“No hablemos de la familia Hanyu por ahora. La prioridad ahora es resolver el asunto de la familia Kanagawa. Puedo acceder a ello, pero los otros miembros de la familia no estarán de acuerdo. ¿Qué te parece esto? Primero vayan a descansar, y yo haré que ustedes se reúnan para discutir el asunto juntos”.

Takuya no tenía ningún interés en la familia Hanyu por ahora. Lo único en lo que podía pensar ahora era en su hija. Si casaba a su hija con Kanagawa Kai, viviría arrepentido y con remordimientos por el resto de su vida.

“Vamos. Deberíamos ir a descansar primero”. Fujiko agarró la mano de Gerald con naturalidad.

“Entonces, regresaremos primero”. Gerald asintió y dijo con frialdad.

Mirando las espaldas de su hija y Gerald, Takuya suspiró en silencio. Si la familia no se hubiera encontrado con estos cambios, él habría levantado las manos y aceptado que su hija saliera con Gerald. No por ninguna otra razón, sino solo porque su hija estaba dispuesta a hacerlo. Además, Gerald era capaz y