la secundaria. Alto, musculoso
Gabe.Estoy en una cena con un socio, Anastasia está a mí lado. La traje ya que necesitaba a alguien conmigo porque Sara no había aún sacado el pasaporte, le debía mucho ya que estaba haciendo un excelente trabajo mientras yo pensaba en Rae, no la había llamado en dos días aún recordaba los gemidos que me había regalado el día que la excite para que se tocará, pero ahora la anhelaba a ella frente a mí mientras me la cogía.El sonido de mí teléfono con una notificación hizo que me disculpara para salir de allí, al final Anastasia tenía los ojos de los inversionista en ella.Miró mí teléfono en donde el jefe de seguridad de Rae me manda unas fotos donde está en un barranco con Adam. Eso no me gusta pero me río cuando la castaña al parecer le da una paliza, esa era mí chica, aunque el pánico me estaba controlando, llamé a José y este contesto en seguida.—¿Qué más hizo mí esposa?—pregunto.—Su padre está en cuidado intensivo porque al pare
Un mes después.Rae.Estaba corriendo por el pasillo, mientras Gabe me seguía por atrás. Había recibido la mejor noticia del mundo. Mí padre había pasado su fase crítica y además se había despertado.En un mes pasaron muchas cosas, Anastasia estaba en todo los noticiero por haberte saboteado desfiles y drogarse en los vestidores, nadie sabía nada de ella, y su prometido había salido a hablar que si había ocurrido eso pero que desde hace meses estába en tratamiento, y que si alguien la veía se comunicará con él.Mí madre y yo habíamos comenzado terapia, faltaba mucho caminó para volver a ser como antes pero era un paso a la vez. Mí relación con Gabe iba de lo mejor, y ahora saber que mí padre estába mejor era el mejor regalo.—¿Cómo está?—digo a mí mamá, hace unos días fue su cumpleaños así que la lleve a arreglarse y se veía muy bien.—El médico está adentro, ya va a salir para decirnos.— responde, emocionada de poder volver a ver a su m
DavidHabía comenzado a planear una competencia para grupo Collingan, sabía que había echo cosas malas y además Gabe y yo no éramos para estar en una sola empresa.Quería ser como los hermanos de Puma y Adidas, con el dinero que había ahorrado comencé lo invertí en una oficina pequeña que había alquilado, y luego había invertido lo demás en productos de una empresa pequeña que me daba un excelente producto. Mí personal no era mucho solo habían tres personas pero creía en mí, estaba orgulloso de esto.—Señor Collingan hay un hombre que quiere hablar con usted.— dice mí secretaria dándome el teléfono.—Buenas tardes, D.K. Raigth company, ¿en qué puedo ayudarlo?El hombre me habló que era de una compañía en Alemania y necesitaba materia prima, adem
Habían pasado dos semanas y mí padre ya estaba sintiéndose mejor en salud y en aspecto. Este había pasado tiempo hablando con Gabe, era su yerno favorito, hasta incluso lo llevaba a la empresa y ayudaba en algo.—Creo que mí padre me va a quitar a mí marido— me quejó con Andrea que estaba haciendo botanas para los hombres de la casa, ya que estaban viendo un partido y ambos le iban al mismo equipo.—No se angustie, tiene toda una vida para vivir con su marido.— sonrió Andrea y salió a llevarle la botanas para luego regresar.—Me agrada de que, este se divierta ya que Gabe solo habla por teléfono con su padre. No me molesta compartir a mí padre, pero también quiero que me de atención y de otro tipo.—¡Señora!— exclamó Andrea y yo me reí.Escuche como la puerta de entrada se abría y fui a ver quién era, mí madre entra y saluda a los chicos pero ellos están entretenidos viendo el juego.—Hola cariño— me saluda mí mama.—¿Quién te hizo una llave?—pregunto.—Le di
Gabe. “—Quiero el divorcio.” Se repite en mi menté. La llamada me da directamente al buzón de voz, trató de nuevo y nada. No me responde. Estrelló el teléfono contra el escritorio, estoy preocupado y molestó. Llevó mas cuatro horas sin saber de ella. Mi teléfono vibra en mis manos y lo tomo con las esperanzas de que sea ella, contesto y la voz de Ernesto me molesta. —Señor no esta ni en su antiguo apartamento, tampoco esta en la casa de su amiga ¿Seguimos buscando?— pregunta y yo suspiro. —Sigan buscando, hasta debajo de las piedras.— colgué. ¿Qué es lo que sucede?, ¿Qué es lo que la alteró? Su actitud después de salir de la clínica se notaba que estaba asustada y nerviosa, pero ¿Por qué? Me siento en la silla de mi escritorio, para tranquilizarme quería tenerla a mi lado, se había vuelto alguien tan importante en mi vida que no supe en que momento pasó. Traté de adelantar muchas cosas del trabajo ya que
Rae.Me desperté y vi directamente a mi lado. Él no estába. Me fijé por toda la habitación y allí estába frente al espejo tratando de hacerse el nudo de la corbata.Me levanté y fui a ayudarlo, cuando termine este no dijo nada y agradecí eso. Estaba echa un mar de caos.Me dirigí hasta la puerta puerta del baño, pero este me detuvo.—Te quieres divorciar porque aún lo amas, ¿Verdad?Sabía que estaba hablando de Adam, aun no entendía su recelo con él, parecía que su odió venía desde hace años, ¿Pero cómo sabía que me había visto con Adam?—No, es eso.— respondí.—¿Y que es Rae? Habla claro, ya estoy cansado de este estúpido juego.—¿Cuál es el problema ahora?, ¿No era esto lo que quería
Llegue a la casa después de estar acompañando a Jangger, me alegro saber que el malentendido se había resuelto, pero sabía que los años perdidos nunca iban a volver. Esperaba que mi abuelo hubiera tenido su merecido, por todo el daño que había causado, a su propio familia. No podía imaginar el dolor que mi tía había experimentado todo estos años. Busco a mí padre pero al parecer debía de seguir en el hipódromo con Gabe, buscó a mi madre y la veo limpiando el jardín, que durante semanas había descuidado. —¿Quieres que te ayude?—pregunto al salir. —No, tranquila ya he terminado. Veo como se levanta de la tierra para tomar la manguera a un lado y regar las plantas. —Jangger ya lo sabe.— mi madre me mira, se ve preocupada y la entiendo. —Lo tomó bien, solo que necesita tiempo para asimilarlo del todo. —Estoy feliz de qué todo esto haya acabado bien, Rea no va a ser la misma pero Jangger se merecía la verdad. —¿El padre de Jangger?—